El gobernador de San Luis se paseó por La Plata para presentar sus candidatos, atacó con dureza al Gobierno nacional y arremetió contra De Narváez, Reutemann y Schiaretti. Además dijo que Kirchner usurpó al PJ y si Scioli, que “supo ser su amigo”, lo echa por la ventana, recién allí se sentaría a dialogar.
El gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, visitó la ciudad de La Plata para presentar los candidatos de su partido “Es posible” y cargó duro contra el kirchnerismo y el resto del justicialismo.
En primer término dijo que las elecciones del próximo domingo son “tristes”, puesto que hubo un “adelantamiento fraudulento, candidaturas testimoniales fraudulentas” y no hubo internas en el PJ.
Luego pronosticó una “merecida derrota de los Kirchner”, que se dará por más que el ex presidente gane por un magro porcentaje y que luego de los comicios y en miras al año 2011 irá como candidato a presidente pero luego de atravesar una interna justicialista.
Allí no espera ver a Néstor Kirchner, a quien acusa de haber “usurpado” el PJ. En referencia a Scioli, dijo que si “echa a Kirchner por la ventana, como éste entro al PJ”, recién allí podría sentarse a dialogar.
El gobernador puntano le bajó el tono a la reunificación del PJ luego de las elecciones, puesto que descartó un futuro diálogo con Kirchner –declaró que “no me llama y me siento orgulloso”– y afirmó que ni Juan Schiaretti ni Carlos Reutemann le “levantaban el teléfono cuando estaban con Kirchner”, por lo que “el que estuvo de un lado y hoy viene para el otro, debe aclarar un poquito” su situación antes de conversar.
También descartó una alianza con Unión Pro, puesto que “no cumplieron el acuerdo parlamentario” que había establecido con su sector y criticó a Francisco De Narváez por postularse a un cargo que ocupa en la actualidad y que no cumple debidamente.
Cuando La Política Online le preguntó como haría para gobernar la provincia de Buenos Aires, que cuenta con más de 14,5 millones de habitantes que los que hay en San Luis, Rodríguez Saá explicó que “en San Luis tenemos el 1 por ciento de la población argentina y el 1 por ciento del presupuesto argentino, cuando Scioli era amigo mío me dijo que quería hacer un presupuesto como el de San Luis y yo le dije que no, que tiene que equilibrar su presupuesto a lo que es su provincia”. De lo contrario, un “presupuesto deficitario lo convierte, aunque no lo quiera, en un delegado del Gobierno nacional” por la dependencia de los fondos de coparticipación.
En ese sentido, dijo que los gobernadores tendrían que reclamar que la Nación reciba el 50 por ciento de los fondos de coparticipación y las provincias el otro 50, en lugar del 26 que según el puntano reciben actualmente y para eso, “hay que ponerse los pantalones y dejar de cacarear”.
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