“No hay otra manera de contrarrestar esta situación que trabajarla de manera complementaria enfocando en la problemática familiar, el entorno barrial, comunitario y su sucedáneo en las políticas públicas. En San Isidro procuramos desde hace años la formación de redes comunitarias que sienten las bases para una sociedad mejor y brinden herramientas para la prevención de la violencia. Así como lo hacemos en materia de salud pública, a nivel social el trabajo tiene que estar orientado a la prevención y la creación de dispositivos que permitan la detección temprana de conflictos de pareja y dentro de las familias para que puedan ser tratados de manera interdisciplinaria antes de que se conviertan en un problema grave e irreversible”, dijo el intendente de San Isidro, Dr. Gustavo Posse.
Así respondió a una consulta periodística sobre los reiterados hechos de sangre relacionados con cuestiones familiares, de vínculos y de pareja, sobre niños y mujeres "Debe llamar muchísimo la atención tanto a las autoridades como a la sociedad toda”, sostuvo e indicó que ello se viene presentando en todo la geografía argentina.
Respecto de la experiencia de la comuna en la materia, Posse aseveró que se “cuenta con numerosas herramientas. Organizamos Grupos Multifamiliares coordinados por profesionales que trabajan en materia de prevención y resolución de conflictos. Tenemos Equipos de Convivencia que tratan problemas entre familias a fin de evitar una espiral de violencia, creamos un Consejo Local de Protección de la Niñez y Adolescencia donde pasan a intervenir las Organizaciones No Gubernamentales especializadas en la temática, los Centros de Atención Primaria de la Salud, los docentes y los padres preocupados que son apoyados por nuestro municipio así como las instancias judiciales pertinentes; Hemos creado también una Fiscalía temática dedicada exclusivamente a la atención de abuso y violencia sobre menores y mujeres”.
“Justamente este es el camino, una red donde todos seamos agentes sociales de salud física familiar y comunitaria”,concluyó.
Así respondió a una consulta periodística sobre los reiterados hechos de sangre relacionados con cuestiones familiares, de vínculos y de pareja, sobre niños y mujeres "Debe llamar muchísimo la atención tanto a las autoridades como a la sociedad toda”, sostuvo e indicó que ello se viene presentando en todo la geografía argentina.
Respecto de la experiencia de la comuna en la materia, Posse aseveró que se “cuenta con numerosas herramientas. Organizamos Grupos Multifamiliares coordinados por profesionales que trabajan en materia de prevención y resolución de conflictos. Tenemos Equipos de Convivencia que tratan problemas entre familias a fin de evitar una espiral de violencia, creamos un Consejo Local de Protección de la Niñez y Adolescencia donde pasan a intervenir las Organizaciones No Gubernamentales especializadas en la temática, los Centros de Atención Primaria de la Salud, los docentes y los padres preocupados que son apoyados por nuestro municipio así como las instancias judiciales pertinentes; Hemos creado también una Fiscalía temática dedicada exclusivamente a la atención de abuso y violencia sobre menores y mujeres”.
“Justamente este es el camino, una red donde todos seamos agentes sociales de salud física familiar y comunitaria”,concluyó.
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