El primer precandidato a diputado nacional por la Unión para el Desarrollo Social y presidente de la UCR bonaerense, Miguel Bazze, repudió la agresión de una patota kirchnerista a militantes de la UDESO durante una recorrida que compartió con el precandidato presidencial, Ricardo Alfonsín, y a gobernador de Buenos Aires, Francisco De Narváez, y reclamó que la jefa de Estado, Cristina Fernández de Kirchner “asuma la responsabilidad de poner límites a su sector que se encamina en un preocupante proceso de violencia, que empezó con ataques verbales a sectores de la oposición y hasta el electorado de la ciudad de Buenos Aires y de Santa Fe y que se ve agravado con lo sucedido hoy en Quilmes”.
Bazze también criticó duramente el accionar de la policía provincial durante los incidentes ocurridos en San Francisco Solano (partido de Quilmes). “Lo más preocupante aun es que la policía de la provincia de Buenos Aires que estaba en el lugar de los hechos ocurridos en Quilmes observó perfectamente lo que ocurría, tomo distancia y en lugar de garantizar el orden y la libre difusión de las ideas por parte de los militantes radicales y de De Narváez, garantizo la impunidad de la patota. En definitiva no hizo otra cosa que –desde la omisión- acompañar la violencia de los militantes del gobierno y de esto sería conveniente que el gobernador Scioli se hiciera cargo”, dijo Bazze.
El titular de la UCR señaló que “el kirchnerismo está ingresando en un preocupante proceso de violencia. A las irrespetuosas y agresivas declaraciones de muchos de sus dirigentes respecto a representantes políticos y sociales opositores y a medios de prensa se suma la actitud violenta de quienes -como hoy en el distrito de Quilmes- han llegado a la agresión física para tratar de evitar nuestra actividad”.
“Por supuesto que todo esto demuestra el nivel de nerviosismo en el que están cayendo porque evidentemente su situación electoral no es la que pretenden instalar a través de algunos medios y periodistas que tienen contratados. Pero, en definitiva, ese nerviosismo debería ser un problema de ellos. Cuando el mismo se convierte en agresión permanente pasa a ser un problema de todos”, subrayó Bazze y agregó: “es muy malo que el kirchnerismo esté haciendo esto, es tiempo de que empiecen a respetar a los demás, aunque el respeto por los demás no sea una de sus principales virtudes”.
Bazze también criticó duramente el accionar de la policía provincial durante los incidentes ocurridos en San Francisco Solano (partido de Quilmes). “Lo más preocupante aun es que la policía de la provincia de Buenos Aires que estaba en el lugar de los hechos ocurridos en Quilmes observó perfectamente lo que ocurría, tomo distancia y en lugar de garantizar el orden y la libre difusión de las ideas por parte de los militantes radicales y de De Narváez, garantizo la impunidad de la patota. En definitiva no hizo otra cosa que –desde la omisión- acompañar la violencia de los militantes del gobierno y de esto sería conveniente que el gobernador Scioli se hiciera cargo”, dijo Bazze.
El titular de la UCR señaló que “el kirchnerismo está ingresando en un preocupante proceso de violencia. A las irrespetuosas y agresivas declaraciones de muchos de sus dirigentes respecto a representantes políticos y sociales opositores y a medios de prensa se suma la actitud violenta de quienes -como hoy en el distrito de Quilmes- han llegado a la agresión física para tratar de evitar nuestra actividad”.
“Por supuesto que todo esto demuestra el nivel de nerviosismo en el que están cayendo porque evidentemente su situación electoral no es la que pretenden instalar a través de algunos medios y periodistas que tienen contratados. Pero, en definitiva, ese nerviosismo debería ser un problema de ellos. Cuando el mismo se convierte en agresión permanente pasa a ser un problema de todos”, subrayó Bazze y agregó: “es muy malo que el kirchnerismo esté haciendo esto, es tiempo de que empiecen a respetar a los demás, aunque el respeto por los demás no sea una de sus principales virtudes”.
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