SAN NICOLAS, Marzo 30, (PUNTO CERO-La Opinión) Los incovenientes que la lluvia caída desde el lunes ocasionó en distintos barrios y localidades del Partido obligaron a la evacuación de alrededor de 200 personas. Desde el Municipio se coordinaron las tareas de asistencia.
Los vecinos de la ciudad de San Nicolás y pueblos aledaños vivieron desde el lunes horas de marcada incertidumbre cuando los más de 200 milímetros de lluvia caída obligaron la evacuación de alrededor de 200 personas que debieron ser alojadas en centros especialmente montados por el Municipio en la sede del batallón y en parroquias localizadas en zonas menos comprometidas por el temporal que azotó una amplia zona del territorio bonaerense.
Según datos obtenidos por LA OPINION las consecuencias más duras del temporal se sintieron en sectores que habitualmente se ven afectados por los avatares de fenómenos climáticos de estas características, signados por precipitaciones abundantes y persistentes en el tiempo. Los barrios periféricos y varias de las localidades que pertenecen a la zona rural del Partido de San Nicolás de los Arroyos resultaron los más perjudicados.
De acuerdo a la información que circula en los medios de comunicación de esa localidad, las comunidades más afectadas fueron aquellas ubicadas sobre el corredor vial de la ruta nacional Nº 188, en dirección a Pergamino, lo que de acuerdo a los primeros análisis que se hacen por estas horas, se atribuye a las características geográficas de la zona rural del Partido y a la falta de obras de canalización para encauzar el caudal de agua que proviene de los campos.
En el inventario de los sectores que experimentaron las pérdidas más significativas y el mayor impacto aparecen las localidades de La Emilia, Eréscano y Conesa y algunos barrios del casco urbano de San Nicolás.El fenómeno climático que también se hizo sentir con diversa intensidad en localidades del norte bonaerense y de la provincia de Santa Fe se inició el lunes y continuó durante las jornadas siguientes, lo que a decir de los actores que tuvieron a su cargo la coordinación de los operativos de asistencia, obligó a la evacuación y complicó la ejecución de acciones para minimizar el impacto sobre determinados sectores.
Evacuación
Como sucede siempre que es necesario evacuar a las personas afectadas por las inundaciones desde el área de Defensa Civil del Municipio se coordinaron los dispositivos y se dispuso el alojamiento de las familias afectadas en centros especialmente dispuestos para contener la emergencia.
Debido a la sensación de zozobra que generan este tipo de situaciones, desde el mismo lunes los medios de comunicación de San Nicolás registraron el testimonio de quienes reclamaron por los anegamientos producidos en diversos sectores de la zona urbana.
Al cierre de esta edición y en virtud de los pronósticos del Servicio Meteorológico Nacional que indicaban la continuidad del fenómeno, en la localidad de La Emilia se seguía de cerca el comportamiento del Arroyo del Medio, cuenca en la que se generaron los principales inconvenientes.
Los vecinos de la ciudad de San Nicolás y pueblos aledaños vivieron desde el lunes horas de marcada incertidumbre cuando los más de 200 milímetros de lluvia caída obligaron la evacuación de alrededor de 200 personas que debieron ser alojadas en centros especialmente montados por el Municipio en la sede del batallón y en parroquias localizadas en zonas menos comprometidas por el temporal que azotó una amplia zona del territorio bonaerense.
Según datos obtenidos por LA OPINION las consecuencias más duras del temporal se sintieron en sectores que habitualmente se ven afectados por los avatares de fenómenos climáticos de estas características, signados por precipitaciones abundantes y persistentes en el tiempo. Los barrios periféricos y varias de las localidades que pertenecen a la zona rural del Partido de San Nicolás de los Arroyos resultaron los más perjudicados.
De acuerdo a la información que circula en los medios de comunicación de esa localidad, las comunidades más afectadas fueron aquellas ubicadas sobre el corredor vial de la ruta nacional Nº 188, en dirección a Pergamino, lo que de acuerdo a los primeros análisis que se hacen por estas horas, se atribuye a las características geográficas de la zona rural del Partido y a la falta de obras de canalización para encauzar el caudal de agua que proviene de los campos.
En el inventario de los sectores que experimentaron las pérdidas más significativas y el mayor impacto aparecen las localidades de La Emilia, Eréscano y Conesa y algunos barrios del casco urbano de San Nicolás.El fenómeno climático que también se hizo sentir con diversa intensidad en localidades del norte bonaerense y de la provincia de Santa Fe se inició el lunes y continuó durante las jornadas siguientes, lo que a decir de los actores que tuvieron a su cargo la coordinación de los operativos de asistencia, obligó a la evacuación y complicó la ejecución de acciones para minimizar el impacto sobre determinados sectores.
Evacuación
Como sucede siempre que es necesario evacuar a las personas afectadas por las inundaciones desde el área de Defensa Civil del Municipio se coordinaron los dispositivos y se dispuso el alojamiento de las familias afectadas en centros especialmente dispuestos para contener la emergencia.
Debido a la sensación de zozobra que generan este tipo de situaciones, desde el mismo lunes los medios de comunicación de San Nicolás registraron el testimonio de quienes reclamaron por los anegamientos producidos en diversos sectores de la zona urbana.
Al cierre de esta edición y en virtud de los pronósticos del Servicio Meteorológico Nacional que indicaban la continuidad del fenómeno, en la localidad de La Emilia se seguía de cerca el comportamiento del Arroyo del Medio, cuenca en la que se generaron los principales inconvenientes.
Aunque las consecuencias de este temporal se atribuyen a la cantidad de agua caída y a la forma en que se sucedieron las precipitaciones, las situaciones vividas en San Nicolás y en zonas aledañas volvieron a poner en el centro de la escena la necesidad de avanzar en la ejecución de obras de defensa y de canalización en sectores que resultan claves para evitar el desborde de las aguas. (PUNTO CERO-La Opinión).
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