BUENOS AIRES, Noviembre 12 (PUNTO CERO) El gobernador y otros dirigentes kirchneristas respaldaron la denuncia de Cristina de que hay "situaciones provocadas" para generar malestar en la sociedad. El radical Morales, en cambio, instó al Gobierno a que "afloje con la incitación a la violencia".
La profundización de las protestas sociales que se notó especialmente en las últimas semanas provocó un nuevo cruce entre el kirchnerismo y la oposición. Por un lado, el gobernador bonaerense Daniel Scioli y otros dirigentes oficialistas salieron hoy a apoyar a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en su denuncia de que hay "situaciones provocadas" para generar malestar entre la gente. Por el otro, el titular de la UCR, Gerardo Morales, le pidió al Ejecutivo que precise sus denuncias y, a su vez, acusó al Gobierno de ser el que realmente "desestabiliza".
"Hay muchos que quieren distraer la atención y tratar de generar un clima de inestabilidad e incertidumbre para tapar otras cuestiones que están bien encaminadas", afirmó Scioli en declaraciones a radio 10. Así, mostró una idea casi calcada de la que presentó ayer Cristina cuando habló de "situaciones provocadas (...) para poner de mal humor a la sociedad", reflotando la idea de un presunto plan desestabilizador.
Más lejos que el ex motonauta fue el diputado ultrakirchnerista y piquetero oficialista Edgardo Depetri, quien no dudó en afirmar que hay un "poder real destituyente" detrás del cual, según él, están aliados el ex presidente Eduardo Duhalde, la dirigente opositora Elisa Carrió, el sindicalista Luis Barrionuevo, el titular de la Rural Hugo Biolcati y los "multimedios". Al mismo tren se subió el también diputado K José María Díaz Bancalari, que acusó a "la oposición" de tener "la intención de profundizar el desgaste al gobierno" de cara al 10 de diciembre, cuando se renueve el Legislativo.
Desde la vereda de enfrente, Morales presentó un pedido de informes para que el Ejecutivo precise sus denuncias sobre un presunto plan destituyente en la Argentina. Y sostuvo que, contra lo que sostiene el oficialismo, es el mismo Gobierno el que "desestabiliza".
"Si es el propio Gobierno el que aprieta, controla y vigila e, incluso, escucha ilegalmente a opositores políticos y a quienes no acuerdan con sus ideas, la Presidenta debiera saber quién quiere desestabilizar", lanzó el senador en un comunicado en el que, además, resaltó que "sería una gran contribución que el Gobierno aflojara con la incitación a la violencia".
Con palabras muy parecidas pero desde un lugar muy distinto del arco político se expresó la dirigente del MST Vilma Ripoll: "El que desestabiliza es el propio Gobierno que no da ninguna solución a reclamos justos y encima acusa a los trabajadores y los desocupados que exigen respuesta".
Ayer Cristina, tras hablar de las "situaciones provocadas", pidió que los dirigentes entiendan "la forma de llegar a ser presidente es votando cada cuatro años y que sean los ciudadanos los que decidan y no a través de crear situaciones muchas veces amplificadas por intereses que ellos creen que se han visto vulnerados y creando así una situación que no existe en la sociedad".
Morales, quien hace poco fue víctima en Jujuy de agresiones por parte de grupos piqueteros, insistió en pedir que la presidenta "remita (al Congreso) la información sobre grupos destituyentes o sobre un plan de desestabilización". Y alertó: "Violencia es que haya pobres buenos y pobres malos; que haya organizaciones sociales buenas que reciben millonarios recursos sin control y otras malas que no reciben nada; violencia es que Hugo Moyano impida que se repartan los diarios y violencia es que los amigos del poder sigan recibiendo prebendas". (PUNTO CERO).
La profundización de las protestas sociales que se notó especialmente en las últimas semanas provocó un nuevo cruce entre el kirchnerismo y la oposición. Por un lado, el gobernador bonaerense Daniel Scioli y otros dirigentes oficialistas salieron hoy a apoyar a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en su denuncia de que hay "situaciones provocadas" para generar malestar entre la gente. Por el otro, el titular de la UCR, Gerardo Morales, le pidió al Ejecutivo que precise sus denuncias y, a su vez, acusó al Gobierno de ser el que realmente "desestabiliza".
"Hay muchos que quieren distraer la atención y tratar de generar un clima de inestabilidad e incertidumbre para tapar otras cuestiones que están bien encaminadas", afirmó Scioli en declaraciones a radio 10. Así, mostró una idea casi calcada de la que presentó ayer Cristina cuando habló de "situaciones provocadas (...) para poner de mal humor a la sociedad", reflotando la idea de un presunto plan desestabilizador.
Más lejos que el ex motonauta fue el diputado ultrakirchnerista y piquetero oficialista Edgardo Depetri, quien no dudó en afirmar que hay un "poder real destituyente" detrás del cual, según él, están aliados el ex presidente Eduardo Duhalde, la dirigente opositora Elisa Carrió, el sindicalista Luis Barrionuevo, el titular de la Rural Hugo Biolcati y los "multimedios". Al mismo tren se subió el también diputado K José María Díaz Bancalari, que acusó a "la oposición" de tener "la intención de profundizar el desgaste al gobierno" de cara al 10 de diciembre, cuando se renueve el Legislativo.
Desde la vereda de enfrente, Morales presentó un pedido de informes para que el Ejecutivo precise sus denuncias sobre un presunto plan destituyente en la Argentina. Y sostuvo que, contra lo que sostiene el oficialismo, es el mismo Gobierno el que "desestabiliza".
"Si es el propio Gobierno el que aprieta, controla y vigila e, incluso, escucha ilegalmente a opositores políticos y a quienes no acuerdan con sus ideas, la Presidenta debiera saber quién quiere desestabilizar", lanzó el senador en un comunicado en el que, además, resaltó que "sería una gran contribución que el Gobierno aflojara con la incitación a la violencia".
Con palabras muy parecidas pero desde un lugar muy distinto del arco político se expresó la dirigente del MST Vilma Ripoll: "El que desestabiliza es el propio Gobierno que no da ninguna solución a reclamos justos y encima acusa a los trabajadores y los desocupados que exigen respuesta".
Ayer Cristina, tras hablar de las "situaciones provocadas", pidió que los dirigentes entiendan "la forma de llegar a ser presidente es votando cada cuatro años y que sean los ciudadanos los que decidan y no a través de crear situaciones muchas veces amplificadas por intereses que ellos creen que se han visto vulnerados y creando así una situación que no existe en la sociedad".
Morales, quien hace poco fue víctima en Jujuy de agresiones por parte de grupos piqueteros, insistió en pedir que la presidenta "remita (al Congreso) la información sobre grupos destituyentes o sobre un plan de desestabilización". Y alertó: "Violencia es que haya pobres buenos y pobres malos; que haya organizaciones sociales buenas que reciben millonarios recursos sin control y otras malas que no reciben nada; violencia es que Hugo Moyano impida que se repartan los diarios y violencia es que los amigos del poder sigan recibiendo prebendas". (PUNTO CERO).
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