Nicolás Capelli, el futuro director ejecutivo del Instituto de Culturas y Turismo, sostuvo que arriban entre 4.5 a 6 millones de visitantes al año aunque la ciudad "tiene muy poco turismo". Habló de los proyectos para reformar la Terminal de Ómnibus y adelantó la revisión de las concesiones del Balneario Parque.
Con acuerdo entre las diferentes fuerzas políticas que conforman el Concejo Deliberante y el voto unánime de los ediles, se creó el Instituto de Culturas y Turismo, un ente descentralizado con el objetivo de jerarquizar y darle autonomía a dos áreas fundamentales en una ciudad como Luján. El organismo tendrá autarquía administrativa, económica y financiera, y su “objetivo fundamental será la gestión de proyectos turísticos y culturales, su desarrollo, ejecución y administración, así como la difusión del trabajo de los artistas de Luján y la promoción de los destinos turísticos de nuestra ciudad”, además de la “protección del distrito histórico de la ciudad”, según establece la normativa.
Aunque todavía falta el aval del cuerpo deliberativo -uno de los requerimientos que establece la ordenanza-, su director ejecutivo será Nicolás Capelli, ex concejal que desde el 10 de diciembre ocupa esas áreas dentro de la vieja estructura de gobierno.
Según expuso Capelli, la decisión del jefe comunal Leonardo Boto “fue generar una herramienta que pueda poner en otra posición tanto al turismo como las culturas de la ciudad de Luján”. De todas formas, reconoció que “es un proyecto que se viene hablando en todas las plataformas políticas desde el retorno de la democracia hasta hoy y que por alguna cuestión no llegaba a concretarse. Pero propuestas de darle una entidad distinta a la situación turística de Luján hubo desde el retorno de la democracia hasta hoy”.
“Por suerte hubo un entendimiento de todas las fuerzas políticas, hubo un trabajo muy fuerte tanto del oficialismo como de la oposición, que fueron fundamentales para el texto final. La idea es empezar a poner en movimiento esta rueda, donde la cultura alimente el turismo y el turismo alimente la cultura. Para que, de esa forma, se generen ingresos por primera vez para el Estado Municipal”, afirmó.
- ¿Se valora que la ordenanza haya salido por unanimidad?
- Eso es muy importante. Nosotros no teníamos la voluntad política de que esto fuera una cuestión de mayoría simple. Particularmente, Leo (Boto) lo piensa como una política de Estado y tienen que asegurar en principio la perdurabilidad. Personalmente, esto no lo hablo en nombre del espacio político y mucho menos del intendente, considero un error las oposiciones al simple hecho de la continuidad, el hecho de romper algo porque venía de una gestión anterior. La verdad es que si las cosas están bien, hay que sostenerlas. Y creemos que este estilo de política como es el Instituto tiene que sostenerse en el tiempo, generar para Luján un ingreso, mejorar la oferta para los visitantes de la ciudad y romper con un divorcio entre la comunidad de Luján y la zona turística. Es como si 9 de Julio se convirtiera en un abismo y el vecino no atravesara esa zona. Antes era hasta Francia y, con la entrada de cadenas de comidas rápidas y una cafetería muy conocida, avanzó una cuadra más. Eso no es un dato menor, te demuestra que existe una oferta. Al aumentar la oferta, la gente accedió a eso. Nosotros tenemos como Estado garantizar ofertas y estamos convencidos que se puede hacer de la mano de la cultura.
- ¿Y cómo se mejora la oferta turística, que en su gran mayoría es privada?
- Las ofertas que son privadas, en su gran mayoría, se están haciendo sobre espacios públicos. Esa es una deuda que tenemos pendiente como Estado. Además, poniendo en valor los mismos recursos municipales que, en los últimos ocho años, sufrieron un deterioro muy fuerte. Desde la Terminal como una prestadora de servicios, hasta el parque Ameghino como un lugar de recreación. Está literalmente abandonado, los últimos años fueron muy trágicos para esas áreas. Tenemos que generar una oferta desde el Estado.
