Una zarigüeya y un tatú peludo desembarcaron en la Reserva Natural de Pilar

 

La Reserva Natural de Pilar recibió hoy dos nuevos habitantes: ¡una zarigüeya y un peludo! Los ejemplares fueron traídos desde la municipalidad de Malvinas Argentinas, más específicamente de la Granja-Zoo Iku Huazi. Del acto participaron la Dirección de Ambiente y Soberanía Alimentaria, voluntarios de de la Asociación Patrimonio Natural y representantes del municipio de Malvinas Argentinas, como por ejemplo la concejal, Ing. Sol Giménez..

¿Por qué en Pilar?
La Reserva Natural de Pilar es un área protegida y tanto Provincia como Nación la reconocen como un lugar apto para la reintroducción de especies de la zona. Iku Huazi recupera animales silvestres con el compromiso de liberarlos en zonas protegidas, tal como lo es la Reserva de nuestro partido.

¿Cuáles fueron los animales que se introdujeron a la Reserva?
El “armadillo peludo”: El armadillo peludo, peludo, tatú peludo o quirquincho grande (Chaetophractus villosus) es una especie de mamífero cingulado de la familia endémico de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay. Es un simpático animal acorazado y su armadura está constituida por un mosaico de pequeñas placas óseas, desde la capa inferior de la dermis , y están recubiertas de epidermis córnea. Es un sistema de protección contra sus depredadores; protegiendo incluso su cola.

La zarigüeya: Su nombre real es Zarigüeya (Didelphis albiventris) pero en Argentina todo el mundo la conoce como ” comadreja “, aunque en realidad, el uso de este nombre es una deformación de los criollos que usaron el nombre de un animal ya conocido en Europa para designar una especie típicamente sudamericana.

Esto es el caso también del coipo llamado “nutria ” o la mara llamada “liebre”. La Zarigüeya argentina no tiene nada que ver con la verdadera comadreja (Mustela nivalis) que es un animal del hemisferio Norte; de hecho, ni siquiera están emparentadas. La zarigüeya es un marsupial, es decir que es prima del canguro o del koala.