Otra vez la plaza 1ª Junta se vistió de alegría, baile y emoción el sábado por la noche, esta vez de la mano de Peteco Carabajal y su excelente banda.
Como sucedió con cada uno de los espectáculos enmarcados en la programación de “Villa Gesell Cultural” que organiza la Municipalidad a través de su Secretaría de Turismo, la céntrica plaza volvió a colmarse de espectadores conformados por jóvenes y familias que vibraron, bailaron y se emocionaron con el extenso show ofrecido por el talentoso músico santiagueño.
Peteco deslumbró a la multitud, presentando composiciones de su nuevo material discográfico denominado “El Viajero” e interpretando sus clásicos más reconocidos.
Peteco Carabajal en voz, guitarra, violín, charango, sikus y quena fue creando distintos climas que incluyeron reflexión, emotividad y, por supuesto, la espontánea y festiva participación de la gente que al frente del escenario disfrutó bailando sus particulares chacareras.
Un momento especial del espectáculo estuvo dado por la inclusión, a modo de artista invitado, del violinista chino Chao Xu, quien ejecuta un instrumento denominado erhu, un atípico violín chino de dos cuerdas tocadas con un arco, ofreciendo la chacarera “El coyuyo de Shanghai”.
El maravilloso tema “Las manos de mi madre” marcó uno de los momentos de mayor emotividad, reconocido con una sostenida ovación.
Dos horas de show demostraron la reciprocidad entre el pedido del público y la satisfacción del artista en regalar su talento provisto de alta sensibilidad compositiva y sincera humildad. (SiGesell).
Como sucedió con cada uno de los espectáculos enmarcados en la programación de “Villa Gesell Cultural” que organiza la Municipalidad a través de su Secretaría de Turismo, la céntrica plaza volvió a colmarse de espectadores conformados por jóvenes y familias que vibraron, bailaron y se emocionaron con el extenso show ofrecido por el talentoso músico santiagueño.
Peteco deslumbró a la multitud, presentando composiciones de su nuevo material discográfico denominado “El Viajero” e interpretando sus clásicos más reconocidos.
Peteco Carabajal en voz, guitarra, violín, charango, sikus y quena fue creando distintos climas que incluyeron reflexión, emotividad y, por supuesto, la espontánea y festiva participación de la gente que al frente del escenario disfrutó bailando sus particulares chacareras.
Un momento especial del espectáculo estuvo dado por la inclusión, a modo de artista invitado, del violinista chino Chao Xu, quien ejecuta un instrumento denominado erhu, un atípico violín chino de dos cuerdas tocadas con un arco, ofreciendo la chacarera “El coyuyo de Shanghai”.
El maravilloso tema “Las manos de mi madre” marcó uno de los momentos de mayor emotividad, reconocido con una sostenida ovación.
Dos horas de show demostraron la reciprocidad entre el pedido del público y la satisfacción del artista en regalar su talento provisto de alta sensibilidad compositiva y sincera humildad. (SiGesell).
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