- Uno de los puntos quizás más complejos de abordar es el tema de las concesiones -muchas de ellas vencidas- del Balneario Parque y la casi nula recaudación que le deja al Municipio. ¿Se va a avanzar con eso?
- Estamos trabajando fuertemente en eso. Soy un convencido que mejorar la oferta tiene que ver con una revalorización de todas aquellas concesiones del Municipio que hoy están siendo explotadas. Hay que hacer un análisis específico de cada una de las concesiones. Tenemos que mejorar la oferta turística y eso también incluye esta revisión. Fue uno de los primeros objetivos que nos planteó el intendente.
- ¿Qué otras herramientas te da el Instituto?
- El ente descentralizado es una herramienta en sí. Lo que tenemos que generar nosotros a partir de eso son políticas públicas. Por eso entendemos que es muy importante la democratización de lo que se haga desde el Instituto. Queremos construir toda la base política de esto con todas las fuerzas políticas de la ciudad de Luján. Queremos que, además, incluso aquellas que no requieran de aprobación del Concejo Deliberante, sean discutidas allí. Estamos ante lo que podría considerarse una nueva etapa fundacional del área. Para eso requerimos las fuerzas políticas activas, trabajando sobre cada uno de los temas que van a ser eje de esta gestión.
- ¿Cuáles son esas primeras medidas en las que están trabajando?
- Estamos trabajando en todo aquello que tenga que ver con el patrimonio que forma parte del Instituto, para recuperar diversos lugares que hoy no están siendo explotados por el Municipio. Estamos trabajando en puesta en valor de espacios naturales; en un cambio de categorías de los hoteles y restaurantes de Luján; en una propuesta de estacionamiento en espacios turísticos, en ordenanzas que regulen y hagan respetar los derechos de los trabajadores de las culturas; en aumentar la oferta museográfica del Partido; en recuperar festivales que formaron nuestra identidad como comunidad; y fundamentalmente en retomar otra propuesta que durante muchos años en Luján estuvo dormida que es la de tener una marca propia como ciudad. Una marca turística que nos identifique no solo en nuestro país sino en todo el mundo. Ciudades turísticas que tienen un tercio de los visitantes que viene a nuestra ciudad tienen esa marca y nosotros no tenemos esa forma de identificarnos.
- ¿Qué análisis hacés de la situación turística?
- Luján prácticamente tiene muy poco turismo. Tiene muchos visitantes. No hay pernocte en la ciudad, es muy limitado, no existe la oferta para que eso suceda. Y el visitante tiene cada vez menos actividades por las cuales quedarse en Luján. Eso está claramente demostrado en lo que encontramos en la cuestión del Estado. Luján tiene entre 4.500.000 a 6.000.000 de visitantes por año. Y cuando llegamos al área de Turismo nos encontramos con dos recepcionistas y con tres personas que trabajaban, una abocada a Carlos Keen y otras dos a la zona histórico-basilical. Entonces vos tenías entre cinco y seis personas para 4.5 o 6 millones en forma anual. No había claramente una voluntad política del Estado de generar del turismo una herramienta social. Tenemos la obligación de hacerlo.
- ¿Existen proyectos para la reforma de la Terminal?
- Existen dos proyectos, uno de la gestión de Graciela Rosso y otro de Oscar Luciani, que fueron financiados por el Municipio y tramitados ante organismos internacionales. Estamos retomando esos trámites. Aquellas cosas que entendemos que son buenas para la comunidad de Luján, no nos importa si la hizo o no la gestión anterior. Queremos avanzar porque sabemos que el resultado puede ser positivo. Se está trabajando fuertemente en recuperar esos proyectos que fueron hechos por profesionales de Luján, como la arquitecta Clarisa Salvo, muy reconocida. Está la posibilidad de la obtención de aquellos fondos que nos permitan una inversión de este estilo para hacer la obra porque, obviamente, no lo podemos cubrir con fondos municipales. Claramente tenemos que mejorar esa oferta, es un servicio que estamos dando de manera deficiente. (El Civismo).
No hay comentarios.:
Publicar un comentario