LUJAN, Enero 02, (PUNTO CERO-El Civismo) Siguen apareciendo sorpresas en el marco del traspaso. Primero fue la documentación que respalda una deuda millonaria. Le siguieron más de 60 juicios pendientes. Ahora “desapareció” el libro de inventario y no se sabe qué falta en cada oficina municipal.
Prácticamente en silencio o con información que se filtra en cuentagotas -algo que se comienza a perfilar como una manera de trasmitir sus actos en este gobierno- la intendenta Graciela Rosso resolvió denunciar a la administración saliente porque no aparece el libro de inventario de la Municipalidad de Luján.
Según fuentes oficiales -extremadamente cautelosas para ofrecer datos sobre lo sucedido- fue un apoderado del municipio el que radicó la denuncia en la Comisaría Luján Primera “por instrucciones estrictas del Departamento Ejecutivo”. No especificó la fecha, pero se presume que fue la semana pasada.
La presentación recayó en la UFI N° 14 de Luján, dependiente de los Tribunales de Mercedes. “La decisión se basa en problemas con el traspaso. Cuando se realizó ese trámite se recibió gran cantidad de documentación, pero no estaba el libro de inventario”, indicó a este medio una fuente cercana a la Intendencia.
“Se realizó una búsqueda, pero se agotaron los sitios en los que podía estar y se resolvió denunciar el hecho”, dijo ese colaborador en la nueva gestión.
Antes de ello, funcionarios del nuevo Ejecutivo se comunicaron con las autoridades del Tribunal de Cuentas de la Provincia de Buenos Aires y les detallaron lo que ocurría en esta comuna. Lo hicieron por tratarse de un libro de ley rubricado.
En el gobierno entrante crecen las especulaciones acerca de posibles faltantes materiales en las oficinas municipales, aunque nadie se animó a dar precisiones.
Formalmente, se explicó a EL CIVISMO que “para el recuento físico de las cosas de la Municipalidad hay tiempo hasta el 31 de marzo” aunque “sin el libro de inventario será muy complicado saber qué había y qué falta”.
Desde la Secretaría Legal y Técnica prometieron “seguir de cerca la evolución de la denuncia” y “para recomponer el inventario es probable que se apele a inventarios parciales y también a planillas de altas y bajas de bienes”.
Con breves párrafos, días atrás el diario La Nación se ocupó del tema, pero enmarcado en conflictos dentro de varios municipios. La nota hablaba de intendentes del conurbano que acusaron a sus antecesores de “vaciamiento y descontrol”.
En esa crónica, Rosso recordó detalles de la millonaria deuda municipal, se refirió a los presuntos faltantes y expresó: “Las deudas sí están contabilizadas. Le tengo que pagar a la Camerata Bariloche 40.000 pesos por el recital que dio en el cierre de campaña del ex intendente (el justicialista Miguel Ángel Prince)".
Siguen las explicaciones por el cierre de enero
“Un tiempo de reordenamiento”
Alcides Pedurán, secretario de Legal y Técnica, dijo que el hecho de decretar la feria administrativa en enero para toda la administración municipal “tiene el propósito de generar un tiempo de reordenamiento de toda la actividad de la administración, rever algunos temas que son necesarios esclarecer antes de definirlos y esto va a permitir, no una suspensión total de la actividad, sino un descenso del nivel y del volumen”.
“De ese modo -explicó a Prensa Municipal- nos permitirá, con menos movimiento rutinario de papeles y de expedientes, tener ese espacio o ese tiempo suficiente para reordenar la actividad general de la administración”.
En relación con los servicios que prestará la Municipalidad, Pedurán aclaró que se “atenderán servicios esenciales, van a estar todos garantizados y en las áreas administrativas va a haber guardia en todas las dependencias de modo tal que se pueda atender cualquier situación que pase lo rutinario y que no pueda ser demorado o suspendido”.
