Empezaron a definirse, en algunos casos a puertas cerradas, y en otros públicamente, las candidaturas a intendente para este año. Algunos apuestan a familiares, mientras que varios buscarán la reelección. ¿Cómo jugará cada uno en una de las regiones más importante de la Provincia?
La provincia de Buenos Aires comienza a definir sus candidatos de cara a este año electoral. En el Conurbano bonaerense, algunas cartas ya están jugadas y muchos apuestan a quedarse un nuevo mandato en las intendencias. Otros arriesgan dejarles el territorio a familiares o personas de “confianza”.
En la primera sección electoral empezaron a definirse las postulaciones. Por ejemplo, en Tigre, el intendente Sergio Massa negocia un lugar por afuera de su territorio. No descarta competirle al gobernador Daniel Scioli una candidatura al Sillón de Dardo Rocha y, al parecer, podría dejar a su esposa, Malena Galmarini, oriunda de San Isidro, la posibilidad de ser la postulante a intendenta.
Otro de los que podría “jugársela” por la confianza familiar es Ricardo Ivoskus, de San Martín. Si bien hasta ahora el vecinalista filoradical coquetea con una posible reelección, también piensa abrirle el juego a su hijo, Daniel Ivoskus, para que se quede en la intendencia. Ambos mantienen una muy buena relación con Scioli.
En el caso de Moreno, Andrés Arregui podría posicionar a su mujer, Carla Campos Bilbao, quien ocupa el cargo de secretaria de Desarrollo Rural y Agricultura Familiar, dependiente del Ministerio de Agricultura de la Nación.
En Malvinas Argentinas, Jesús Cariglino iría en búsqueda de una nueva reelección. Es una posibilidad que maneja, aunque su incorporación en el Grupo de los 8 lo llevaría a no descartar otro lugar: “La vocación de cualquier político es ir escalando y llegar a gobernador de la provincia de Buenos Aires. Otros quieren ser vicegobernador o legisladores. En primera instancia, mi proyecto es Malvinas Argentinas para los próximos cuatro años”, dijo el intendente a un portal local un tiempo atrás.
De todos modos, aclaró: “Esto no quiere decir que no pueda cambiar de idea. De hecho hay muchas sugerencias y estamos charlando con varios compañeros del interior y del Conurbano, empresarios y varios sectores”.
Juan Pablo Anghileri, de General Rodríguez, también intentaría reelegir, luego de llegar a la intendencia el año pasado cuando se destituyó a Marcelo Coronel por infinidad de irregularidades durante su gestión. El actual jefe comunal desea quedarse un mandato más, pero sostiene que “hay que escuchar a los compañeros, a los militantes”, y agrega: “Yo tengo una seguridad, que es la de que voy a seguir defendiendo el modelo que estableció Néstor Kirchner, y hoy representan mejor que nadie Cristina Fernández y Daniel Scioli, pero decir que yo soy quien mejor los representa acá, en Rodríguez, sería faltarle el respeto a todos”.
Anghileri es contenido por algunos de sus pares, como el propio Andrés Arregui (Moreno), Hugo Curto (Tres de Febrero), Alberto Descalzo (Ituzaingó), Carlos Selva (Mercedes) y Joaquín De la Torre (San Miguel).
Humberto Zúccaro, de Pilar, es otro de los intendentes que se quiere quedar en “el pago chico”. Ya anunció que un equipo de funcionarios está trabajando en un plan estratégico de 20 años para su distrito: “Hay que pensar en un Pilar de 15 años, dejar de lado los personalismos y sí planificar Pilar para las generaciones futuras. No lo llamaría una plataforma, pero sí habrá una elección en el medio, pero esto va más allá de lo que puede pensar un intendente, y debo tener la humildad de aceptar lo que puede llegar a decir la oposición”, explica al ser consultado por la posible reelección en su cargo.
En el caso de Descalzo el futuro no está muy claro. Algunos apuestan a que irá por una nueva reelección, mientras que otros arriesgan que se animaría a postularse como candidato a diputado nacional.
En Morón, Lucas Ghi definitivamente buscará un nuevo mandato en la intendencia, acompañando a Martín Sabbatella, quien quiere competir por la Gobernación, pero en la boleta del Frente para la Victoria, algo cuanto menos complicado.
Gustavo Posse, de San Isidro, ya anunció antes de terminar 2010 que irá por el camino de la reelección, pero a poco de su anuncio el radicalismo apuesta a llevarlo como candidato a gobernador y se encuentra negociando dicha posibilidad.
En San Miguel, Joaquín De La Torre apuesta a quedarse en el sillón municipal, pero el panorama político podría llevarlo a una interna con Aldo Rico y con el diputado provincial Franco La Porta, otrora su padrino político, quien es apoyado nada más ni nada menos que por Scioli.
Graciela Rosso en Luján ya anticipó sus ganas de buscar una reelección, apoyada por la estructura sindical local. Hace algún tiempo, la intendenta se mostró con la CGT Regional. La nueva conducción está a cargo de Oscar Lescano, quien proviene del gremio de los cerveceros. En el espacio existen alrededor de 30 gremios entre los que se encuentran Sutiaga, ATILRA, Bancarios y Camioneros.
En Hurlingham, Luis Acuña podría volver a posicionar a su hijo Fabricio para que sea el candidato a intendente. Acuña es un crítico del kirchnerismo y forma parte del rebelde Grupo de los 8. No descarta su reelección, pero prefiere la continuidad familiar.
Por otra parte, los intendentes Hugo Curto de Tres de Febrero, Raúl Othacehé de Merlo y Sandro Guzmán de Escobar serían de la partida reeleccionista. También dentro del armado del Gobierno nacional.
Hasta ahora la incógnita es Mario Ishii, de José C. Paz, quien analizaría presentarse como candidato a intendente nuevamente, aunque aspiraría a ocupar un lugar preponderante en el espacio kirchnerista en caso de que se lo propongan, obviamente a nivel nacional. (ANDigital).