Lo subrayó en diálogo con Info Región el diputado nacional por el Frente Renovador José Ignacio De Mendiguren. Pidió al Gobierno que mande “señales claras”.
El diputado nacional del Frente Renovador y
dirigente de la Unión Industrial Argentina, José Ignacio De Mendiguren,
brindó su panorama de la situación económica del país y las posibles
soluciones; luego del encuentro que mantuvo la UIA con el flamante ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne.
Según le mencionó De Mendiguren a Info Región, en primer lugar el Gobierno “debe mandar señales claras”. “En todo 2016 hubo señales erráticas en la economía, como cuando salió el tema de las tarifas, idas, vueltas, mientras íbamos con una economía monetaria restrictiva, una economía fiscal expansiva, por momentos pasábamos a hablar de expansión económica y por momentos de ajuste”, planteó el diputado massista.
Asimismo, advirtió que la industria “cerró con un 5 por ciento de caída, lo cual este año va a arrastrar esa inercia”. “Entonces lo que necesitamos es que se tenga clara una medida de sostenimiento del mercado interno, que es lo único que nos está permitiendo mantener el nivel de actividad”, aseveró.
Presión tributaria. Para De Mendiguren, este ítem es “clave” debido a que actualmente hay “una presión tributaria récord, de 10 puntos por encima del promedio de la región”.
“El promedio de la región está en 21 o 22 por ciento de presión tributaria sobre PBI y en Argentina es del 34”, mencionó, y explicó que el país se vuelve “insostenible” para competir en la región, ya que queda como “un país caro para exportar y barato para importar”.
En ese sentido, sostuvo que “si la poca demanda que existe se va a la importación, está claro que el nivel de actividad va a ser difícil que levante”.
Salario. A su vez, consideró que el poder adquisitivo del asalariado es “el único motor que hay para dinamizar el mercado interno este año”, al recodar que en 2016 “el salario perdió 10 puntos contra la inflación, porque las paritarias en promedio cerraron en el 30 por ciento y la inflación oficial superó el 40”.
“Si esto se extiende este año, el impacto en la demanda va a ser muy fuerte”, mencionó De Mendiguren y explicó que “para resolver el tema salario lo más importante es el crecimiento económico, porque si una industria cayó 30 por ciento el nivel de actividad y tiene el 35 por ciento de la capacidad instalada ociosa, con los trabajadores que tiene sobra”.
Al respecto, señaló que “la flexibilización laboral ya demostró que no ha dado efectos en la experiencia Argentina”. Sin embargo, indicó que “distinto es lo que se firmó esta semana en Vaca Muerta, que tiene que ver con un replanteo en esa actividad muy específica, que trabajaron muy codo a codo el sector empresario, el trabajador y la política”, en relación a los cambios en el convenio laboral del sector petrolero.
Pablo Rojas
Según le mencionó De Mendiguren a Info Región, en primer lugar el Gobierno “debe mandar señales claras”. “En todo 2016 hubo señales erráticas en la economía, como cuando salió el tema de las tarifas, idas, vueltas, mientras íbamos con una economía monetaria restrictiva, una economía fiscal expansiva, por momentos pasábamos a hablar de expansión económica y por momentos de ajuste”, planteó el diputado massista.
Asimismo, advirtió que la industria “cerró con un 5 por ciento de caída, lo cual este año va a arrastrar esa inercia”. “Entonces lo que necesitamos es que se tenga clara una medida de sostenimiento del mercado interno, que es lo único que nos está permitiendo mantener el nivel de actividad”, aseveró.
Presión tributaria. Para De Mendiguren, este ítem es “clave” debido a que actualmente hay “una presión tributaria récord, de 10 puntos por encima del promedio de la región”.
“El promedio de la región está en 21 o 22 por ciento de presión tributaria sobre PBI y en Argentina es del 34”, mencionó, y explicó que el país se vuelve “insostenible” para competir en la región, ya que queda como “un país caro para exportar y barato para importar”.
En ese sentido, sostuvo que “si la poca demanda que existe se va a la importación, está claro que el nivel de actividad va a ser difícil que levante”.
Salario. A su vez, consideró que el poder adquisitivo del asalariado es “el único motor que hay para dinamizar el mercado interno este año”, al recodar que en 2016 “el salario perdió 10 puntos contra la inflación, porque las paritarias en promedio cerraron en el 30 por ciento y la inflación oficial superó el 40”.
“Si esto se extiende este año, el impacto en la demanda va a ser muy fuerte”, mencionó De Mendiguren y explicó que “para resolver el tema salario lo más importante es el crecimiento económico, porque si una industria cayó 30 por ciento el nivel de actividad y tiene el 35 por ciento de la capacidad instalada ociosa, con los trabajadores que tiene sobra”.
Al respecto, señaló que “la flexibilización laboral ya demostró que no ha dado efectos en la experiencia Argentina”. Sin embargo, indicó que “distinto es lo que se firmó esta semana en Vaca Muerta, que tiene que ver con un replanteo en esa actividad muy específica, que trabajaron muy codo a codo el sector empresario, el trabajador y la política”, en relación a los cambios en el convenio laboral del sector petrolero.
Pablo Rojas
No hay comentarios.:
Publicar un comentario