Autoridades de la institución que buscan reducir la indemnización de los trabajadores el 50 por ciento se ausentaron de la audiencia convocada por el Ministerio de Trabajo, y el pago sigue sin resolverse.
El colegio Magno de Pilar trascurrió este año en el centro de la escena pública, luego de que la institución decidió comunicarles a las familias de ocho alumnos que no le renovaría la matrícula para el próximo ciclo lectivo a raíz de que esos chicos con discapacidad o algún tipo de problema de aprendizaje, “provocaban un atraso en sus compañeros” y “bajaban la vara”.
Este hecho provocó indignación en la comunidad educativa y en toda la sociedad, llegando a la intervención de diferentes organismos como el INADI o la Defensoría del Pueblo, además del Estado a través de la Dirección General de Cultura y Educación de la Provincia de Buenos Aires.
Luego de la polémica y sin ánimos de dar marcha atrás, los dueños del Magno sorprendieron con la determinación de cerrar las puertas a partir del año que viene.
Esto llevó a complicaciones para las 500 familias que concurrían a la institución y también para el personal docente, que además de quedarse sin trabajo se encontraron con promesas incumplidas.
Es que el colegio aseguró que abonaría una indemnización al 100 por ciento, acompañado también del salario de diciembre y vacaciones. Sin embargo, luego se presentó ante el Ministerio de Trabajo un procedimiento preventivo de crisis, el cual implica reducir al 50 por ciento las indemnizaciones.
Respecto del avance de ese proceso, el dirigente del Sindicato de Docentes Privados (SADOP), Mariano Molina, indicó que las autoridades del instituto no se presentaron a una audiencia que había convocado el ministerio para la última semana.
“Los docentes no han cobrado nada. El colegio presentó el procedimiento preventivo de crisis que refiere a pagar al 50 por ciento las indemnizaciones, y nosotros nos oponemos a eso porque el cierre de la institución no corresponde a una crisis financiera sino a un capricho. Así lo definimos por las razones que son de público conocimiento”, señaló Molina.
Y agregó: “A instancias de eso nos reunimos con el Ministerio de Trabajo para poder ampliar la mesa de diálogo y se fijó una audiencia, pero el Colegio Magno no se presentó, por lo que parece que no quieren dialogar ni darle una pronta solución al tema. Ellos apuestan a que el ministerio termine homologando el procedimiento preventivo”.
Asimismo, sostuvo: “El colegio guarda hermetismo con respecto de cómo van a ser los pagos. No hubo cobros, tampoco nos llegó nada de lo que presentó el colegio porque lo hizo mal y hubo que intimarlo para que presente todo lo debido, por lo que eso se terminará resolviendo el año que viene en el ministerio. No hay voluntad de poder solucionar rápido la situación de los docentes, trabajadores y trabajadoras que terminan el año y pasan las fiestas sin saber cuándo ni cuánto van a cobrar”.
Finalmente, lanzó: “Ellos pretenden pagar el 50 por ciento, nosotros pedimos el 100, pero esperamos que por lo menos paguen esa mitad que ellos mismos proponen y el resto en tal caso quedará en discusión. Vinieron una sola vez al ministerio y fue para presentar el procedimiento preventivo, tampoco quisieron acordar respecto de cómo iban a ser los pagos. En los hechos, significa que los propios docentes están financiando al colegio el cierre y el despido de ellos mismos”. (Diario Resumen).
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