viernes, agosto 17, 2018

Pilar. Murió una joven en el Hospital Sanguinetti luego de realizarse un aborto.

Ocurrió el domingo. Luego de días de hermetismo, se confirmó esta mañana. Había ingresado con complicaciones por una interrupción voluntaria del embarazo.

Esta vez, la tragedia relacionada con el aborto tuvo a Pilar como escenario: el domingo, una joven vecina de Presidente Derqui falleció en el Hospital Juan C. Sanguinetti, y su ingreso al nosocomio se debió –de acuerdo a lo que confirmaron las diversas fuentes consultadas por El Diario- a complicaciones derivadas de un aborto provocado que no llegó a completarse.

R., la joven fallecida, tenía 30 años y vivía en el barrio Monterrey. La noticia comenzó a correr este lunes, prácticamente desde que ocurrió el hecho. Primero, como rumor; luego, como datos que iba cobrando cada vez más precisión. Finalmente, en la mañana de hoy, en el programa Materia Prima (FM Plaza 92.1), el doctor Esteban Sieling, director ejecutivo del Sanguinetti, confirmó el hecho, aunque no profundizó ya que “no tenemos permiso de los familiares para dar información, es un tema legal. Por la confidencialidad de la familia no puedo dar información”.

No obstante, afirmó que el suceso “está confirmado, relacionado con un aborto provocado, no espontáneo”, evitando (para resguardar la confidencialidad) brindar mayores precisiones sobre las circunstancias médicas que llevaron a la muerte.

Gravedad
De acuerdo a lo que pudo investigar El Diario una vez reconocido el caso por parte de los directivos del hospital, R. ingresó al hospital local el pasado miércoles con un cuadro de dolor abdominal y fiebre, por lo que se activó un protocolo para casos similares.

Luego de un período de mejora, su estado de salud comenzó a agravarse, hasta que el domingo se produjo el peor desenlace.

Si bien desde ese momento reinó el hermetismo, las fuentes indicaron que la evidencia era incontrastable: la joven llegó al hospital luego de haber intentado practicarse un aborto, en este caso del tipo “incompleto”. Es decir, que aún quedaban restos en su cuerpo.

No obstante, al ingresar al Sanguinetti, las versiones señalan que tanto la mujer como su familia habrían negado en todo momento la existencia de la interrupción voluntaria del embarazo, a pesar de las evidencias advertidas por el personal de salud.

Una nueva tragedia relacionada con el aborto clandestino, en este caso un drama que involucra al distrito en forma directa, a menos de una semana del rechazo en el Senado de la ley que pretendía legalizar la práctica. En la tarde de ayer, se supo que R. ya era madre: aunque no fue confirmado, aparentemente de cuatro hijos. (Pilar a Diario).

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