(La Política OnLine). Tras la escandalosa sesión en la Legislatura en la que se le dio media sanción a la ley del sciolismo, continúan las imputaciones de la oposición que acusa al gobernador de haber aplicado un impuestazo de forma ilegítima. El oficialismo se defiende, mientras los gremios paran en repudio a la norma y la Mesa Agropecuaria se moviliza a La Plata.
El proyecto de reforma impositiva elaborado por Daniel Scioli sigue desatando polémicas en la política bonaerense, puesto que mientras que ya hubo una reacción gremial ante la media sanción otorgada a la norma el pasado miércoles en la sesión de la Cámara de Diputados, la oposición intenta invalidar el texto y desde el oficialismo lo salieron a defender con uñas y dientes.
En el sector sindical, el polémico proyecto ya tuvo sus consecuencias. Desde ayer, los trabajadores del puerto de Bahía Blanca realizan un paro total de actividades en repudio al artículo de la nueva norma que dispone una alícuota para la carga y descarga de los 14 puertos bonaerenses.
Según los gremios y la oposición, eso atenta contra las inversiones y puede provocar que los exportadores no elijan los puertos bonaerenses para vender su mercadería.
La Mesa Agropecuaria en tanto, se reunió para idear una estrategia para convencer a los senadores de que no deben aprobar la ley que ya cuenta con media sanción de Diputados. En ese sentido, el próximo martes los productores rurales realizarán una marcha hacia el centro de La Plata y se concenctrarán frente al Senado bonaerense, en la calle 7 y 51, apenas a cien metros de la Casa de Gobierno.
El objetivo de la Mesa Agropecuaria es ejercer presión sobre los senadores que tratarán el proyecto la semana que viene. Lo que cuestionan los productores el aumento del Inmobiliario Rural, que oscilará entre el 20 y 30 por ciento.
El escándalo
Como adelantó este medio, la sesión del miércoles estuvo teñida de una dosis de escándalo, puesto que al oficialismo le faltaba un solo diputado para alcanzar el quórum. Luego de obtenerlo, ese diputado (Patricio López Mancinelli) se paró de su banca para ir al baño, junto con la diputada Alicia Tabarés.
Al instante todos los diputados de la oposición, al ver que el oficialismo perdería el quórum sin esos dos diputados sentados, se retiraron del recinto, con el afán de dejar al oficialismo con 45 legisladores sentados, dos menos de los 47 ( la mitad más uno de la Cámara) necesarios para tratar el proyecto.
Fue entonces cuando el presidente del bloque oficialista, Raúl Pérez, un viejo conocedor de las artimañas de la Legislatura, pidió un cuarto intermedio y cuando López Mancinelli y Tabarés regresaron a sus asientos, el oficialismo trató la ley y la aprobó rápidamente sin la oposición presente.
Es por eso que el diputado de Unión Pro, Ismael Passaglia, cuestionó la legitimidad de la aprobación del proyecto y dijo, según el diario platense Diagonales, que el oficialismo había perdido el quórum en el momento de sesionar.
Raúl Pérez lo cruzó duramente y declaró, según el mismo matutino, que si continuaba con esas “mentiras”, lo iba a denunciar penalmente, puesto que la sesión había sido filmada y había pruebas suficientes para demostrar que el oficialismo logró el quórum legítimamente.
La fractura
Como explicó este medio, el diputado que le permitió al oficialismo obtener el quórum fue el presidente del bloque de la Concertación, Patricio López Mancinelli, a quien apuntaron desde la oposición por ser “funcional” al sciolismo.
En diálogo con La Política Online, López Mancinelli aclaró que no es cobista sino que siempre fue sciolista, junto a su jefe político, que no es Julio Cobos sino José Eseverri, intendente de Olavarría y que incluso fue candidato testimonial del oficialismo en las últimas elecciones y presentó candidatos a concejales del Frente para la Victoria en su distrito.
El legislador explicó a este medio que “durante los dos años que fui diputado no falté a ninguna sesión, no veo por qué no me debía sentar en mi banca, ya que para eso me pagan mi sueldo”.
López Mancinelli acusó a la oposición de “esconderse detrás de las cortinas” para complicar a Scioli y de hacer “chiquilinadas” para impedir el tratamiento de la ley.
“Si se hubieran quedado en sus bancas, el oficialismo habría perdido 47 a 45, puesto que tanto yo como Emilio Monzó votamos en contra”, señaló el legislador de Olavarría a este medio.
Por otro lado, el diputado aclaró que formará un monobloque y que de los otros siete diputados que integraban el bloque de la Concertación, fracturado una vez terminada la sesión del miércoles, seis pertenecen al cobismo y uno, Horacio De Simone, responde a Gustavo Posse, intendente de San Isidro. Los seis cobistas formarían un bloque llamado ConFe; todavía no se sabe qué determinación tomará De Simone.
López Mancinelli explicó a este medio que no lo echaron del bloque, como había trascendido y que el bloque de la Concertación estuvo a punto de quebrarse en diciembre.
También dijo que si bien no puede desmentir otra versión que lo indicaba como futuro compañero de Emilio Monzó en un potencial bloque nuevo, tampoco puede precisar si eso se hará efectivo.
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