El Gobierno confirma la concesión de las líneas Urquiza y Belgrano Norte, pero mandó a rehacer los pliegos para adecuarlos a la normativa vigente, que impide las concesiones integrales. Además, revisarán las inversiones que se exigirán a los futuros concesionarios.
El Ministerio de Transporte de la Nación insistirá con la licitación para concesionar las líneas Belgrano Norte y Urquiza a operadores privados, pero ordenó rehacer los pliegos y consultar a las empresas para que formulen observaciones y sugerencias.
Con esta medida, el Gobierno confirma la decisión tomada en marzo pasado de continuar con el proceso de reprivatización de ambas líneas, que había sido iniciado durante el gobierno de Macri. Así se desprende de la resolución 228/2020, que fue publicada este miércoles en el Boletín Oficial y que lleva la firma del ministro Mario Meoni.
La resolución ordena, por un lado, reelaborar o readecuar la documentación licitatoria para adecuarla al marco normativo vigente, esto es, las leyes 26.352 (de separación de operación e infraestructura) y 27.132 (de Ferrocarriles Argentinos). En este sentido, se realizará “una reestructuración sustancial” y “de orden estructural” del “diseño regulatorio de la documentación licitatoria”.
Tal como explicó este medio, ninguna de esas leyes contempla la posibilidad de una concesión integral como la que había planteado la gestión anterior para ambas líneas. De hecho, la ley de Ferrocarriles Argentinos de 2015 no contempla en ningún caso la figura de la concesión, que la gestión Meoni mantiene en pie.
Pero la revisión dispuesta por el Ministro de Transporte no será únicamente en el plano regulatorio: también se realizará “una sustancial redefinición de los programas de inversión y adquisiciones estipulados” en los pliegos originales, atento al “contexto socio-económico actual”.
Este apartado parece indicar que las autoridades de Transporte han tomado nota del reclamo de las empresas interesadas en presentarse a la licitación, que ya el año pasado (en un contexto sustancialmente distinto) habían hecho oír su malestar por lo que consideraban una exagerada exigencia de inversiones de parte del Estado hacia los futuros concesionarios.
Sin ir más lejos, los pliegos elaborados por el gobierno anterior indicaban que los futuros concesionarios debían hacerse cargo de la renovación del material rodante de ambas líneas –que ya sobrepasó su vida útil– por trenes cero kilómetro, una inversión varias veces millonaria que ninguna de las potenciales interesadas estaba dispuesta a desembolsar.
La insistencia con el proceso resulta llamativa, ya que no se ha explicado hasta ahora por qué sería necesario o conveniente mantener al Urquiza y el Belgrano Norte en manos de operadores privados, mientras el resto de la red metropolitana es manejada con razonable éxito por la estatal SOFSE.
Tampoco es un caso comparable al del Subte, donde el rol del privado podría justificarse en todo caso con el aporte de un expertise técnico del que carecería la empresa estatal, porque nadie duda de que la SOFSE tiene esa capacidad técnica. Originalmente estaba previsto que ambas líneas volvieran al Estado con el vencimiento de las concesiones de Ferrovías y Metrovías, en 2017 y 2018, pero en cambio fueron prorrogadas en forma precaria primero por la gestión Dietrich y luego por Meoni.
El gobierno de Macri, al menos, podía argumentar a favor de la concesión amparándose en las supuestas inversiones en material rodante que traerían los nuevos operadores. Pero en el caso de que eso se abandone, como deja entrever esta nueva resolución, el aporte del privado resulta todavía menos claro. Máxime cuando el Estado mismo ya se está haciendo cargo de las inversiones para la modernización de ambas líneas, como la instalación del sistema de frenado automático o la renovación de las estaciones del Belgrano Norte. (Enelsubte).
No hay comentarios.:
Publicar un comentario