viernes, marzo 18, 2022

En febrero se necesitó más $83.000 para no ser pobre.

Aumentó 6,6%. Así la canasta básica total y la alimentaria presentaron una aceleración, duplicando el nivel que tuvo en enero.

En febrero la variación mensual de la canasta básica alimentaria (CBA) fue de 9% respecto a enero. Mientras tanto, la canasta básica total (CBT) presentó un incremento de 6,6%, según dio a conocer hoy el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec).

De esa forma, ambas mostraron una aceleración en comparación a enero, que alcanzó 4,2% y 3,3%, respectivamente. Esa tendencia alcista inició el mes pasado, tras experimentar una desaceleración en los meses previos.

La canasta básica alimentaria, determinada por los requerimientos normativos kilo calóricos y proteicos imprescindibles para que un varón adulto cubra esas necesidades durante un mes, tuvo una variación interanual de 52,2% y se situó en $12.108.

A su vez, una familia tipo conformada por dos adultos y dos hijos menores de seis y ocho años, necesitó percibir $37.414 para no encontrarse por debajo de la línea de indigencia.

Por su parte, la canasta básica total (la CBA ampliada y considerando los bienes y servicios no alimentarios), tuvo una variación interanual de 44,5%.

La misma familia tipo necesitó $83.807 para no ser considerada pobre, mientras que una familia de 5 integrantes requirió de $88.147. Para un adulto, la CBT se ubicó en $27.122 de acuerdo con el informe.

El aumento de ambas canastas se ubicó por encima del nivel del incremento de los precios minoristas, que fue del 4,7%.


 

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