jueves, octubre 11, 2012

Detienen y lo acusan de matar y enterrar a un hombre, en Los Polvorines, cuando iba a vender el auto.


Un joven fue detenido hoy, tras una persecución, acusado del crimen a balazos de un hombre que había ido a vender su auto y al que luego lo enterraron en el pozo ciego de una vivienda, en la localidad bonaerense de Los Polvorines, partido de Malvinas Argentinas.
Fuentes policiales informaron a Télam que se trata de Brian Gabriel Ortega (18), quien estaba prófugo por el homicidio de Walter Alfano (46), en el marco de una investigación en la que ya habían detenido a su padre, Miguel Angel Ortega (51).
También dijeron a Télam que la detención del joven se efectuó cuando efectivos de la Jefatura Distrital de Malvinas Argentinas y de la comisaría de Los Polvorines lo detectaron como acompañante de una camioneta Renault Sandero.
En ese momento, el personal comenzó una persecución que culminó en el cruce de la ruta provincial 8 y Darragueira, donde detuvieron a Ortega junto con el conductor del vehículo, un hombre de 42 años, éste último por "encubrimiento".

Allanamientos
Según las fuentes, los investigadores realizaron anoche diez allanamientos por la zona pero el joven no pudo ser atrapado, hasta que esta mañana obtuvieron el dato de que se movilizaba en una camioneta de esas características, buscando un "aguantadero" para esconderse.
El hecho se inició el viernes, cuando Alfano llevó a sus hijos a la escuela y le dijo a su mujer que luego iría a una casa del barrio El Ombú, de Los Polvorines, a vender su Ford Falcon, por el que le habían ofrecido 6.000 pesos.
La vivienda a la que Alfano tenía previsto ir para vender su auto está situada a sólo 300 metros de la suya, ubicada en Renacimiento al 4200, de dicho barrio, donde vivía con su esposa, su hijastra, sus hijos y sus padres.
Pero cerca de las 18 de ese día, la mujer de Alfano recibió un llamado del colegio al que concurren sus hijos, en el que le avisaron que los niños no habían sido retirados por su padre como sucedía habitualmente.
"El era un hombre muy dedicado a sus hijos, por lo que era por demás extraño que no los retirara de la escuela. Eso alertó a su mujer, que empezó a pensar que algo le podía haber pasado", contó a Télam un jefe policial que participó de la pesquisa.
La esposa de Alfano radicó, entonces, la denuncia en la comisaría segunda de Los Polvorines, cuyos efectivos iniciaron una investigación junto con el personal de la Jefatura Distrital local y de la sub DDI de San Miguel.
Los efectivos secuestraron primero el auto de Alfano que, según las fuentes policiales, estaba estacionado a 80 metros de la casa de los supuestos compradores, cerrado con llave y sin ningún signo que despertara sospechas.
Por orden judicial, los efectivos realizaron algunas averiguaciones en el barrio, tomaron declaraciones a vecinos y familiares y el domingo inspeccionaron la vivienda a la que Alfano supuestamente había ido a vender el auto.
Para ese momento, los policías ya no hallaron en su interior a sus ocupantes, que al verse investigados optaron por huir, añadieron los voceros.
Un jefe policial consultado por Télam dijo que, tras un relevamiento del terreno -realizado con perros adiestrados para detectar rastros- los pesquisas llegaron hasta un sector donde había tierra removida y la tapa de un pozo ciego que, al levantarla, dejó al descubierto el cadáver de Alfano.
El hombre presentaba un fuerte golpe en la cabeza y dos disparos, uno en el cráneo y otro en el abdomen.
"El tiro que le aplicaron entre las costillas fue con el arma apoyada, ya que en la ropa quedó marcado el halo de pólvora", detalló un pesquisa.
Por orden del fiscal de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 22 de Malvinas Argentinas, Fernando Cordas, la policía montó un operativo de búsqueda de los prófugos, en el marco del cual apresó el lunes al mayor de ellos.
El hombre fue atrapado en la vía pública cuando se disponía a ingresar a un estudio jurídico al que había llamado en busca de asesoramiento.

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