El gobierno porteño volvió a echarle incertidumbre a la negociación para recibir la red. Larreta y Vidal pidieron mayores inversiones, aunque detrás del reclamo se esconde la conflictiva situación de Metrovías, que no tendría dinero para pagar los sueldos. La alternativa del macrismo y la auditoría que podría demorar la cesión.
A un mes de que se venza el plazo para que el Gobierno nacional y el porteño concreten el traspaso del subte, el macrismo volvió a lanzar la advertencia de que la negociación todavía está lejos de cerrarse.
María Eugenia Vidal y Horacio Rodríguez Larreta salieron a coro a cuestionar la falta de inversión en la red de subtes, lo que hizo revivir rumores que indican que Mauricio Macri podría rechazar el traspaso. Pero en el gobierno de la Ciudad no quisieron alimentar estas versiones, aunque admitieron que el “terreno está muy empantanado”.
Más allá de la falta de inversiones, en el macrismo advierten una serie de cuestiones que le agregan incertidumbre a la negociación. En primer lugar, la empresa Metrovías debe abonar los sueldos de los trabajadores del subte la semana que viene.
Como anticipó LPO, la firma concesionaria del subte acumula una deuda de 65 millones de pesos en lo que va del año, puesto que el Gobierno nacional aún no giró los fondos que acordó en concepto de subsidio. El pago de febrero aún no llegó y el de enero se hizo a través de un fondo fiduciario que la empresa no habría podido tocar.
Metrovías tiene tiempo hasta el 5 de marzo para pagar en término y usualmente paga el tercer día del mes. El dinero subsidio debería llegar entre el último día del mes, es decir mañana y el primero del siguiente.
En este contexto, como averiguó este medio, en las reuniones preliminares al pago de la semana que viene, los emisarios de Metrovías fueron directos con los trabajadores: “no tenemos plata”, advirtieron.
Desde la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte confirmaron a este medio que Metrovías que prevén una complicación para el pago de la semana que viene. En el sindicato sostuvieron que la empresa debe hacer frente a unos tres mil sueldos de un promedio de 5 mil pesos cada uno, lo que representa una suma de 15 millones de pesos.
“Este mes ya presentamos una denuncia contra la empresa en el ministerio de Trabajo, siempre encuentran la excusa para demorar el pago de los sueldos”, dijo a LPO uno de los “metrodelegados”.
La misma fuente adelantó que los delegados ya están analizando medidas de fuerza si el pago yo no llega a término.
La situación se tornó más compleja por la tragedia de Once, que provocó la muerte de 51 pasajeros del tren Sarmiento y puso en tela de juicio al secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, el encargado del traspaso del subte por parte del Gobierno nacional.
“No sabemos si Schiavi está, y si está el subte debe ser su última prioridad en estos momentos”, insinúan en el macrismo.
El aval postergado
Para el otro motivo de conflicto, que advirtieron Rodríguez Larreta y Vidal, el macrismo está a la espera de una salida alternativa.
Desde los comienzos de la negociación, el gobierno porteño le pidió a la Nación que accediera a invertir 1000 millones de dólares en conjunto para obras en la red de subte.
Pero el Gobierno nacional nunca dio una respuesta positiva, por lo que el macrismo le volvió a pedir el aval a Cristina Kirchner para conseguir créditos del Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
La presidenta sólo tiene que estampar la firma para concretar ese aval que viene postergando desde los inicios de la gestión de Macri, que no puede obtener créditos directamente desde esas entidades financieras sino que necesita la autorización del Gobierno nacional.
Como pudo saber este medio, en el PRO están esperanzados con que esta vez la presidenta dé luz verde para el empréstito.
La auditoría
El otro punto que podría demorar el traspaso fue una condición que impuso Macri en los últimos días. Luego de la tragedia de Once, el jefe de gobierno exigió que se realizara una auditoría antes del traspaso para tener conocimiento del verdadero estado de la red de subterráneos.
Como adelantó Perfil, el gobierno porteño contrató a un organismo extranjero que ya está realizando los estudios para asegurar que los trenes estén en condiciones de circular.
