El intendente de Tigre, Sergio Massa, tiene virtualmente decidido presentarse como candidato a gobernador en la interna del PJ bonaerense, en la que, de esa forma, se produciría una inesperada competencia de alto voltaje por ese cargo, ya que el actual mandatario provincial, Daniel Scioli, resolvió hace ya tiempo -aunque no formalice la decisión- que irá en busca de su reelección.
Aunque Massa sigue rechazando las consultas en ese sentido, indicando únicamente que "no es tiempo de candidaturas", en el peronismo provincial se considera "un hecho" que este dirigente -integrante del llamado Grupo de los Ocho, que nuclea a intendentes y legisladores críticos del kirchnerismo, pero dispuestos a mantener el encuadramiento en el oficialismo- dará esa pelea interna. Y las fuentes más calificadas admiten que su precandidatura "está muy firme, consolidada, y sólo podría no concretarse si se diera en el peronismo un hecho que, al menos por ahora, no se vislumbra en absoluto".
La virtual decisión -que recién sería formalizada hacia fines de abril- habría llegado tras el pormenorizado análisis de encuestas y de informes de la realidad que presenta actualmente el peronismo oficial de la Provincia y sus perspectivas, en el marco del proceso electoral en marcha.
Todas las encuestas que circulan en el PJ señalan que Scioli lleva la delantera en las mediciones de intención de voto, con una brecha a su favor con relación a Massa que cerca de este dirigente ubican en el orden de los diez puntos. Pero en ese ámbito se muestran optimistas. Aún admitiendo que el intendente podría no ganar la contienda, consideran que "el sector que representa obtendría un caudal de votos suficiente como para quedar muy bien posicionado" en el peronismo provincial.
Plantean, en ese sentido, que "el objetivo del sector es generar un espacio para los que sienten que no pueden discutir y los dejan afuera del partido" y consideran que "en esa tarea, la participación en la interna con un candidato a gobernador resulta decisiva".
Las evaluaciones que desarrolla por estos días el Grupo de los Ocho indican que su punto débil -y el de su eventual precandidato- es, claramente, el sur del Conurbano nucleado en la Tercera Sección Electoral. Pero confían en la fuerza del armado y la influencia de sus referentes en otra región electoral clave, la Primera, que reúne a los distritos del norte y noroeste del Gran Buenos Aires, donde gobiernan varios de sus integrantes, como Jesús Cariglino (Malvinas), Luis Acuña (Hurlingham) y el propio Massa.
El mapa "de inserción" del sector incluye también a los intendentes Pablo Bruera (La Plata), José Eseverri (Olavarría) en la Séptima Sección y Gilberto Alegre (General Villegas) en la Cuarta Sección. Pero algunos observadores evalúan posible también un respaldo de dirigentes del sector de Felipe Solá a una precandidatura de Massa. Por lo pronto, señalan que recientemente el hombre de Tigre visitó Nueve de Julio acompañado por el diputado nacional Raúl Rivara, hombre de confianza del ex gobernador. (Notibonaerense).
Aunque Massa sigue rechazando las consultas en ese sentido, indicando únicamente que "no es tiempo de candidaturas", en el peronismo provincial se considera "un hecho" que este dirigente -integrante del llamado Grupo de los Ocho, que nuclea a intendentes y legisladores críticos del kirchnerismo, pero dispuestos a mantener el encuadramiento en el oficialismo- dará esa pelea interna. Y las fuentes más calificadas admiten que su precandidatura "está muy firme, consolidada, y sólo podría no concretarse si se diera en el peronismo un hecho que, al menos por ahora, no se vislumbra en absoluto".
La virtual decisión -que recién sería formalizada hacia fines de abril- habría llegado tras el pormenorizado análisis de encuestas y de informes de la realidad que presenta actualmente el peronismo oficial de la Provincia y sus perspectivas, en el marco del proceso electoral en marcha.
Todas las encuestas que circulan en el PJ señalan que Scioli lleva la delantera en las mediciones de intención de voto, con una brecha a su favor con relación a Massa que cerca de este dirigente ubican en el orden de los diez puntos. Pero en ese ámbito se muestran optimistas. Aún admitiendo que el intendente podría no ganar la contienda, consideran que "el sector que representa obtendría un caudal de votos suficiente como para quedar muy bien posicionado" en el peronismo provincial.
Plantean, en ese sentido, que "el objetivo del sector es generar un espacio para los que sienten que no pueden discutir y los dejan afuera del partido" y consideran que "en esa tarea, la participación en la interna con un candidato a gobernador resulta decisiva".
Las evaluaciones que desarrolla por estos días el Grupo de los Ocho indican que su punto débil -y el de su eventual precandidato- es, claramente, el sur del Conurbano nucleado en la Tercera Sección Electoral. Pero confían en la fuerza del armado y la influencia de sus referentes en otra región electoral clave, la Primera, que reúne a los distritos del norte y noroeste del Gran Buenos Aires, donde gobiernan varios de sus integrantes, como Jesús Cariglino (Malvinas), Luis Acuña (Hurlingham) y el propio Massa.
El mapa "de inserción" del sector incluye también a los intendentes Pablo Bruera (La Plata), José Eseverri (Olavarría) en la Séptima Sección y Gilberto Alegre (General Villegas) en la Cuarta Sección. Pero algunos observadores evalúan posible también un respaldo de dirigentes del sector de Felipe Solá a una precandidatura de Massa. Por lo pronto, señalan que recientemente el hombre de Tigre visitó Nueve de Julio acompañado por el diputado nacional Raúl Rivara, hombre de confianza del ex gobernador. (Notibonaerense).
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