La medida regirá desde febrero. Apuntan a colectivos, servicio escolar y remises. Controlarán la higiene de vehículos y si conductores tienen un comportamiento riesgoso. Habrá multas y hasta condenas de trabajo comunitario para los infractores.
El Municipio de Pilar saldrá a controlar fuertemente a las empresas de transporte de pasajeros y prevén fuertes sanciones para las que incurran en una serie de irregularidades que van desde el cumplimiento de las frecuencias hasta el estado de higiene de las unidades.
Así lo informaron desde la Subsecretaría de Regulación del Transporte desde donde aseguraron que a partir del mes de febrero entrará en vigencia el Decreto 3930/16, que establece el Régimen Sancionatorio para el transporte automotor de pasajeros.
La medida, explicaron, alcanza tanto al servicio público y privado e incluye transporte escolar, de turismo, servicios contratados y remises.
En ese sentido, y para informar el contenido del Decreto que ya figura en el Boletín Oficial de la Comuna, se realizó este jueves una reunión con la Subsecretaria del área, Claudia Guerrero, y representantes del sindicato de Unión Tranviarios Automotor (UTA).
Allí especificaron que “durante los primeros 30 días la aplicación de este decreto reglamentario funcionará dentro de un período de prueba con la intención de concientizar a los conductores. En este lapso, quienes no cumplan con estas medidas recibirán un preaviso de sanción”.
Asimismo adelantaron que los controles a las unidades “abarcarán el arrime al cordón, el no respeto de la parada, si los choferes fuman o utilizan el celular mientras están en servicio, la falta de uso de cinturón de seguridad”.
También “se controlará que las puertas de los vehículos de pasajeros se abran y se cierren de forma reglamentaria; es decir, que las unidades no circulen con la puerta abierta durante la marcha”.
Mientras que serán especialmente sancionados quienes no respeten las paradas establecidas y violen la luz de semáforo y las normas de tránsito vigentes.
Frecuencias e higiene
El personal a cargo de los operativos de control también chequeará que se cumplan las frecuencias en las cabeceras de las líneas.
También se hará una inspección relacionada con el estado de la unidad teniendo en cuenta aspectos tales como higiene en los pasamanos, tapizados, ventanillas y pisos y la condición de los distintos elementos como el timbre y los estribos.
“Transcurrido este periodo de adaptación a la nueva normativa, el Tribunal de Faltas será el encargado de decidir el tipo de sanción”, explicaron.
El nuevo marco regulatorio incluye la posibilidad de que quienes no cumplan con lo exigido sean sometidos a trabajo comunitario o la aplicación de una multa pecuniaria.
"Es muy importante este avance que apunta directamente a la posibilidad de ofrecer un servicio de transporte de pasajeros de calidad en el distrito. Esto se complementa con otras acciones que ya se han iniciado como la incorporación del servicio nocturno de colectivos, el cual fue posible gracias a la buena predisposición de las empresas", expresó Guerrero.
Buen trato
El reglamento que elaboró el área de Transporte del Municipio también prevé sanciones para los choferes que tengan un trato inadecuado o desconsiderado con los pasajeros.
“El transportista cuyo personal trate en forma desconsiderada o agrediere a usuarios será sancionado con multas de uno a quince sueldos mínimos del Persona Municipal. Podrá sustituirse con la sanción de la obligación de realizar trabajos comunitarios”, señala el decreto.
También habrá multas para los casos en los que los choferes se nieguen a detener la marcha en los lugares autorizados para el ascenso y descenso de pasajeros.
Mientras que “la violación del régimen de paradas nocturnas y para días de lluvia se sancionará con multas de hasta 10 suelos municipales o trabajo comunitario”. (Pilar de Todos).
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