jueves, diciembre 02, 2010

Lanús. El Concejo aprobó el Presupuesto y el aumento de las tasas.

El cálculo de recursos para el año que viene, que será de 648 millones de pesos, fue avalado ayer por 14 de los 24 concejales. Aprobaron también una ordenanza preparatoria para el aumento de las tasas municipales que oscilaría entre el 5 y 15 por ciento. Las críticas de la oposición giraron en torno a los aportes financieros de Nación y de Provincia y las facultades delegadas en el intendente, Darío Díaz Pérez, para distribuir partidas. El monto destinado a salud y seguridad también fue eje de debate.

El presupuesto para el 2011, de 648 millones de pesos, fue aprobado con 14 votos del total de 24 concejales presentes en la sesión de ayer del Concejo Deliberante de Lanús. Desde la oposición señalaron que el monto venía “sobrestimado” por los fondos de Nación y de Provincia. En otro orden, generó un intenso debate la capacidad que tendrá el intendente Darío Díaz Pérez de reasignar recursos y las partidas de Salud y Seguridad.

El oficialismo logró la aprobación de la iniciativa del Departamento Ejecutivo con el apoyo de los concejales opositores Francisco Malvaso, Daniel Piccolo, Carlos Barbagallo, Mariano Amore, Carlos Folino y Pedro Gómez.

La ordenanza para el aumento de tasas fue avalada por una parte de Unión Pro y por el concejal Carlos Barbagallo del bloque de Compromiso al Pro.

“Los bloques de la oposición han demostrado una posición adulta porque han profundizado en el estudio de los expedientes”, señaló en diálogo con Info Región el titular del Concejo Deliberante, José Luís Pallares.

Hacia el comienzo de la votación del Presupuesto, el concejal del Frente para la Victoria Jorge Montero señaló que el Intendente estaba “dispuesto a modificar alguna partida” para contar con el voto de los sectores de la oposición.

En cuanto al presupuesto, los concejales de la oposición aseguraron que el 60 por ciento de los fondos que tiene el municipio son aportados por el gobierno Nacional y Provincial.

Además las facultades delegadas en el intendente y el presupuesto para el área de salud y seguridad generaron desacuerdos, pero finalmente por mayoría fueron avalados.

El edil Cristian Bosio, del bloque de Unión Celeste y Blanco, aseguró que no iba a acompañar el presupuesto porque las partidas para seguridad y salud no estaban siendo contempladas y eran “temas cruciales”.

En el mismo sentido, la concejal del GEN, María La Rosa explicó que “hay que fijar prioridades porque se destina dinero a sectores que no lo necesitan”.

Resaltó la necesidad de aumentar los recursos para seguridad, pero “no la seguridad entendida como represión sino como rehabilitación de toda la gente que lo necesita”.

En este sentido, se refirió al convenio que se aprobó en la sesión para avalar la construcción de un polideportivo en el velódromo de la comuna, el cual le demandará al municipio 12 millones de pesos.

La edil señaló que en vez de destinar fondos para esa construcción, se tendrían que construir salas en los hospitales de la comuna que se encuentran en malas condiciones.

El concejal Omar López del bloque Justicialista señaló que hay que “recalcarle al Ejecutivo que el tema sanitario y educativo tiene serias deficiencias”.

Luego del debate por el presupuesto para salud y seguridad, el concejal Barbagallo solicitó un cuarto intermedio en el cuál los titulares de los bloques decidieron acordar la asignación de partidas que tendrá el Intendente.

El concejal Mariano Amore, del Acuerdo Cívico y Social, comentó que la exigencia de su bloque era “llevar a la mínima expresión la delegación de atribuciones al Ejecutivo porque sino es lo mismo que firmarle al Intendente un cheque en blanco”.

Para conseguir la sanción de la norma, se realizaron modificaciones en el artículo 32, que en su versión original contemplaba la potestad de redistribución de partidas. El nuevo articulado implica la restricción de las facultades de reasignación a sólo el 10 por ciento de los fondos no afectados.

Bosio describió que había que evitar que Díaz Pérez pueda “manejar de manera discrecional las partidas”.

La ordenanza fiscal impositiva fue el otro tema que genero intenso debate en recinto, la oposición planteaba que el aumento debía acompañar la inflación que se establece a nivel nacional y local.

Se aprobó la ordenanza preparatoria para la asamblea de concejales y mayores contribuyentes que se realizará el próximo 15 de diciembre. En la misma se ratificará el aumento de tasas municipales que oscilaría entre el 5 y el 15 por ciento.

Pallares comentó que el aumento de las tasas será de un promedio de 7,5 por ciento, un 5 por ciento en los lugares periféricos y un 15 en las zonas céntricas, que quedará reflejado en las boletas con un aumento de 8 pesos mensuales.

“Todo aumento de tasas implica un esfuerzo más del vecino pero también tenemos que tener responsabilidad para no desfinanciar el municipio”, aseguró.

El concejal Bosio, en la misma línea, señaló que hacía falta una “actualización” del monto de los impuestos.

El edil de la Corriente Nacional Sindicalista Peronista, Daniel Piccolo, manifestó su apoyo al aumento pero señaló que el mismo debía traducirse en “beneficio de la sociedad”.

En contraposición, la concejal de Libres del Sur, Paola Rezzano votó negativamente porque consideró que el aumento “lo pagan los vecinos más carenciados”.

El concejal Montero explicó que el distrito será dividido en cuatro zonas, la zona A percibirá un aumento del 15 por ciento que implica que el valor se elevará a 71 pesos mensuales, la zona B, un 12 por ciento pagando 64 pesos, la C y D abonarán entre un 10 y un 5 por ciento, con un monto de 53 y 44 pesos respectivamente.

Hacía el final de la sesión, el titular del Concejo Deliberante valoró la actitud de los ediles por haber propuesto un intenso debate durante la sesión.

“Los concejales están a la altura de la representatividad que le han otorgado los vecinos”, agasajó. (Inforegion).

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