El Gobierno provincial esgrimió en las
últimas horas dos gestos de acercamiento a la Iglesia con una carta y
una foto, tras las fuertes críticas expresadas por la Pastoral de
Adicciones de la Conferencia Episcopal Argentina por la legalización del
juego online.
La relación entre el gobierno de María
Eugenia Vidal y la Iglesia se volvió a tensionar la semana pasada tras
la legalización del juego online con la aprobación de la Ley Fiscal e
Impositiva. Desde la Pastoral de Adicciones consideraron que la medida
convierte “a cada casa en un casino” en el marco “de la crisis económica
que atraviesa el país”.
“No creemos que se justifique esta
decisión argumentando que este negocio se da en la clandestinidad. Se
antepone un objetivo meramente recaudatorio y legalizan el negocio de
unos pocos sin considerar los daños que deja”, reprocharon desde el área
de la Conferencia Episcopal que coordina el sacerdote José María Di
Paola, más conocido como Padre “Pepe”.
Desde el Gobierno buscan ahora aminorar
tensiones. Por un lado, en las últimas horas, el titular del Instituto
Provincial de Lotería y Casinos, Matías Lanusse, envió una carta a la
Pastoral de Adicciones, en la que asegura que la decisión de regular el
juego online es “para cuidar a los bonaerenses”.
Lanusse señaló que “durante años el
juego creció de manera persistente” por eso “desde el primer día tomamos
la decisión de enfrentarlo, combatir el juego ilegal y reducir el juego
legal”. En este punto, señaló que Vidal cerró tres casinos y dos
bingos.
En tanto, sobre la legalización explicó
que “hasta hoy, todo pasaba dentro de un vacío legal que dejaba a las
personas en una situación de extrema vulnerabilidad”. “Esta legislación y
su reglamentación nos va a permitir ejercer límites para cuidar y
proteger a los vecinos, reducir el riesgo de adicción y enfermedad, y
establecer un marco legal para lograr que la actividad no crezca”,
opinó.
El otro gesto de acercamiento del
Gobierno provincial a la Iglesia fue la foto que protagonizó hoy Vidal
con el sacerdote Gustavo Manrique en un encuentro que mantuvo con un
grupo de niños y adolescentes que reciben asistencia en el hogar Casa de
Encuentro Comunitaria Nazareth, en la localidad de Tortuguitas
(Malvinas Argentinas).
Relación con idas y vueltas
La relación de la administración
bonaerense con la Iglesia fue de idas y vueltas, en un año de fuertes
conflictos sociales que contaron con la intervención de diferentes
referentes eclesiásticos.
La Arquidiócesis de La Plata, por
ejemplo, intervino en el conflicto del Astillero Río Santiago para
desarticular la toma del ministerio de Economía; mientras que el
presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social provincial,
monseñor Jorge Lugones, recibió a los gremios del Frente de Unidad
Docente en medio del conflicto salarial.
Otro punto polémico, tanto a nivel
nacional como provincial, fue la misa celebrada en Luján por el obispo
Agustín Radrizzani, de la que participaron Hugo y Pablo Moyano. Ese
evento fue fuertemente criticado desde el oficialismo. (DIB)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario