Según trascendió, la acción judicial busca frenar la utilización de un “deshumidificador a corriente de aire caliente”, modificación que había sido aprobada por Provincia.
El gobierno de Rosso presentó esta semana un recurso de amparo que buscar frenar las apetencias de Curtarsa en el tratamiento de sus residuos semisólidos.
Según trascendió, el gobierno de Graciela Rosso presentó esta semana un recurso de amparo que buscar frenar las apetencias de Curtarsa en el tratamiento de sus residuos semisólidos.
Se trata de una acción judicial que apunta a dejar en suspenso un "deshumidificador a corriente de aire caliente" para la deshidratación de los residuos semisólidos (barros) generados puertas adentro de la curtiembre. Esa posibilidad había sido autorizada en abril por el Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible (OPDS), luego de la clausura que sufrió la industria.
Sin embargo, el paquete de obras fue duramente cuestionado por el Municipio. En un documento enviado a la Gobernación, un asesor de la intendenta Rosso marcaba contradictorio con la legislación vigente que se intimara a la empresa a poner en marcha un procedimiento de tratamiento de residuos especiales "sin que ni la firma sea tratadora autorizado, ni las instalaciones tengan las certificaciones que corresponden". En síntesis, el especialista dejaba en claro que el organismo provincial intimaba a la curtiembre a hacer algo que la ley prohíbe. Por eso, recomendaba "no permitir ninguna operación de deshidratación de barros en la planta".
En otras palabras, para el gobierno el artefacto sumará problemas a la grave situación ambiental generada por Curtarsa, con mayor impacto en la localidad de Jáuregui.
(Fuente: El Civismo).