viernes, septiembre 26, 2008

TRES DE FEBRERO. EN UN HOSPITAL PÚBLICO DE LA PROVINCIA EFECTÚAN CIRUGÍAS QUE NO DEJAN CICATRICES

TRES DE FEBRERO, Setiembre 26, (PUNTO CERO) En el Bocalandro de Tres de Febrero operaron a través de la vagina la vesícula de ocho mujeres. La técnica permite intervenir también el apéndice y el estómago por la boca o el recto. Posibilita pos operatorios breves, con menos dolor y diminuye los riesgos de hernias y trastornos respiratorios propios de operaciones con grandes incisiones.
Una técnica de última generación que permite operar a través de orificios naturales del cuerpo, como la boca, la vagina y el recto posibilitó intervenir a cuatro personas el lunes y martes pasado en el hospital provincial ‘Carlos Bocalandro’ de Tres de Febrero. Entre hoy y mañana se operarán otras cuatro personas más en ese establecimiento mediante este procedimiento de última generación.
“Mi padre era cirujano y hace muchos años me decía ‘grandes cirujanos, grandes incisiones’, hoy vamos en el sentido contrario”, comentó el médico argentino Santiago Horgan, quien actualmente es director del área de cirugía mínimamente invasiva de la Universidad de California y, en su paso por la Provincia, estuvo a cargo de las operaciones que se llevaron a cabo esta semana en Tres de Febrero.
El año pasado, Horgan ya había venido al país para efectuar las primeras intervenciones de este tipo. Luego continuó efectuándolas en Estados Unidos y, en esta oportunidad, regresó convocado por el Ministerio de Salud provincial para efectuar una serie de cirugías programadas.
Las imágenes de las operaciones son sorprendentes: permiten observar cómo Horgan y equipo, haciendo uso de un endoscopio, sacan el apéndice o parte del estómago por la boca. También es posible ver cómo extirpan una vesícula con cálculos por la vagina o el recto.
“Esta técnica constituye un avance por sobre la cirugía laparoscópica, que es aquella en la que se emplean pequeñas incisiones o cortes”, agregó Alberto Ferreres jefe del servicio de cirugía del hospital provincial Bocalandro, quien formó parte de las intervenciones que se llevaron a cabo en ese establecimiento provincial.
Los beneficios de utilizar los orificios naturales para operar no pasan sólo por evitar las antiestéticas cicatrices, “son, además, intervenciones que provocan menos dolor en el postoperatorio, tienen menos riesgo de acarrear hernias y problemas respiratorios -propios de aquellas cirugías en las que se hacen grandes cortes-, y además la persona se va a su casa casi de inmediato”, comentó Horgan quien durante su estadía en la Provincia capacitó a parte del personal del Bocalandro.

Cuándo se usa
Hasta el momento las operaciones que se pueden efectuar con esta técnica son las de apéndice por la boca, la vagina o el recto; la vesícula por vía oral y vaginal y contra la obesidad, también a través de la vagina.
Consultado sobre cómo es posible llegar a la vesícula a través de la vagina, Horgan aseguró que “es muy sencillo: introducimos el endoscopio por el fondo de saco posterior de la vagina hasta llegar al órgano que queremos intervenir, de modo tal, que sólo usamos el orificio vaginal para llegar por un camino lateral a la vesícula”, explicó el cirujano y aclaró que en ningún caso se toca al útero.
En todas estas intervenciones los profesionales utilizan un endoscopio en el cual colocan los elementos de trabajo de una cirugía tradicional, como tijeras y pinzas. El cirujano observa en una pantalla el recorrido del endoscopio y, por un sistema informático, da la orden de actuar a cada uno de esos elementos en el momento preciso.
Horgan señaló que una de las limitaciones para avanzar en estos procedimientos pasa por resistencias culturales. “Si un ginecólogo quiere hacer una intervención por la vagina a nadie le sorprende, pero cuando lo sugiere un cirujano algunas se asustan porque asocian a nuestra especialidad con las incisiones tradicionales”, comentó Horgan.
En este sentido, el experto detalló que para poder trabajar sobre el aparato reproductor o digestivo, él como los miembros de su equipo fueron formados específicamente en la universidad de California, de modo tal “que ninguno de los órganos se ven alterados por esta práctica, al contrario, la persona evita grandes cicatrices, fuertes dolores e internaciones extensas”, concluyó. El director provincial de hospitales, Sergio Alejandre, comentó que si bien esta visita “forma parte de un plan de capacitación de los recursos humanos”, por el momento el Bocalandro no cuenta con el equipamiento necesario para continuar con estas intervenciones en forma rutinaria, algo que se espera adquirir en los próximos años. (PUNTO CERO).

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