MALVINAS ARGENTINAS, Diciembre 28, (PUNTO CERO) Elecciones. Victoria aplastante del oficialismo. Reconocimiento de propios y extraños. Asunción una vez más con todas las pompas en Malvinas Argentinas. Todo en su lugar, como siempre....
Pero no... Luego de la ceremonia de asunción, el rumor que empieza a correr cada vez con más fuerza... Renunció el secretario de gobierno Miguel David Harari... Todos los micrófonos miran al intendente Jesús Cariglino... Este simplemente dice «hoy no estuve en todo el día en la oficina, no se nada, tengo que ver». No se habló más del tema.
¿Qué paso? Existió o no la renuncia?
No queda ninguna duda, que hubo enojos y que el amague de renuncia existió y que luego de un cónclave a solas entre Cariglino y Harari las aguas volvieron a su cauce habitual. Varias hipótesis y rumores circularon por los pasillos, para todos los gustos.
Pero para quienes conocen el entramado del poder malvinense, no quedan dudas que la gota que rebalsó el vaso, es el todopoderoso Dr. Héctor Hugo Schwab y la frutilla del postre el discurso del intendente en su reasunción, donde todos los elogios estuvieron circunscriptos a resaltar el área de salud y donde casi no hubo mención para nada más, excepto e irónicamente para un ex, el licenciado Emilio Sebastián Udaquiola, que se alejo de la administración justamente por desaveniencias con el encumbrado Dr. Schwab.
Esto se asemeja mucho a las engañosas corrientes del mar, donde por arriba parece estar todo en calma y en las profundidades las corrientes embravecidas hacen de las suyas.
Amigos y enemigos no desconocen la capacidad de gestión y esta se ve potenciada por el increíble respaldo político para hacer y deshacer a gusto y piacere que le otorgó desde el primer día el jefe comunal a su secretario de salud.
Pero eso no es impedimento para que con el correr de los años, en penumbras la mayoría opine que solamente se lo soporta, porque todo lo excelente que tiene en gestión, lo carece en relaciones públicas. El Dr. Schwab la materia de relaciones públicas y diplomacia es algo pendiente y entonces todo lo bueno que logra, lo empaña por ese lado. Pero nadie se anima a decirlo públicamente, porque nadie desconoce el respaldo que desde el poder consigue, cada día más y está el temor de que si se dice muy fuerte, la represalia pueda estar ahí nomas a la puerta, pero no quedan dudas, que hay infinidad esperando algún traspié, para caerle encima cual pirañas.
También existe y siempre ha sido y es motivo de comentarios, el temor que genera que si hay algún traspié del secretario de salud, en esa caída arrastraría al jefe comunal.
Como tampoco se puede obviar que muchos que podrían tener opinión o puntos de vista diferentes, pero por temor a perder el calorcito que brinda el poder, optan por el silencio y que otros sigan elaborando el diario de Irigoyen.
En definitiva no deja de ser una lucha de espacios de poder en la cumbre, pero esta vez se salió de madre y estalló públicamente
Harari, no lo soporto más y pateo el tablero. Cuales son las nuevas condiciones para que una sociedad política, Cariglino-Harari, que hasta aquí era a pruebas de balas continúe? Nadie lo sabe... A lo mejor sólo el tiempo tendrá la respuesta.
Mientras tanto... Renuncia de Harari? Si Señor... No señor. En términos futboleros, silencio stampa diría Alfio Basile.
Pero no... Luego de la ceremonia de asunción, el rumor que empieza a correr cada vez con más fuerza... Renunció el secretario de gobierno Miguel David Harari... Todos los micrófonos miran al intendente Jesús Cariglino... Este simplemente dice «hoy no estuve en todo el día en la oficina, no se nada, tengo que ver». No se habló más del tema.
¿Qué paso? Existió o no la renuncia?
No queda ninguna duda, que hubo enojos y que el amague de renuncia existió y que luego de un cónclave a solas entre Cariglino y Harari las aguas volvieron a su cauce habitual. Varias hipótesis y rumores circularon por los pasillos, para todos los gustos.
Pero para quienes conocen el entramado del poder malvinense, no quedan dudas que la gota que rebalsó el vaso, es el todopoderoso Dr. Héctor Hugo Schwab y la frutilla del postre el discurso del intendente en su reasunción, donde todos los elogios estuvieron circunscriptos a resaltar el área de salud y donde casi no hubo mención para nada más, excepto e irónicamente para un ex, el licenciado Emilio Sebastián Udaquiola, que se alejo de la administración justamente por desaveniencias con el encumbrado Dr. Schwab.
Esto se asemeja mucho a las engañosas corrientes del mar, donde por arriba parece estar todo en calma y en las profundidades las corrientes embravecidas hacen de las suyas.
Amigos y enemigos no desconocen la capacidad de gestión y esta se ve potenciada por el increíble respaldo político para hacer y deshacer a gusto y piacere que le otorgó desde el primer día el jefe comunal a su secretario de salud.
Pero eso no es impedimento para que con el correr de los años, en penumbras la mayoría opine que solamente se lo soporta, porque todo lo excelente que tiene en gestión, lo carece en relaciones públicas. El Dr. Schwab la materia de relaciones públicas y diplomacia es algo pendiente y entonces todo lo bueno que logra, lo empaña por ese lado. Pero nadie se anima a decirlo públicamente, porque nadie desconoce el respaldo que desde el poder consigue, cada día más y está el temor de que si se dice muy fuerte, la represalia pueda estar ahí nomas a la puerta, pero no quedan dudas, que hay infinidad esperando algún traspié, para caerle encima cual pirañas.
También existe y siempre ha sido y es motivo de comentarios, el temor que genera que si hay algún traspié del secretario de salud, en esa caída arrastraría al jefe comunal.
Como tampoco se puede obviar que muchos que podrían tener opinión o puntos de vista diferentes, pero por temor a perder el calorcito que brinda el poder, optan por el silencio y que otros sigan elaborando el diario de Irigoyen.
En definitiva no deja de ser una lucha de espacios de poder en la cumbre, pero esta vez se salió de madre y estalló públicamente
Harari, no lo soporto más y pateo el tablero. Cuales son las nuevas condiciones para que una sociedad política, Cariglino-Harari, que hasta aquí era a pruebas de balas continúe? Nadie lo sabe... A lo mejor sólo el tiempo tendrá la respuesta.
Mientras tanto... Renuncia de Harari? Si Señor... No señor. En términos futboleros, silencio stampa diría Alfio Basile.
Para otra nota será interesante también analizar cuantos ya se estaban probando la ropa del finado que no fue tal y que sigue gozando de buena salud. (PUNTO CERO).
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