El proyecto para construir un barrio de lujo en Costanera Sur quedó cajoneado y no se trataría en todo el año. Los millones que ofrece la empresa en concepto de "compensación" apenas superan el 10 por ciento de lo que quiere el PRO.
El 7 diciembre de 2011, tres días antes del último recambio legislativo, el PRO quedó a un voto de enviar al recinto de la Legislatura porteña el proyecto para construir un barrio de lujo en Costanera Sur, en la ex Ciudad Deportiva de Boca Juniors.
La iniciativa, considerada de máxima importancia para Mauricio Macri, contemplaba la aprobación de un convenio con la empresa Irsa de Eduardo Elsztain para una inversión multimillonaria en las 72 hectáres que componen al predio.
Pero el rechazo de los dos legisladores radicales, que el PRO contaba como votos positivos, hizo caer el proyecto que llevaba por entonces el legislador Bruno Screnci y que ya tenía dictamen de tres comisiones.
El macrismo intentó reflotar la iniciativa cuando se abrió el período de sesiones ordinarias de este año. Y orden del jefe de gobierno, quien se puso enfrente del proyecto fue la propia vicejefa María Eugenia Vidal.
En abril, el macrismo acercó posiciones entre la oposición y la empresa, que accedió a modificar algunos de los puntos conflictivos del proyecto. Luego de una reunión de la Comisión de Planeamiento, se decidió redactar un nuevo convenio que contuviera algunos de los pedidos de la oposición.
Sin embargo, el proyecto no tardó en perderse nuevamente en las tinieblas y ahora desde el bloque macrista confiesan que es prácticamente imposible que vuelva a tener tratamiento parlamentario en lo que queda del año. No faltan los legisladores que advierten que tal como está planteado, el proyecto nunca saldrá aprobado.
Diferencias multimillonarias
Además de la falta de consenso con el resto de los bloques, el proyecto tiene su mayor obstáculo en el seno del propio macrismo.
Como dijeron a LPO fuentes que vienen participando de las negociaciones desde hace meses, la traba principal es la falta de acuerdo entre el Ejecutivo y la empresa por el monto de la inversión en concepto de "compensación" de la firma a la Ciudad.
Desde la Legislatura advirtieron a La Política Online que mientras "no haya una ley para compensar a la ciudad, como sucede en otros lados del mundo, el proyecto seguirá muerto".
Lo que el PRO le pide a la empresa es que destine una suma para retribuirle a la Ciudad las ganancias multimillonarias que obtendrá con la construcción de este barrio al estilo de Puerto Madero.
El macrismo quiere que la firma garantice una suma fija para invertir en el desarrollo del sector público en el mismo barrio. Ya sea mediante la construcción de escuelas y hospitales, como la urbanización de villas como la Rodrigo Bueno, lindante con el predio de la ex Ciudad Deportiva de Boca.
Pero la firma de Elsztain se niega a que esa suma supere los 16 millones de dólares. Y en el PRO piden entre 100 y 120 millones de dólares, por lo que el acuerdo entre las partes ingresó al terreno de lo utópico.
Por otra parte, con el mercado inmobiliario desacelerado, la empresa también le puso un freno a sus aspiraciones. (La Política OnLine).
El 7 diciembre de 2011, tres días antes del último recambio legislativo, el PRO quedó a un voto de enviar al recinto de la Legislatura porteña el proyecto para construir un barrio de lujo en Costanera Sur, en la ex Ciudad Deportiva de Boca Juniors.
La iniciativa, considerada de máxima importancia para Mauricio Macri, contemplaba la aprobación de un convenio con la empresa Irsa de Eduardo Elsztain para una inversión multimillonaria en las 72 hectáres que componen al predio.
Pero el rechazo de los dos legisladores radicales, que el PRO contaba como votos positivos, hizo caer el proyecto que llevaba por entonces el legislador Bruno Screnci y que ya tenía dictamen de tres comisiones.
El macrismo intentó reflotar la iniciativa cuando se abrió el período de sesiones ordinarias de este año. Y orden del jefe de gobierno, quien se puso enfrente del proyecto fue la propia vicejefa María Eugenia Vidal.
En abril, el macrismo acercó posiciones entre la oposición y la empresa, que accedió a modificar algunos de los puntos conflictivos del proyecto. Luego de una reunión de la Comisión de Planeamiento, se decidió redactar un nuevo convenio que contuviera algunos de los pedidos de la oposición.
Sin embargo, el proyecto no tardó en perderse nuevamente en las tinieblas y ahora desde el bloque macrista confiesan que es prácticamente imposible que vuelva a tener tratamiento parlamentario en lo que queda del año. No faltan los legisladores que advierten que tal como está planteado, el proyecto nunca saldrá aprobado.
Diferencias multimillonarias
Además de la falta de consenso con el resto de los bloques, el proyecto tiene su mayor obstáculo en el seno del propio macrismo.
Como dijeron a LPO fuentes que vienen participando de las negociaciones desde hace meses, la traba principal es la falta de acuerdo entre el Ejecutivo y la empresa por el monto de la inversión en concepto de "compensación" de la firma a la Ciudad.
Desde la Legislatura advirtieron a La Política Online que mientras "no haya una ley para compensar a la ciudad, como sucede en otros lados del mundo, el proyecto seguirá muerto".
Lo que el PRO le pide a la empresa es que destine una suma para retribuirle a la Ciudad las ganancias multimillonarias que obtendrá con la construcción de este barrio al estilo de Puerto Madero.
El macrismo quiere que la firma garantice una suma fija para invertir en el desarrollo del sector público en el mismo barrio. Ya sea mediante la construcción de escuelas y hospitales, como la urbanización de villas como la Rodrigo Bueno, lindante con el predio de la ex Ciudad Deportiva de Boca.
Pero la firma de Elsztain se niega a que esa suma supere los 16 millones de dólares. Y en el PRO piden entre 100 y 120 millones de dólares, por lo que el acuerdo entre las partes ingresó al terreno de lo utópico.
Por otra parte, con el mercado inmobiliario desacelerado, la empresa también le puso un freno a sus aspiraciones. (La Política OnLine).
No hay comentarios.:
Publicar un comentario