Durante su primera gestión, el jefe de gobierno amagó con presentar un proyecto para una nueva concesión del deteriorado Zoo, tras encontrar graves irregularidades de gestiones anteriores. Pero finalmente prorrogó la licencia del grupo mexicano CIE. La fecha de presentación del nuevo pliego es una incógnita.
Cuando en 2008 se detectaron una serie de graves irregularidades en zoológico de Buenos Aires, el gobierno de Mauricio Macri comenzó a plantear la necesidad de lanzar una nueva licitación que dejara en el olvido a la empresa concesionaria.
Desde 1997 a la actualidad, la concesión del zoo está en manos del grupo mexicano CIE. En febrero de 2011 se venció la concesión, pero la firma siguió operando por una polémica prórroga otorgada por el gobierno porteño hasta julio de ese año, que curiosamente fue validada por un decreto firmado por Macri recién en el último diciembre.
El lanzamiento de una nueva licitación fue un intento frustrado del Ejecutivo, que envió un proyecto a la Legislatura en 2010 que fue rechazado por el propio bloque del PRO. En ese entonces, el titular de la comisión de Protección del Espacio Público, Oscar Zago, advirtió que el cuerpo no trataría un proyecto sin que fuera explicado por los funcionarios.
Es por eso que el por entonces director de Concesiones del ministerio de Desarrollo Económico, Ezequiel Sabor –hoy subrsecretario de Trabajo de la misma cartera–, visitó el Palacio Legislativo para presentar el expediente. Pero como la licitación que se estipulaba era de 5 años, el proyecto no necesitaba pasar por el parlamento porteño, que trata las licitaciones que superan los 5 años de duración.
Desde entonces, no hubo noticias del nuevo llamado a licitación y el tema se diluyó con la prórroga otorgada por Macri.
Desde el Ejecutivo señalaron a La Política OnLine que el tema no está olvidado y que el pliego de licitación se está trabajando en la dirección de Concesiones, encargada del Zoo, que ahora encabeza Silvia Imas.
En el PRO reconocen que están ante una encrucijada, puesto que si presentan un proyecto que contemple una licitación de más de 5 años de duración, la norma deberá pasar por la Legislatura y se demorará no menos de un año. Por el contrario, si presentan un proyecto que establezca una concesión de menos de 5 años, habrá muchas complicaciones para conseguir oferentes, reticentes a realizar una fuerte inversión que difícilmente recuperen en menos de un lustro.
Cumpleaños
A un año del vencimiento de la concesión, el legislador de Proyecto Sur Adrián Camps organizó para mañana un “Recordatorio del Cumpleaños del Vencimiento de la Concesión".
Se trata de un evento simbólico que se realizará en la puerta del Zoo a las 12.30 –incluso habrá torta, velitas y caramelos– para reclamarle a Macri que “asuma la gestión del zoológico”.
“Además, es necesario abrir un amplio debate con la participación de diputados, la Junta Comunal y el Consejo consultivo de la Comuna 14, la Universidad, las ONG’s vinculadas a la defensa del medio ambiente y el conjunto de la ciudadanía, que nos permita encontrar la mejor solución acerca del futuro de nuestro zoológico”, indicó Camps.
Malas condiciones
Además del marco irregular de la demora en la nueva licitación, la realidad marca que como el grupo CIE está en retirada del país, dejó de invertir. Esto puede verse reflejado en las instalaciones del zoo, en las que se encuentran tanto edificios históricos en mal estado como a los animales –en especial los mandriles y el oso polar– en malas condiciones.
Los informes de 2008 y 2009 de la Auditoría porteña detectaron que la Ciudad directamente carece de legislación en materia zoológica y de fauna urbana.
Camps agregó que la Auditoría reveló que los veinte años de gestión privada han sido desastrosos para el zoológico: “se perdieron gran parte de las especies y los edificios se encuentran en estado ruinoso”, explicó.
El legislador señaló además que en 2008, la Dirección General de Concesiones conformó una comisión multidisciplinaria para estudiar las bases y condiciones para el llamado a una nueva licitación.
