miércoles, septiembre 30, 2009

Polémica en Morón con dos supuestos “ñoquis” de Sabbatella

Dos concejales y operadores del intendente se licenciaron para encarar el armado del sabbatellismo en provincia y Capital. Sugestivamente, aparecen en la nómina de funcionarios de la Municipalidad cobrando sueldos de casi 7 mil pesos. Sin embargo, aseguran que cumplen tareas en el Ejecutivo por la transición de diciembre, cuando Sabbatella deje el cargo, y que son muchos los que ocupan cargos ejecutivos y políticos.
El portal web del municipio de Morón es un verdadero ejemplo. La administración de Martín Sabbatella desarrolló un marco de información pública que muchos otros deberían copiar. Desde allí se puede acceder hasta el detalle del padrón de empleados públicos y los sueldos que cobran con el dinero de los contribuyentes. Pero el intendente, con esta acción, pudo haber levantado los barrotes de su propia jaula.

La información surgió en un medio local, Agencia del Oeste. Según explicaba, dos concejales y operadores políticos de Sabbatella habían pedido licencia en sus cargos sin goce de sueldo después de las elecciones del 28 de junio. Sin embargo, aparecen -sin que media alguna explicación o función específica- en la nómina que el municipio publica como funcionarios, cobrando un sueldo de casi 7 mil pesos.

Los nombres no son dos tomados al voleo. Se trata nada menos que de dos ex presidentes del Concejo Deliberante de Morón. El primero es Adrián Grana, clave en el equipo de Sabbatella y ex candidato a senador provincial por el Partido Encuentro que comanda el intendente y diputado electo; el otro es José Cruz Campagnoli, el delfín designado para “armar” en Capital Federal.

Según pudo verificar La Política Online en la nómina de empleados públicos correspondiente al mes de septiembre, Grana figura con un cargo de Secretario de 40 horas, con un sueldo de 6398,13 pesos. ¿Dónde? En la Secretaría Privada del mismo Sabbatella. Campagnoli tiene un cargo similar, pero en la órbita de la Jefatura de Gabinete. Cobra 6319,20 pesos.

El medio local asegura que cuando consultó por el modo de subsistencia de estos supuestos “ñoquis”, explicaron que algunos “militantes-trabajadores municipales” compran bonos y colaboran con el Partido para poder solventar los gastos de esos dirigentes, hoy abocados a caminar la Provincia y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Mientras Grana tiene la ardua tarea de instalar a Sabbatella en el interior de la provincia para sentar las bases de su sueño, suceder a Daniel Scioli en la gobernación en 2011, Campagnoli es el bendecido por el intendente para tender las redes en el ámbito porteño. De hecho, de no mediar acuerdos con algún espacio (¿Pino Solanas?), hoy sería su candidato a Jefe de Gobierno.

Transparencia y tareas dobles

La Política Online se comunicó con la Municipalidad y, a la brevedad, respondieron el llamado. El encargado de responder las inquietudes fue Fernando Torrillate, subsecretario en la Secretaría Privada de Sabbatella y ocupante de una silla en la mesa chica del intendente.

Lejos de desmentir los cargos de Grana y Campagnoli, confirmó que ambos dejaron su banca en el Concejo Deliberante para ocupar cargos en el Ejecutivo pero que no son ñoquis, porque trabajan en los puestos en que se los asignó. “Todos los concejales y funcionarios, en general, además de nuestros cargos nos dedicamos a hacer política. No nos desempeñamos sólo como técnicos, sino que pertenecemos a un partido”, empezó su explicación.

Así da cuenta de que son varios los funcionarios de Sabbatella que son concejales de licencia. Por caso –además de los dos cuestionados-, el secretario de Gobierno, Lucas Ghi –además presidente del partido-, o el secretario Privado, Diego Espina, están en la misma situación. Todos integraron la lista de Nuevo Encuentro y, tras ganar sus bancas, pasaron al Ejecutivo.

Ghi, cuando asuma Sabbatella como diputado el 10 de diciembre, será el nuevo intendente de Morón, tras 10 años de gestión sabbatellista. Ahí reside una de las explicaciones. “Necesitamos que Grana y Campagnoli se desempeñen en áreas ejecutivas por la sucesión de Sabbatella y la transición a Lucas Ghi”, contó Torrillate a La Política Online.

“No es un gobierno en el que tengamos que esconder lo que hacemos y estamos orgullosos de nuestra práctica política. Hacemos un culto de la transparencia”, amplió el funcionario explicando la situación amablemente, sin saber aún si Grana y Campagnoli volverán a sus bancas en el Concejo Deliberante o si permanecerán un tiempo más en la Municipalidad. “Hay que ver cómo llegamos a diciembre”, se justificó por la imprecisión Torrillate.

Otra fuente, por último, acercó otro dato curioso. A nivel nacional o provincial, son varios los organismos de control que tiene el Poder Ejecutivo, en el terreno municipal la cosa es distinta: El Concejo Deliberante es quien ejerce el poder de policía sobre la Municipalidad y el responsable de verificar los contratos. Claro está, más allá de los cuestionamientos por los cargos y sueldos, el movimiento constante de piezas que implementa Sabbatella es cuanto menos cuestionable.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Que trucho, sean mas inteligentes por lo menos. Sabbatella usa plata del estado para desarrollarse políticamente? Cuando bajas del sarmiento en la estación de Moron en época de campaña vas a ver una plaza. Otra cosa que vas a ver es a 14 promotoras del Frente Para la Victoria (el candidato local es Juanchi, secretario general del ANSES,,,, caja del estado), a 14 promotoras del PRO, y a 6 o 8 MILITANTES del EDE.
Gracias por el intento pero a las y los vecinos y vecinas de Moron no hace falta que nos vengan a contar quien Sabbatella por que lo vemos en la calle, insisto gracias por el intento igual.


sir.charlesdodgson@gmail.com