BUENOS AIRES, Setiembre 04, (PUNTO CERO-Empresas News) La Cámara Argentina de Semilleros denunció que la entidad fue "impedida" de inscribirse en el Primer Congreso Interamericano de Semillas, y sostuvo que ese encuentro "no será otra cosa que una asamblea de poderosas empresas multinacionales que pretenden colonizar la producción agraria argentina" y alertó que los productores vinculados a la entidad quedaron afuera del Congreso porque "los organizadores del evento han decidido no entregar entradas por falta de vacantes".
La Cámara Argentina de Semilleros (CAS) es capitaneada por Atar, la semillera del grupo Atanor, que el año pasado mantuvo un fuerte enfrentamiento con la suiza Syngenta por los derechos sobre una variedad de maíz transgénico RR. “No necesitamos que la tecnología nos llegue del exterior, porque en el INTA y el Conicet tenemos excelentes investigadores", apuntó en esa ocasión el titular de Atanor, Miguel González. Al respecto, la justicia rechazó en dos ocasiones los recursos de amparo presentados por Syngenta porque la ley argentina indica que no se pueden patentar organismos vivos.
“La ley argentina de semillas consagra el derecho de uso propio, esto es la posibilidad de guardar una parte de lo cosechado para la siembra del año siguiente. Las grandes corporaciones como Monsanto o Syngenta intentan quebrar esta ley para cobrar a los productores, aprovechando la desactivación del Instituto Nacional de Semillas (Inase), que el Estado aún no ha normalizado”, indicaron los productores.
La Cámara Argentina de Semilleros (CAS) es capitaneada por Atar, la semillera del grupo Atanor, que el año pasado mantuvo un fuerte enfrentamiento con la suiza Syngenta por los derechos sobre una variedad de maíz transgénico RR. “No necesitamos que la tecnología nos llegue del exterior, porque en el INTA y el Conicet tenemos excelentes investigadores", apuntó en esa ocasión el titular de Atanor, Miguel González. Al respecto, la justicia rechazó en dos ocasiones los recursos de amparo presentados por Syngenta porque la ley argentina indica que no se pueden patentar organismos vivos.
“La ley argentina de semillas consagra el derecho de uso propio, esto es la posibilidad de guardar una parte de lo cosechado para la siembra del año siguiente. Las grandes corporaciones como Monsanto o Syngenta intentan quebrar esta ley para cobrar a los productores, aprovechando la desactivación del Instituto Nacional de Semillas (Inase), que el Estado aún no ha normalizado”, indicaron los productores.
En la Argentina hay cerca de 3.000 semilleros y multiplicadores que, nucleados en la CAS, se han venido mostrando muy críticos con las demandas de las firmas multinacionales que operan en el sector, en casos concretos como el del maíz de Syngenta y los juicios que inició la estadounidense Monsanto para cobrar regalías por la soja RR. (PUNTO CERO-Empresas News).
No hay comentarios.:
Publicar un comentario