martes, agosto 21, 2018

La comunidad educativa de José C. Paz marchó por la educación pública


Docentes, auxiliares, padres, madres y estudiantes de las Escuela 27 y 19 se pusieron al frente en la lucha por la defensa de la educación pública.

Tras lo sucedido en Moreno con las evitables muertes de Sandra y Rubén, el ajuste del gobierno de Macri y de la gobernadora Vidal sigue dejado la educación pública en un estado de desidia total.

Este viernes madres, padres y docentes de José C. Paz, cansados del estado deplorable de las escuelas públicas, salieron a mostrar su descontento desde temprano cortando la Ruta 197 hasta llegar al Consejo Deliberante de la localidad. Sin recibir una respuesta la marcha prosiguió hacia el Consejo Escolar.

En la marcha se fue sumando gente que apoyaba la lucha, carteles como “no queremos una Sandra y Rubén” se veían recordando ese suceso evitable que el ajuste se cobró.

La situación de los colegios de José C. Paz es crítica. Una madre del Colegio 27 contó a este diario que en los colegios los pozos llenos se rebalsan, que no hay gas, ni luz ni agua. Pero también que las medidas de luchas tendrán continuidad.

Otra madre de la escuela 21 nos decía que amenazan a docentes para que den clases en los establecimientos que no están en condiciones. El resultado de eso es que los chicos no asisten a clases. Y aparte hay una obra en construcción que está parada por falta de fondos que no bajó Vidal para seguir con la construcción y que se dieron cuenta en marzo por el reclamo de los padres. Hay 48 colegios cerrados y una decena tomados por los padres y docentes.

El Consejo Escolar, tanto como el Consejo Deliberante, estaba custodiado por la Policía utilizándola como método de intimidación contra las familias, estudiantes y docentes que se movilizaron.
Luego de décadas de desinversión es necesario poner en pie una comisión de seguridad e higiene que supervise las condiciones de infraestructura en la escuela que debe garantizar el Estado. Esta comisión debe estar conformada por toda la comunidad educativa, docentes, auxiliares, alumnos y familiares.

Es necesario que las centrales sindicales llamen a un plan de lucha debatido democráticamente entre todos los trabajadores de la educación, de todos los gremios, afiliados y no afiliados, junto a los padres y alumnos para garantizar las mejores condiciones para la educación pública.

Plata para la educación hay: el gobierno de Vidal debe garantizar que las escuelas públicas estén en condiciones.

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