La Coalición Cívica bonaerense sancionó a la concejal platense Julia Larcamón por ausentarse de algunas sesiones y a los de Lanús Mariano Amore y Pedro Gómez por aprobar el presupuesto de Díaz Pérez. Y hasta le aplicarían una sanción retroactiva a diputada Gradaschi. La chaqueña, que el viernes lanza su candidatura en Mar del Plata, busca afianzar su perfil intransigente para diferenciarse de la Ucr y el Pro.
Los concejales de la Coalición Cívica de Lanús Mariano Amore y Pedro Gómez acompañaron los presupuestos del intendente Darío Díaz Pérez durante 2008 y 2009. En diciembre actuaron de la misma manera, sólo que esta vez no fue gratis: la conducción bonaerense del partido los suspendió y estudia expulsarlos del partido.
El cambio no es casual: próxima a lanzarse otra vez como candidata a presidente, lo que oficializará con un acto en Mar del Plata el viernes 14, Carrió quiere llevar la bandera de la intransigencia más alta que el resto de la oposición y no está dispuesta a dejar marcas que empañen esa estrategia.
La conducta de legisladores de la oposición es un problema habitual de los líderes más personalistas, como Carrió y Macri, sorprendidos más de una vez con pactos silenciosos de sus ediles con intendentes y gobernadores oficialistas. La UCR, más orgánica que el resto, suele justificarlos en necesidades locales.
Amore y Gómez se sorprendieron con la advertencia y ejercieron su descargo. “Se justificaron en que Díaz Pérez recién arribaba y no podían quedar pegados a Quindimil”, contó a LPO un legislador de la zona que avaló la sanción, promovida inicialmente por el concejal de Florencio Varela Jorge Arellano.
Lo que dejó offside a los la conducción bonaerense de la Coalición Cívica bonaerense, que desde noviembre encabeza la diputada provincial Maricel Etchecoin Moro, es recordar que la ahora diputada provincial Natalia Gradaschi también ayudó a sancionar los presupuestos de Lanús. Para compensar esa falla, el Comité de Ética que se conformará el mes que viene podría aplicar alguna sanción retroactiva que al menos sirva como gesto.
Etchecoin Moro es la mejor expresión de esta nueva etapa. Incondicional de Carrió, a quien comenzó a acompañar como militante cuando iniciaba su partida de la UCR, encarna la rama más dura de la Coalición Cívica.
Al caso de los lanusenses se sumó el de la concejal de La Plata Julia Larcamón, suspendida por cuatro meses por haber permitido con su ausencia la sanción del Código de Ordenamiento Urbano (Cou), cuestionado por el resto de la oposición por dejar grietas para cuantiosos negocios inmobiliarios, y firmar el despacho del pliego de licitación para la construcción de una planta de tratamiento de residuos.
La intención de Carrió de tomar su intransigencia como eje de campaña quedó demostrada también en la sanción del presupuesto de la provincia de Buenos Aires, al que la Coalición Cívica se opuso, mientras que el resto de la oposición votó a favor.
Procedieron así la UCR, el Gen y el cobismo, excusándose en las necesidades de sus intendencias, mientras que Unión Pro, sin presión desde los municipios, se jactó de haber gestionado un aumento de las partidas para la seguridad, con fondos que nunca quedó claro de donde provendrían. Historias recurrentes en de la Legislatura bonaerense, que Carrió pidió registrar con cámaras de televisión.
Todos estos bloques avalaron el artículo que le permitirá a Scioli modificar partidas, denostado por sus propios diputados durante la sesión. Por orden expresa de Carrió, los diputados de la Coalición se mantuvieron invariables en la negativa. Será una de las anécdotas que la chaqueña repetirá una y otra vez en sus apariciones públicas. (La Política OnLine).
El cambio no es casual: próxima a lanzarse otra vez como candidata a presidente, lo que oficializará con un acto en Mar del Plata el viernes 14, Carrió quiere llevar la bandera de la intransigencia más alta que el resto de la oposición y no está dispuesta a dejar marcas que empañen esa estrategia.
La conducta de legisladores de la oposición es un problema habitual de los líderes más personalistas, como Carrió y Macri, sorprendidos más de una vez con pactos silenciosos de sus ediles con intendentes y gobernadores oficialistas. La UCR, más orgánica que el resto, suele justificarlos en necesidades locales.
Amore y Gómez se sorprendieron con la advertencia y ejercieron su descargo. “Se justificaron en que Díaz Pérez recién arribaba y no podían quedar pegados a Quindimil”, contó a LPO un legislador de la zona que avaló la sanción, promovida inicialmente por el concejal de Florencio Varela Jorge Arellano.
Lo que dejó offside a los la conducción bonaerense de la Coalición Cívica bonaerense, que desde noviembre encabeza la diputada provincial Maricel Etchecoin Moro, es recordar que la ahora diputada provincial Natalia Gradaschi también ayudó a sancionar los presupuestos de Lanús. Para compensar esa falla, el Comité de Ética que se conformará el mes que viene podría aplicar alguna sanción retroactiva que al menos sirva como gesto.
Etchecoin Moro es la mejor expresión de esta nueva etapa. Incondicional de Carrió, a quien comenzó a acompañar como militante cuando iniciaba su partida de la UCR, encarna la rama más dura de la Coalición Cívica.
Al caso de los lanusenses se sumó el de la concejal de La Plata Julia Larcamón, suspendida por cuatro meses por haber permitido con su ausencia la sanción del Código de Ordenamiento Urbano (Cou), cuestionado por el resto de la oposición por dejar grietas para cuantiosos negocios inmobiliarios, y firmar el despacho del pliego de licitación para la construcción de una planta de tratamiento de residuos.
La intención de Carrió de tomar su intransigencia como eje de campaña quedó demostrada también en la sanción del presupuesto de la provincia de Buenos Aires, al que la Coalición Cívica se opuso, mientras que el resto de la oposición votó a favor.
Procedieron así la UCR, el Gen y el cobismo, excusándose en las necesidades de sus intendencias, mientras que Unión Pro, sin presión desde los municipios, se jactó de haber gestionado un aumento de las partidas para la seguridad, con fondos que nunca quedó claro de donde provendrían. Historias recurrentes en de la Legislatura bonaerense, que Carrió pidió registrar con cámaras de televisión.
Todos estos bloques avalaron el artículo que le permitirá a Scioli modificar partidas, denostado por sus propios diputados durante la sesión. Por orden expresa de Carrió, los diputados de la Coalición se mantuvieron invariables en la negativa. Será una de las anécdotas que la chaqueña repetirá una y otra vez en sus apariciones públicas. (La Política OnLine).
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