El secretario adjunto de la CTA Autónoma, José Rigane, advirtió sobre las consecuencias que tendría la implementación de una iniciativa “similar a la que se aprobó en Brasil”.
José Rigane calificó la reforma laboral que proyecta el Gobierno como una “clara ofensiva a los derechos del trabajador”. Pese a que aún no se conoce el proyecto, el secretario adjunto de la CTA aseguró que las autoridades nacionales “pretenden implementar la flexibilización laboral”.
Según indicó, los planes del Gobierno apuntan a “impedir que los trabajadores se organicen sindicalmente para poder negociar de manera individual con cada uno de ellos, similar a lo que se implementó en Brasil”. De esta manera, si se lleva a cabo la modificación “sería una pérdida de los derechos conquistados en los últimos 150 años”, aseguró.
“La intención es ir contra las organizaciones sociales para poder elevar los niveles de productividad y ganancia a costa del sometimiento del trabajador, que significa abaratar los costos de prevención y seguridad, entre otras cosas”, advirtió el dirigente sindical.
Como manera de impedir el avance de lo que definió como políticas “neoliberales”, comentó a Info Región que en la CTA intentaron llevar a cabo medidas de fuerza que contrarresten “la ofensiva contra el trabajador”, pero que no contaron con el “consenso” necesario para su implementación.
Paritarias y salario mínimo. Además, Rigane criticó la intención del Gobierno de “tratar de imponer un piso y un techo a las paritarias”, basados en el supuesto de que la inflación no superaría el 17 por ciento. “En algunos casos lo impusieron y en otros no”, confirmó.
Por último, calificó como “una vergüenza” el aumento del salario mínimo, vital y móvil del 24 por ciento recién a aplicarse dentro de un año. (Inforegión).
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