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BUENOS AIRES, Setiembre 27, (PUNTO CERO) El Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) y la Federación Argentina de la Industria del Pan (FAIPA) con el inicio de la primavera de 2007 promueven una campaña contra el uso del bromato de potasio fundada en el efecto cancerígeno de este insumo y el funcionamiento clandestino de un 40% de las 30.000 panaderías del país, la mayoría de las cuales utiliza aditivos prohibidos por recomendación de la Organización Mundial de la Salud o de baja calidad, tienen a sus empleados en negro, no cuentan con la habilitación correspondiente, poseen condiciones de higiene irregulares, venden los productos a bajo precio y se localizan en zonas humildes.
Estimando el consumo de pan en 200 gr/día (70 kg/año) por habitante en nuestro país, para reposicionar ese alimento integrante del primer escalón de la pirámide nutricional, el INTI y la FAIPA trabajan juntos en el Plan Nacional de Vida Saludable del Ministerio de Salud de la Nación, que impulsa el desarrollo tecnológico y la capacitación para la elaboración de panes con menor contenido graso e intenta avanzar en el agregado de vitaminas destinadas a la prevención de enfermedades crónicas.
Por otra parte, la FAIPA contempla la colocación de afiches en las vidrieras de los comercios que estén en regla, garantizando al cliente que los mismos no utilizan aditivos prohibidos -en nuestro país, por vía administrativa.
Pese a la prohibición administrativa vigente -resolución 190/98 del Ministerio de Salud de la Nación, que excluyó el bromato de potasio de la lista de aditivos permitidos del Código Alimentario Argentino-, en las diversas jurisdicciones de nuestro país se sigue encontrando pan y otros alimentos y bebidas con bromato de potasio -no obstante existir una serie de productos naturales que actúan como mejorador del pan posibilitando que la masa se agrande y tenga una mejor corteza, sin ser perjudiciales para la salud ni impactar en el valor del pan.
En el entendimiento que es imperioso aplicar una norma con jerarquía legal y con sanción específica, la Senadora Laura Martínez Pass de Cresto, (PJ-Entre Ríos), reivindica su proyecto de ley S-490/06, mediante el cual propone la prohibición total en el territorio nacional:
- Del uso, manipulación y presencia del bromato de potasio en la fabricación o elaboración de alimentos y bebidas o de sus materias primas, así como de sus respectivos ingredientes.
- Del uso del bromato de potasio bajo cualquier forma de producto o empleo dentro de los productos a comercializar, su manipulación por la población laboral -que es la población más expuesta por la falta de experiencia, extrema juventud, alta rotación y falta de cumplimiento de medidas de seguridad e higiene de los lugares de trabajo- y su presencia en el ámbito laboral -dado que la toxicidad del bromato de potasio está dada por su sola existencia-.
- Amén de la prohibición de la importación, fabricación, comercialización y uso del bromato de potasio de grado alimenticio ya sea solo o en mezclas de aditivos que lo contengan para su uso en la producción de alimentos o de bebidas o en el tratamiento de sus materias primas.
- Es de orden público: las previsiones de la ley prevalecen sobre los convenios entre las partes. - Los sectores involucrados deberán presentar e implementar un plan de reconversión industrial, así como de control sanitario de sus empleados, conforme a las leyes de seguridad e higiene laboral vigentes y a la presente.
- Su inobservancia implicará: graduales inhabilitación para las personas y profesionales y clausura para los establecimientos.
Estimando el consumo de pan en 200 gr/día (70 kg/año) por habitante en nuestro país, para reposicionar ese alimento integrante del primer escalón de la pirámide nutricional, el INTI y la FAIPA trabajan juntos en el Plan Nacional de Vida Saludable del Ministerio de Salud de la Nación, que impulsa el desarrollo tecnológico y la capacitación para la elaboración de panes con menor contenido graso e intenta avanzar en el agregado de vitaminas destinadas a la prevención de enfermedades crónicas.
Por otra parte, la FAIPA contempla la colocación de afiches en las vidrieras de los comercios que estén en regla, garantizando al cliente que los mismos no utilizan aditivos prohibidos -en nuestro país, por vía administrativa.
Pese a la prohibición administrativa vigente -resolución 190/98 del Ministerio de Salud de la Nación, que excluyó el bromato de potasio de la lista de aditivos permitidos del Código Alimentario Argentino-, en las diversas jurisdicciones de nuestro país se sigue encontrando pan y otros alimentos y bebidas con bromato de potasio -no obstante existir una serie de productos naturales que actúan como mejorador del pan posibilitando que la masa se agrande y tenga una mejor corteza, sin ser perjudiciales para la salud ni impactar en el valor del pan.
En el entendimiento que es imperioso aplicar una norma con jerarquía legal y con sanción específica, la Senadora Laura Martínez Pass de Cresto, (PJ-Entre Ríos), reivindica su proyecto de ley S-490/06, mediante el cual propone la prohibición total en el territorio nacional:
- Del uso, manipulación y presencia del bromato de potasio en la fabricación o elaboración de alimentos y bebidas o de sus materias primas, así como de sus respectivos ingredientes.
- Del uso del bromato de potasio bajo cualquier forma de producto o empleo dentro de los productos a comercializar, su manipulación por la población laboral -que es la población más expuesta por la falta de experiencia, extrema juventud, alta rotación y falta de cumplimiento de medidas de seguridad e higiene de los lugares de trabajo- y su presencia en el ámbito laboral -dado que la toxicidad del bromato de potasio está dada por su sola existencia-.
- Amén de la prohibición de la importación, fabricación, comercialización y uso del bromato de potasio de grado alimenticio ya sea solo o en mezclas de aditivos que lo contengan para su uso en la producción de alimentos o de bebidas o en el tratamiento de sus materias primas.
- Es de orden público: las previsiones de la ley prevalecen sobre los convenios entre las partes. - Los sectores involucrados deberán presentar e implementar un plan de reconversión industrial, así como de control sanitario de sus empleados, conforme a las leyes de seguridad e higiene laboral vigentes y a la presente.
- Su inobservancia implicará: graduales inhabilitación para las personas y profesionales y clausura para los establecimientos.
Esta iniciativa de prohibición total del uso del bromato de potasio en alimentos recoge: a. recomendaciones desde 1992 de la Organización de Alimentos y Agricultura (FAO) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) a la totalidad de los países que las integran debido a su potencial cancerígeno, adoptadas a su vez de lo establecido en 1989 por la Comisión de la Comunidad Económica Europea, y b. la resolución Nº 73/93 del MERCOSUR que elimina el bromato de potasio de la lista general de aditivos, debiendo los países miembros adecuar su legislación a la misma conforme nuestro compromiso con el marco legal y fundacional del MERCOSUR. (PUNTO CERO).
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