Esto ralentizaría la negociación, puesto que la auditoría no sólo abarcaría la inspección del material rodante, sino que comprendería un examen del contrato de concesión con Metrovías y de las impresiones prometidas por la firma del Grupo Roggio. (La Política On Line).
A un mes de que se venza el plazo para que el Gobierno nacional y el porteño concreten el traspaso del subte, el macrismo volvió a lanzar la advertencia de que la negociación todavía está lejos de cerrarse.
María Eugenia Vidal y Horacio Rodríguez Larreta salieron a coro a cuestionar la falta de inversión en la red de subtes, lo que hizo revivir rumores que indican que Mauricio Macri podría rechazar el traspaso. Pero en el gobierno de la Ciudad no quisieron alimentar estas versiones, aunque admitieron que el “terreno está muy empantanado”.
Más allá de la falta de inversiones, en el macrismo advierten una serie de cuestiones que le agregan incertidumbre a la negociación. En primer lugar, la empresa Metrovías debe abonar los sueldos de los trabajadores del subte la semana que viene.
Como anticipó LPO, la firma concesionaria del subte acumula una deuda de 65 millones de pesos en lo que va del año, puesto que el Gobierno nacional aún no giró los fondos que acordó en concepto de subsidio. El pago de febrero aún no llegó y el de enero se hizo a través de un fondo fiduciario que la empresa no habría podido tocar.
Metrovías tiene tiempo hasta el 5 de marzo para pagar en término y usualmente paga el tercer día del mes. El dinero subsidio debería llegar entre el último día del mes, es decir mañana y el primero del siguiente.
En este contexto, como averiguó este medio, en las reuniones preliminares al pago de la semana que viene, los emisarios de Metrovías fueron directos con los trabajadores: “no tenemos plata”, advirtieron.
Desde la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte confirmaron a este medio que Metrovías que prevén una complicación para el pago de la semana que viene. En el sindicato sostuvieron que la empresa debe hacer frente a unos tres mil sueldos de un promedio de 5 mil pesos cada uno, lo que representa una suma de 15 millones de pesos.
“Este mes ya presentamos una denuncia contra la empresa en el ministerio de Trabajo, siempre encuentran la excusa para demorar el pago de los sueldos”, dijo a LPO uno de los “metrodelegados”.
La misma fuente adelantó que los delegados ya están analizando medidas de fuerza si el pago yo no llega a término.
La situación se tornó más compleja por la tragedia de Once, que provocó la muerte de 51 pasajeros del tren Sarmiento y puso en tela de juicio al secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, el encargado del traspaso del subte por parte del Gobierno nacional.
“No sabemos si Schiavi está, y si está el subte debe ser su última prioridad en estos momentos”, insinúan en el macrismo.
El aval postergado
Para el otro motivo de conflicto, que advirtieron Rodríguez Larreta y Vidal, el macrismo está a la espera de una salida alternativa.
Desde los comienzos de la negociación, el gobierno porteño le pidió a la Nación que accediera a invertir 1000 millones de dólares en conjunto para obras en la red de subte.
Pero el Gobierno nacional nunca dio una respuesta positiva, por lo que el macrismo le volvió a pedir el aval a Cristina Kirchner para conseguir créditos del Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
La presidenta sólo tiene que estampar la firma para concretar ese aval que viene postergando desde los inicios de la gestión de Macri, que no puede obtener créditos directamente desde esas entidades financieras sino que necesita la autorización del Gobierno nacional.
Como pudo saber este medio, en el PRO están esperanzados con que esta vez la presidenta dé luz verde para el empréstito.
La auditoría
El otro punto que podría demorar el traspaso fue una condición que impuso Macri en los últimos días. Luego de la tragedia de Once, el jefe de gobierno exigió que se realizara una auditoría antes del traspaso para tener conocimiento del verdadero estado de la red de subterráneos.
Como adelantó Perfil, el gobierno porteño contrató a un organismo extranjero que ya está realizando los estudios para asegurar que los trenes estén en condiciones de circular.
Esto ralentizaría la negociación, puesto que la auditoría no sólo abarcaría la inspección del material rodante, sino que comprendería un examen del contrato de concesión con Metrovías y de las impresiones prometidas por la firma del Grupo Roggio. (La Política On Line).
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