Se trata de María Teresa García, diputada del kirchnerismo, hoy precandidata a senadora bonaerense, quién dio la orden de no habilitar internas en su distrito, San Isidro, dejando afuera al actual concejal Federico Gelay que pretende renovar su banca
Teresa García quiere lista única en San Isidro para Unidad Ciudadana, la propia. Es que la referente K propuso una nómina y pretende que ninguna otra sea habilitada por la junta partidaria. La misma es encabezada por Fernanda Miño (referente de la villa La Cava), Marcos Cianni (La Cámpora) y Celia Sarmiento (Nuevo Encuentro), según informan de un fuerte trabajo social en el distrito, pero ilustres desconocidos en el mundo político local.
Pero, el actual concejal Federico Gelay no se baja de la pelea. Encabeza otra lista, con presencia del Movimiento Sindical, de las Pequeñas Comunidades, del Cooperativismo y de la Juventud Peronista. Lo siguen en el segundo lugar Rosa Coronel y en el tercero Cristian Areco.
La actitud de García es clara, busca proscribir a la competencia -apoyándose en su fuerte influencia sobre las organizaciones del kirchnerismo- dado que Gelay es un candidato mucho más competitivo para San Isidro por su perfil de empresario PyME local y su instalación durante años en el distrito.
Gelay tiene el apoyo de intendentes como Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas) y Gustavo Menéndez (Merlo), y anoche se logró que le habiliten una boleta corta para disputar las PASO locales, con las dificultades que acarrea competir sin el arrastre de los candidatos nacionales.
De todos modos queda una instancia de negociación durante esta tarde, y de la mano de los jefes comunales todavía quedan esperanzas de que finalmente se habilite la lista completa para el edil.
De no lograrse, San Isidro será el único municipio de la primera sección donde el kirchnerismo no es gobierno que no tenga internas en las PASO. Lo que se dice una proscripción, palabra bastante rara para el peronismo. (Cristian Salles, Zona Norte Diario).
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