El intendente de Esteban Echeverría y el líder de la CGT jamás tuvieron una buena relación. La presión por Covelia y los intentos del jefe comunal por frenar los avances de la recolectora minaron todo diálogo. Pero Moyano también intentó varias veces pelearle el poder comunal con distintos delegados.
Nunca hubo una buena relación aunque ninguna de las partes se empecinó en cambiar la situación. Pero, más allá de la pelea de fondo, en los últimos tiempos tanto el líder de la CGT, Hugo Moyano, como el intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray, se dedicaron a tirarse pequeños dardos para alimentar el fuego de la disputa.
Por caso, esta semana, Gray anunció que como los recolectores de residuos del distrito se plegaron a la marcha y al acto de Moyano en Plaza de Mayo, los hará recuperar el día de trabajo el próximo feriado del 9 de julio. Y el camionero contestó con un plenario de la CGT en el Sindicato del Plástico para definir los próximos pasos de la central obrera.
Pero los duros cruces vienen desde desde 2007. Sucede que después de que la empresa TUQSA abandonara el municipio, el ya fallecido intendente Alberto Groppi recurrió a Covelia (antes de la asunción de Gray) para salir del paso. Comenzó pagando 1,6 millones de pesos por mes y prometió 2,2 millones para 2008.
Cuando Gray asumió en diciembre de 2007 intentó frenar el aumento del canon pero la respuesta de la empresa siempre vinculada con Moyano fue feroz. Los trabajadores iniciaron un paro que duró dos semanas y la basura se acumuló en las calles del distrito. En medio del conflicto, el gobierno de Gray amenazó con municipalizar el servicio: en un día de lluvia de febrero uno de los camiones municipales apareció incendiado cerca de un basural.
Finalmente, Gray acordó con Covelia su continuidad provisoria con la intervención de Daniel Scioli pero al mismo tiempo el jefe comunal pergeñó una nueva licitación monitoreada por la ONG Poder Ciudadano para marcar de cerca de la empresa. De todos modos, la ganadora de la licitación por seis años resultó siendo Covelia, después de un tibio intento de hacerse del servicio por parte de Cliba, del Grupo Roggio.
Pero la pelea en la pelea con Moyano no sólo existen cuestiones monetarias o de negocios. Cuando el líder de la CGT todavía cosechaba gran adhesión dentro del oficialismo siempre amagó con lanzar al ex juez y abogado personal, Daniel Llermanos, como candidato a intendente.
Moyano no llegó a tanto, pero sí respaldó la alianza entre la CGT Regional y Martín Sabbatella en las elecciones de octubre del año pasado. Así, en la lista de Nuevo Encuentro se incorporó el camionero Fabián Arévalo.
“Mientras hablan de nueva política, de transparencia, de renovación, arman una lista con lo peor del PJ y con el Sindicato de Camioneros. Es Moyano contra Gray apoyado por Sabbatella, los vecinos elegirán entre él o yo”, bramó el jefe comunal en su momento.
Es más, en el momento más complicado de Moyano, cuando desde la Justicia suiza pidieron información sobre su supuesta vinculación con Covelia, Gray salió en cuanto medio lo consultara a contar la truculenta historia de la recolectora en el distrito.
El capítulo de esta semana, con Gray pidiendo que los recolectores trabajen un feriado y con Moyano reuniéndose en su distrito, no parece ser el último.
Nunca hubo una buena relación aunque ninguna de las partes se empecinó en cambiar la situación. Pero, más allá de la pelea de fondo, en los últimos tiempos tanto el líder de la CGT, Hugo Moyano, como el intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray, se dedicaron a tirarse pequeños dardos para alimentar el fuego de la disputa.
Por caso, esta semana, Gray anunció que como los recolectores de residuos del distrito se plegaron a la marcha y al acto de Moyano en Plaza de Mayo, los hará recuperar el día de trabajo el próximo feriado del 9 de julio. Y el camionero contestó con un plenario de la CGT en el Sindicato del Plástico para definir los próximos pasos de la central obrera.
Pero los duros cruces vienen desde desde 2007. Sucede que después de que la empresa TUQSA abandonara el municipio, el ya fallecido intendente Alberto Groppi recurrió a Covelia (antes de la asunción de Gray) para salir del paso. Comenzó pagando 1,6 millones de pesos por mes y prometió 2,2 millones para 2008.
Cuando Gray asumió en diciembre de 2007 intentó frenar el aumento del canon pero la respuesta de la empresa siempre vinculada con Moyano fue feroz. Los trabajadores iniciaron un paro que duró dos semanas y la basura se acumuló en las calles del distrito. En medio del conflicto, el gobierno de Gray amenazó con municipalizar el servicio: en un día de lluvia de febrero uno de los camiones municipales apareció incendiado cerca de un basural.
Finalmente, Gray acordó con Covelia su continuidad provisoria con la intervención de Daniel Scioli pero al mismo tiempo el jefe comunal pergeñó una nueva licitación monitoreada por la ONG Poder Ciudadano para marcar de cerca de la empresa. De todos modos, la ganadora de la licitación por seis años resultó siendo Covelia, después de un tibio intento de hacerse del servicio por parte de Cliba, del Grupo Roggio.
Pero la pelea en la pelea con Moyano no sólo existen cuestiones monetarias o de negocios. Cuando el líder de la CGT todavía cosechaba gran adhesión dentro del oficialismo siempre amagó con lanzar al ex juez y abogado personal, Daniel Llermanos, como candidato a intendente.
Moyano no llegó a tanto, pero sí respaldó la alianza entre la CGT Regional y Martín Sabbatella en las elecciones de octubre del año pasado. Así, en la lista de Nuevo Encuentro se incorporó el camionero Fabián Arévalo.
“Mientras hablan de nueva política, de transparencia, de renovación, arman una lista con lo peor del PJ y con el Sindicato de Camioneros. Es Moyano contra Gray apoyado por Sabbatella, los vecinos elegirán entre él o yo”, bramó el jefe comunal en su momento.
Es más, en el momento más complicado de Moyano, cuando desde la Justicia suiza pidieron información sobre su supuesta vinculación con Covelia, Gray salió en cuanto medio lo consultara a contar la truculenta historia de la recolectora en el distrito.
El capítulo de esta semana, con Gray pidiendo que los recolectores trabajen un feriado y con Moyano reuniéndose en su distrito, no parece ser el último.
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