“Cuatro años después no se sabe si alguna vez la comisión se reunió y, en dicho caso, cuales son las conclusiones a las que arribó”, afirmó Camps, que dijo a La Política OnLine que la Auditoría calificó como “inexistente” a esa comisión.
Cuando en 2008 se detectaron una serie de graves irregularidades en zoológico de Buenos Aires, el gobierno de Mauricio Macri comenzó a plantear la necesidad de lanzar una nueva licitación que dejara en el olvido a la empresa concesionaria.
Desde 1997 a la actualidad, la concesión del zoo está en manos del grupo mexicano CIE. En febrero de 2011 se venció la concesión, pero la firma siguió operando por una polémica prórroga otorgada por el gobierno porteño hasta julio de ese año, que curiosamente fue validada por un decreto firmado por Macri recién en el último diciembre.
El lanzamiento de una nueva licitación fue un intento frustrado del Ejecutivo, que envió un proyecto a la Legislatura en 2010 que fue rechazado por el propio bloque del PRO. En ese entonces, el titular de la comisión de Protección del Espacio Público, Oscar Zago, advirtió que el cuerpo no trataría un proyecto sin que fuera explicado por los funcionarios.
Es por eso que el por entonces director de Concesiones del ministerio de Desarrollo Económico, Ezequiel Sabor –hoy subrsecretario de Trabajo de la misma cartera–, visitó el Palacio Legislativo para presentar el expediente. Pero como la licitación que se estipulaba era de 5 años, el proyecto no necesitaba pasar por el parlamento porteño, que trata las licitaciones que superan los 5 años de duración.
Desde entonces, no hubo noticias del nuevo llamado a licitación y el tema se diluyó con la prórroga otorgada por Macri.
Desde el Ejecutivo señalaron a La Política OnLine que el tema no está olvidado y que el pliego de licitación se está trabajando en la dirección de Concesiones, encargada del Zoo, que ahora encabeza Silvia Imas.
En el PRO reconocen que están ante una encrucijada, puesto que si presentan un proyecto que contemple una licitación de más de 5 años de duración, la norma deberá pasar por la Legislatura y se demorará no menos de un año. Por el contrario, si presentan un proyecto que establezca una concesión de menos de 5 años, habrá muchas complicaciones para conseguir oferentes, reticentes a realizar una fuerte inversión que difícilmente recuperen en menos de un lustro.
Cumpleaños
A un año del vencimiento de la concesión, el legislador de Proyecto Sur Adrián Camps organizó para mañana un “Recordatorio del Cumpleaños del Vencimiento de la Concesión".
Se trata de un evento simbólico que se realizará en la puerta del Zoo a las 12.30 –incluso habrá torta, velitas y caramelos– para reclamarle a Macri que “asuma la gestión del zoológico”.
“Además, es necesario abrir un amplio debate con la participación de diputados, la Junta Comunal y el Consejo consultivo de la Comuna 14, la Universidad, las ONG’s vinculadas a la defensa del medio ambiente y el conjunto de la ciudadanía, que nos permita encontrar la mejor solución acerca del futuro de nuestro zoológico”, indicó Camps.
Malas condiciones
Además del marco irregular de la demora en la nueva licitación, la realidad marca que como el grupo CIE está en retirada del país, dejó de invertir. Esto puede verse reflejado en las instalaciones del zoo, en las que se encuentran tanto edificios históricos en mal estado como a los animales –en especial los mandriles y el oso polar– en malas condiciones.
Los informes de 2008 y 2009 de la Auditoría porteña detectaron que la Ciudad directamente carece de legislación en materia zoológica y de fauna urbana.
Camps agregó que la Auditoría reveló que los veinte años de gestión privada han sido desastrosos para el zoológico: “se perdieron gran parte de las especies y los edificios se encuentran en estado ruinoso”, explicó.
El legislador señaló además que en 2008, la Dirección General de Concesiones conformó una comisión multidisciplinaria para estudiar las bases y condiciones para el llamado a una nueva licitación.
“Cuatro años después no se sabe si alguna vez la comisión se reunió y, en dicho caso, cuales son las conclusiones a las que arribó”, afirmó Camps, que dijo a La Política OnLine que la Auditoría calificó como “inexistente” a esa comisión.
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