A la espera de definiciones, los aspirantes marcan territorio. La diputada Cáceres sale de la mano con Ritondo. Ducoté buscará volver a encabezar. Los nombres en juego.
En el marco de una interna que empieza a tomar temperatura, los diferentes actores de la coalición opositora comienzan a marcar el territorio que pretenden disputar.
La diputada nacional del Pro, Adriana Cáceres, salió mostrar su nombre junto al del titular de la bancada en la Cámara baja, Cristian Ritondo. Lo hizo el domingo, con carteles en diferentes puentes de la Panamericana.
Los pasacalles llevaban la firma Juventud Protagonista, la agrupación bonaerense que impulsa a Ritondo quien ya hace saber hacia adentro de sus intenciones de ser gobernador.
Con esa jugada de fin de semana, Cáceres parece enviar un mensaje doble a la interna: por un lado, ratifica que seguirá adelante con la intención de disputar el liderazgo a Nicolás Ducoté y, por el otro, que tiene respaldo nacional en su cruzada.
La interna, de todos modos, está en pausa, a la espera de que los principales actores nacionales definan sus intenciones. Sobre todo la exgobernadora María Eugenia Vidal, quien no da indicios acerca de si irá por la revancha en la provincia tras la dura derrota del 2019 o si buscará reamarse con una apuesta menos riesgosa en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
En Pilar, todos los actores aseguran que quieren que se abra el escenario de las internas para definir candidaturas aprovechando las PASO de septiembre. Al menos de la boca para afuera.
Cerca del exintendente Nicolás Ducoté, quien sigue lejos de la prensa pero con apariciones esporádicas en el territorio, creen que cualquier escenario de confrontación interna lo tendría como ganador claro por un dato incontrastable: es el único que cuenta con un conocimiento cercano al 100% en el distrito. Sin embargo, hay quienes creen que al igual que en 2015 todo terminará por resolverse a punta de lapicera.
Por eso, hay dudas incluso entre quienes lo acompañan, sobre todo, porque los lugares en la lista son pocos y los aspirantes demasiados.
Solo un repaso por los ya lanzados lo demuestra:
• La actual concejal Analía Leguizamón ya comenzó a caminar con la intención de renovar su banca y no esconde ambiciones de cara al 2023. Llega de la mano del vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli, quien podría dar el salto a la provincia si Vidal cruza la General Paz. Podría ser segunda, pero le atrae el tope de la lista.
• Jesica Bortule también quiere renovar su banca. Como presidenta de la Coalición Cívica de Pilar apuesta al lugar preponderante que pueda tener Lilita Carrió.
• El radicalismo tiene aspiraciones de mejorar su lugar dentro de la coalición. De nulo diálogo con Ducoté, mantiene charlas con Cáceres, pero por ahora no hay equipo.
La postergación del cronograma electoral le da más tiempo a las definiciones pero el reloj de arena ya comenzó la cuenta regresiva. (Pilar a Diario).
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