¿Cómo y cuándo contar a los chicos la realidad sobre Papá Noel? Consejos para decirles la verdad sin lastimarlos.
La tradición de contarles a los chicos que un señor barbudo que viaja en trineo es el que reparte los regalos de Navidad se ve, en algún momento, cuestionada por los mismos interesados. “Y los padres, que incentivaron esa creencia y la disfrutaron junto a sus hijos, se preguntan hasta cuándo deben sostenerla y si no será hora de ir abriéndoles los ojos. Por supuesto, esto también genera temor”, dice la psicóloga María Paula Gerardi. Explica que hasta alrededor de los 5 años los chicos todavía no distinguen entre fantasía y realidad, y esto es muy sano, ya que la imaginación es muy importante en el desarrollo del psiquismo infantil.
Pero cuando comienzan la edad escolar, a los 6 años, los chicos pueden comenzar a preguntarse si Papá Noel existe de verdad. “Tal vez una buena edad para sincerarnos al respecto con nuestros hijos sea alrededor de sus 7 u 8 años: a esa edad los chicos comienzan a desarrollar un tipo de pensamiento más abstracto y están mejor preparados para comprender la verdad”, dice la licenciada Gerardi.
“Una vez que la familia decide darle a Papá Noel su verdadero lugar -el de un mito, una tradición o un juego-, lo mejor es dar una explicación acorde a la edad, clara y sencilla. No hay una receta sobre cuál es la forma correcta de decirles la verdad. El modo en que esto se transmita va a depender del estilo y las creencias culturales y religiosas de cada familia en particular”, aconseja, y aclara que muchas veces a los padres lo que más les preocupa es cómo van a reaccionar los chicos a esta realidad, temiendo en algunos casos que se enojen con sus papás por haberles mentido tanto tiempo, siendo en general esta una regla que se impone en todas las crianzas: “no mentir”.
La psicóloga, en estos casos, aconseja acompañarlos y darles tiempo para procesar la nueva información. “Hay algunas posturas que plantean que no es correcto decirles a los chicos que Papá Noel trae los regalos ya que no están de acuerdo con mentir a los niños y plantean que esto puede tener consecuencias como la pérdida de confianza en los padres. Hasta ahora no hay ninguna investigación seria que avale esto y que demuestre que pueda ser perjudicial para los chicos. Los niños poco a poco se irán dando cuenta de que muchos de los personajes imaginarios en los que creían no existen. Y no se ha demostrado que esto tenga ninguna consecuencia traumática en el psiquismo de los chicos”. (Infancia Hoy).
La tradición de contarles a los chicos que un señor barbudo que viaja en trineo es el que reparte los regalos de Navidad se ve, en algún momento, cuestionada por los mismos interesados. “Y los padres, que incentivaron esa creencia y la disfrutaron junto a sus hijos, se preguntan hasta cuándo deben sostenerla y si no será hora de ir abriéndoles los ojos. Por supuesto, esto también genera temor”, dice la psicóloga María Paula Gerardi. Explica que hasta alrededor de los 5 años los chicos todavía no distinguen entre fantasía y realidad, y esto es muy sano, ya que la imaginación es muy importante en el desarrollo del psiquismo infantil.
Pero cuando comienzan la edad escolar, a los 6 años, los chicos pueden comenzar a preguntarse si Papá Noel existe de verdad. “Tal vez una buena edad para sincerarnos al respecto con nuestros hijos sea alrededor de sus 7 u 8 años: a esa edad los chicos comienzan a desarrollar un tipo de pensamiento más abstracto y están mejor preparados para comprender la verdad”, dice la licenciada Gerardi.
“Una vez que la familia decide darle a Papá Noel su verdadero lugar -el de un mito, una tradición o un juego-, lo mejor es dar una explicación acorde a la edad, clara y sencilla. No hay una receta sobre cuál es la forma correcta de decirles la verdad. El modo en que esto se transmita va a depender del estilo y las creencias culturales y religiosas de cada familia en particular”, aconseja, y aclara que muchas veces a los padres lo que más les preocupa es cómo van a reaccionar los chicos a esta realidad, temiendo en algunos casos que se enojen con sus papás por haberles mentido tanto tiempo, siendo en general esta una regla que se impone en todas las crianzas: “no mentir”.
La psicóloga, en estos casos, aconseja acompañarlos y darles tiempo para procesar la nueva información. “Hay algunas posturas que plantean que no es correcto decirles a los chicos que Papá Noel trae los regalos ya que no están de acuerdo con mentir a los niños y plantean que esto puede tener consecuencias como la pérdida de confianza en los padres. Hasta ahora no hay ninguna investigación seria que avale esto y que demuestre que pueda ser perjudicial para los chicos. Los niños poco a poco se irán dando cuenta de que muchos de los personajes imaginarios en los que creían no existen. Y no se ha demostrado que esto tenga ninguna consecuencia traumática en el psiquismo de los chicos”. (Infancia Hoy).
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