Este hecho se registró en José C. Paz. Cuatro malvivientes que se trasladaban en motocicletas intentaron robarle una moto a un hombre que llegaba a su casa. En esos momentos, el padre de su pareja intercedió y recibió un disparo mortal.
Cuatro motochorros asesinaron a balazos a un hombre de 50 años, a quien agredieron mientras intentó defender a su yerno, quien era asaltado por los forajidos, en un suceso que se registró en José C. Paz.
En el mismo ilícito, los delincuentes hirieron a disparos a un vecino de la víctima fatal. Pesquisas policiales lograron detener luego a uno de los criminales y a un cómplice de la gavilla.
Los voceros de los tribunales de San Martín revelaron que la infortunada víctima que pereció en el ilícito fue identificada como Hugo Dante Gorosito, de 50 años, mientras que el herido resultó ser Antonio Martín Silva, de 24.
El hecho se produjo cuando Andrés Sánchez, de 22 años y yerno de Gorosito, arribó en una motocicleta a su finca, situada en José Bustamante al 2000, casi en el cruce con Juan Cruz Varela, en el denominado Barrio Frino, oportunidad en la que fue interceptado por cuatro individuos, quienes se desplazaban en dos motocicletas.
Gorosito observó la maniobra y salió del inmueble para ayudar a su familiar.
Trascendió que el suegro del muchacho empujó a uno de los ladrones y otro de los delincuentes le disparó dos tiros al hombre, quien padeció heridas en la axila izquierda, en el brazo del mismo lado y en el sector derecho de la cadera.
Silva también quiso auxiliar a sus vecinos, pero fue baleado en la región intercostal izquierda. Gorosito dejó de existir mientras era trasladado al Hospital Domingo Mercante, en el citado distrito.
Varios procedimientos
Autoridades de la comisaría del Barrio Frino (2ª de José C. Paz) apresaron a uno de los asesinos, llamado Gonzalo Damián, de 32 años, y a un joven de 24, que es dueño de una motocicleta Zanella modelo VC 250, utilizada por la gavilla, mientras que incautaron un revólver Doberman 22 largo con la numeración limada, que los criminales habían arrojado en un terreno baldío en Naciones Unidas al 2800.
El arma tenía seis cartuchos intactos y dos vainas servidas en el tambor. (Crónica).
No hay comentarios.:
Publicar un comentario