Pedurán argumentó que “se decreta una medida similar a la que toman otros organismos, clásicamente el Poder Judicial, el Instituto de Previsión Social de la provincia, el Tribunal de Cuentas y el Poder Judicial de Nación
Prácticamente en silencio o con información que se filtra en cuentagotas -algo que se comienza a perfilar como una manera de trasmitir sus actos en este gobierno- la intendenta Graciela Rosso resolvió denunciar a la administración saliente porque no aparece el libro de inventario de la Municipalidad de Luján.
Según fuentes oficiales -extremadamente cautelosas para ofrecer datos sobre lo sucedido- fue un apoderado del municipio el que radicó la denuncia en la Comisaría Luján Primera “por instrucciones estrictas del Departamento Ejecutivo”. No especificó la fecha, pero se presume que fue la semana pasada.
La presentación recayó en la UFI N° 14 de Luján, dependiente de los Tribunales de Mercedes. “La decisión se basa en problemas con el traspaso. Cuando se realizó ese trámite se recibió gran cantidad de documentación, pero no estaba el libro de inventario”, indicó a este medio una fuente cercana a la Intendencia.
“Se realizó una búsqueda, pero se agotaron los sitios en los que podía estar y se resolvió denunciar el hecho”, dijo ese colaborador en la nueva gestión.
Antes de ello, funcionarios del nuevo Ejecutivo se comunicaron con las autoridades del Tribunal de Cuentas de la Provincia de Buenos Aires y les detallaron lo que ocurría en esta comuna. Lo hicieron por tratarse de un libro de ley rubricado.
En el gobierno entrante crecen las especulaciones acerca de posibles faltantes materiales en las oficinas municipales, aunque nadie se animó a dar precisiones.
Formalmente, se explicó a EL CIVISMO que “para el recuento físico de las cosas de la Municipalidad hay tiempo hasta el 31 de marzo” aunque “sin el libro de inventario será muy complicado saber qué había y qué falta”.
Desde la Secretaría Legal y Técnica prometieron “seguir de cerca la evolución de la denuncia” y “para recomponer el inventario es probable que se apele a inventarios parciales y también a planillas de altas y bajas de bienes”.
Con breves párrafos, días atrás el diario La Nación se ocupó del tema, pero enmarcado en conflictos dentro de varios municipios. La nota hablaba de intendentes del conurbano que acusaron a sus antecesores de “vaciamiento y descontrol”.
En esa crónica, Rosso recordó detalles de la millonaria deuda municipal, se refirió a los presuntos faltantes y expresó: “Las deudas sí están contabilizadas. Le tengo que pagar a la Camerata Bariloche 40.000 pesos por el recital que dio en el cierre de campaña del ex intendente (el justicialista Miguel Ángel Prince)".
Siguen las explicaciones por el cierre de enero
“Un tiempo de reordenamiento”
Alcides Pedurán, secretario de Legal y Técnica, dijo que el hecho de decretar la feria administrativa en enero para toda la administración municipal “tiene el propósito de generar un tiempo de reordenamiento de toda la actividad de la administración, rever algunos temas que son necesarios esclarecer antes de definirlos y esto va a permitir, no una suspensión total de la actividad, sino un descenso del nivel y del volumen”.
“De ese modo -explicó a Prensa Municipal- nos permitirá, con menos movimiento rutinario de papeles y de expedientes, tener ese espacio o ese tiempo suficiente para reordenar la actividad general de la administración”.
En relación con los servicios que prestará la Municipalidad, Pedurán aclaró que se “atenderán servicios esenciales, van a estar todos garantizados y en las áreas administrativas va a haber guardia en todas las dependencias de modo tal que se pueda atender cualquier situación que pase lo rutinario y que no pueda ser demorado o suspendido”.
Pedurán argumentó que “se decreta una medida similar a la que toman otros organismos, clásicamente el Poder Judicial, el Instituto de Previsión Social de la provincia, el Tribunal de Cuentas y el Poder Judicial de Nación
Es una suspensión de la actividad administrativa rutinaria, no así los casos urgentes, importantes, que no pueden ser demorados”, reiteró. (PUNTO CERO-El Civismo).
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