Cerrando la Muestra de Teatro Bonaerense 2010 el grupo organizador presentó "Mi Mujer Es El Plomero" de Hugo Marcos, y se realizó la entrega de premios de esta 29° edición.
Mejor escenografía:
"VAYA, RAMONA VAYA" Gente de teatro - Chascomus.
La escenografía mostraba una casa de una familia adinerada, la señora Mónica, con su ceguera para percibir el mundo más allá de sus alfombras y sus jardines.
Mejor Actriz de Reparto:
BETINA HERNÁNDEZ por Chau Misterix - Elenco de la Dirección de Cultura de la Municipalidad de Villa Gesell.
Betina Hernández interpretaba a una niña, compañera de aventuras de Rubén, quien junto a sus amigos entrando a la pubertad, viven su entrada al mundo de los adultos.
Mejor Actor de Reparto:
FAVIO TOLOSA por Chau Misterix - Elenco de la Dirección de Cultura de la Municipalidad de Villa Gesell.
Chiche, es el personaje que acompaña a Rubén en la fantasía de convertirse en héroe, siendo su ayudante contra los malos.
Mejor actriz:
IRMA GOMEZ, por Vaya Ramona Vaya - Gente de teatro - Chascomús.
Irma Gomez, interpreta a Ramona, la empleada doméstica proveniente de una geografía hostil, miserable, inimaginable y temible para quien no la conoce, y a la vez habitual y lógica para quien la soporta.
Mejor actor:
CRISTIAN LÓPEZ, por Chau Misterix - Elenco de la Dirección de Cultura de la Municipalidad de Villa Gesell.
HORACIO ZARATE. Por Sánchez, Esquina Manchini - ARTECOM Ciudad de Bolivar.
Cristian López interpreta a Rubén, quien fantasea con su ídolo, imaginando ser aquel héroe omnipotente. En su fantasía convierte a sus amigos en personajes de una historieta que se desarrolla en su imaginación, hasta llegar a la adultez donde debe decirle definitivamente Chau a Misterix.
Horacio Zarate por su parte interpreta a Sánchez, un cabo que acompaña a Manchini en la búsqueda del Ser Nacional y demuestra ser miedoso pero a la vez muy gracioso.
Mejor Obra:
CHAU MISTERIX (Mauricio Kartum) Elenco de la Dirección de Cultura de la Municipalidad de Villa Gesell.
Sólo cuatro actores resuelven escénicamente esta pieza, una de las obras más representadas en la Argentina en los últimos años.
Más de cincuenta versiones en el teatro profesional y en el independiente, y una cantidad innumerable de puestas en escuelas y talleres, que la han adoptado como material adecuado para sus objetivos didácticos entre jóvenes actores.
La acción se sitúa en un suburbio, durante un día de carnaval a fines de la década del '50. Sus protagonistas: cuatro niños entrando a la pubertad, -dos hombres y dos mujeres- vivirán en ese día su rito iniciático, su entrada al mundo de los adultos, con sus pasiones, su dolor, y el inevitable contacto con la traición que irrumpe en aquel paraíso perdido.
Chau Misterix - ha sido presentada con versiones también en Uruguay, Chile, Perú, Ecuador, Venezuela, Colombia, México, y Estados Unidos-, resulta por su temática y estilo un material fácilmente adaptable a cualquier idiosincrasia.
Mejor Puesta en Escena:
DE LA ESPERA DE LAS COSAS Grupo C.A.B.A.
Buenos Cata espera que algo cambie; Fermín, poder sacarse algo de encima; Vanina, estar menos sola; y Lisandro ... quizás algo que lo defina, algo que le permita decir "este soy yo". Pero el problema de esperar es qué vamos a hacer cuando eso que esperamos llega. Si la esencia del que espera es esperar, ¿acaso lo esperado no atenta contra esa esencia? ¿Acaso no debe por eso ser destruido, para que podamos seguir esperando sin que nada nos moleste? En definitiva, la espera es un acto profundamente egoísta, y de una soledad angustiante.
Mejor Dirección:
CLAUDIO O'CONNOR por Chau Misterix - Elenco de la Dirección de Cultura de la Municipalidad de Villa Gesell.
Mejor Elenco:
ARTECOM - Sánchez, Esquina Manchini - Ciudad de Bolívar.
Premio especial del jurado:
MaRini, por la puesta en escena de CHACO, CONTRAPUNTO ENTRE LOS YUYARALES.
Esta obra surge de una serie de improvisaciones que tuvieron por objeto hacer resurgir las diferentes formas poéticas del actor tanto discursivas como corporales. A partir de procedimientos formales de ruptura y disociación, hemos creado una dramaturgia que nace dentro de la experiencia escénica.
Chaco es una pincelada subjetiva sobre el litoral, sobre lo nativo, sobre lo trágico y lo cómico de una región; infiltrado por la historia y la guerra, por el deseo en todos sus órdenes, por el delirio y la venganza. Resulta de ello un texto atravesado por dos voces: una voz nativa, sufrida y pícara y otra miserable y extranjera.
Dos voces que tratan, sobre todo, de poner en alza lo poético, de alcanzar un territorio rasgándolo, es decir, ligando lo sagrado con lo profano.
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