jueves, junio 02, 2016

Cuentas municipales en la mira...

(InfoBAN). La caída de varios intendentes en las pasadas elecciones a los que además de votos les faltó claridad en los números, desembocó en la no aprobación de las rendiciones de cuentas.

Es la época del año en la cual a través de los Concejos Deliberante, se deben corroborar los números del anterior ejercicio financiero. La Rendición de Cuentas es para los ediles en muchos casos un dolor de cabeza, ya que a la falta de especialización en la materia, se suma el escaso tiempo para ver los expedientes y la exigua información que suelen tener.

Pero cuando el poder político se desvanece, los números en rojo se hacen más visibles. Tal es el caso de Morón, donde los números del sabbatelista Lucas Ghi, intendente hasta diciembre, se fueron a marzo.

“Se nos hacía imposible aprobar una rendición que implicaba convalidar graves faltantes patrimoniales, malversación de caudales públicos, defraudación del estado, falsificación de documentos privados, discrecionalidad en el otorgamiento de obras que siempre y, casualmente, se les otorgaba a las mismas empresas, fragmentando las compras, imposibilitando que los montos llegaran a licitaciones públicas y convalidando sobreprecios”, graficó la jefa del bloque Cambiemos Analía Zappulla.

El presidente de bloque del Frente Renovador Jorge Laviuzza remarcó que “encontramos en la Rendición de Cuentas situaciones no ideales, documentación que muestran como el Departamento Ejecutivo planteó su gestión y no estamos de acuerdo; y tampoco estábamos de acuerdo cuando plantearon el presupuesto, por lo tanto, tampoco compartimos como lo gastaron”.

“Se nos hace imposible aprobar una Rendición que le paga a una empresa de recolección, lo que nos parece no vale, y aparte de cara es ineficiente”, agregó Laviuzza.

También en Moreno la caída de Mariano West culmina con una Rendición de Cuentas sin aprobación por la negativa no sólo de la oposición sino también del oficialismo, que vale destacar responde a la línea del FpV que se quedó con el ejecutivo en manos del camporista Walter Festa.

En una extensa sesión presidida por la titular del cuerpo Cintia González, los concejales de distintos bloques enumeraron diversas irregularidades de la ejecución presupuestaria 2015.

Por caso, Néstor Joao del bloque Cambiemos habló de administración “pésima”, “hipocresía” y “estafa al pueblo”. Su par del interbloque Vecinalismo-UCR Claudia Asseff justificó la posición con casos puntuales. Entre las irregularidades planteadas figuran obras no realizadas o con faltantes importantes.

Cabe destacar que al rechazarse las cuentas municipales el expediente se remite al Superior Tribunal de Cuentas de la Provincia de Buenos Aires para su análisis.

Otro que terminó con números en rojo es Luis Acuña, en el distrito que hoy gobierna el peronista Juan Zabaleta. Sobre los números del ex intendente, el concejal socialista Lautaro Aragón sostuvo que se trata de “números inflados y reasignación de partidas por donde se lo mire, sumado a contrataciones directas y trabajos que a la vista no están realizados”.

Si bien se descontaba que en Merlo no le aprobarían a Othacehé las cuentas, tras las denuncias por vaciamiento del actual alcalde Gustavo Menéndez que tiene preparadas unas 60 denuncias, que complicarían a unos 25 laderos del “Vasco”, al cual le endilga presuntos delitos de peculado, estafa, enriquecimiento ilícito y fraude contra la administración pública, entre otros, finalmente los ediles dieron el visto bueno.

También para Curto sus 24 años al frente de Tres de Febrero culminaron con cuentas aprobadas sin mayores estridencias, al igual que Jesús Cariglino en Malvinas Argentinas a pesar de los fuertes cruces de campaña y las denuncias que viene motorizando la gestión de Leonardo Nardini. Además cabe recordar que por el período 2014, el Tribunal de Cuentas le impuso al ex intendente una fuerte multa por irregularidades.

De los que siguen en el cargo, el que pasó un sobresalto fue Gustavo Posse en San Isidro, donde el presidente del Deliberante Carlos Castellano se vio obligado a desempatar para salvar la Rendición de Cuentas, a partir de un HCD con mayor balance de fuerzas desde las pasadas elecciones. (InfoBAN).

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