(Asteriscos Tv). La eyaculación precoz es uno de los grandes "cucos" de la sexualidad masculina. Durar la mayor cantidad de tiempo antes de eyacular es muchas veces una obsesión para los hombres, pero ¿cuándo se considera que se está ante la eyaculación precoz?.
Estudios certifican que el período eyaculatorio normal ocurre entre los 5 y 7 minutos y que menos de un minuto es considerado patológico como para tratar el problema. Se estima que entre el 20 por ciento y 40 por ciento de ellos pueden presentar eyaculación precoz en alguna etapa de su vida y que actualmente un 30 por ciento la padece.
Las autoridades sanitarias reguladoras de Argentina, acaban de aprobar la comercialización de una nueva y única droga llamada Dapoxetina, para el tratamiento “efectivo” de la Eyaculación Precoz. Es el primer fármaco aprobado para ésta indicación.
Se define a la eyaculación precoz (EP) como la imposibilidad y/o dificultad en el control de la eyaculación, la que puede ocurrir antes de la penetración vaginal o en forma inmediata a la misma.
Entre los factores involucrados en la EP, se postula que los niveles alterados de serotonina o una alteración en la sensibilidad de sus receptores, en los centros moduladores de la eyaculación en el sistema nervioso central, son la base fisiopatológica de los trastornos eyaculatorios con repercusiones negativas en el hombre y su pareja, en asociación con una menor autoestima, ansiedad y sentimientos de inferioridad. Sin embargo, muy pocos hombres buscan un tratamiento debido a la dificultad del paciente para expresar su problemática.
Afortunadamente ya se inició en Argentina la comercialización de Dapoxetina, indicada para prolongar el tiempo de latencia de eyaculación intravaginal (IELT). Se trata de un inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina (ISRS), que produce una modulación significativa del reflejo eyaculatorio, de acción corta (no requiere administración crónica diaria), que se administra en forma oral y a demanda, entre 1 a 3 horas previas al inicio de la relación sexual y que no posee efecto acumulativo.
“La mayoría de las personas piensa que este control puede ejercerse mentalmente, por una orden del cerebro, pero ello no es viable. Podría tramarse una analogía con los reflejos: si yo me clavo una aguja en cualquier parte del cuerpo no podré impedir el dolor; la única manera de evitarlo sería alejar mi cuerpo de la aguja. El eyaculador precoz no puede detenerse a tiempo por propia decisión, ni reducir el ritmo de bombeos que desaceleren su excitación”, explicó Adrián Sapetti, especialista en el tema, y Director del Centro Médico de Sexología y Psiquiatría.
Según el profesional consultado, este nuevo y único tratamiento con Dapoxetina logra: Efecto rápido (antes de 1 hora). Incrementar la duración de las relaciones sexuales entre 3 y 7 minutos. Mejorar la percepción sobre el control de la eyaculación. Mejorar el malestar (distrés) en las relaciones de pareja y lograr una mayor satisfacción sexual individual y de la pareja.
El efecto dura 4-5 horas y las comidas no interfieren en su absorción. Su uso es a demanda (o sea sólo antes de las relaciones sexuales), observándose mejoras en escalas de satisfacción y control de la eyaculación.
Estudios certifican que el período eyaculatorio normal ocurre entre los 5 y 7 minutos y que menos de un minuto es considerado patológico como para tratar el problema. Se estima que entre el 20 por ciento y 40 por ciento de ellos pueden presentar eyaculación precoz en alguna etapa de su vida y que actualmente un 30 por ciento la padece.
Las autoridades sanitarias reguladoras de Argentina, acaban de aprobar la comercialización de una nueva y única droga llamada Dapoxetina, para el tratamiento “efectivo” de la Eyaculación Precoz. Es el primer fármaco aprobado para ésta indicación.
Se define a la eyaculación precoz (EP) como la imposibilidad y/o dificultad en el control de la eyaculación, la que puede ocurrir antes de la penetración vaginal o en forma inmediata a la misma.
Entre los factores involucrados en la EP, se postula que los niveles alterados de serotonina o una alteración en la sensibilidad de sus receptores, en los centros moduladores de la eyaculación en el sistema nervioso central, son la base fisiopatológica de los trastornos eyaculatorios con repercusiones negativas en el hombre y su pareja, en asociación con una menor autoestima, ansiedad y sentimientos de inferioridad. Sin embargo, muy pocos hombres buscan un tratamiento debido a la dificultad del paciente para expresar su problemática.
Afortunadamente ya se inició en Argentina la comercialización de Dapoxetina, indicada para prolongar el tiempo de latencia de eyaculación intravaginal (IELT). Se trata de un inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina (ISRS), que produce una modulación significativa del reflejo eyaculatorio, de acción corta (no requiere administración crónica diaria), que se administra en forma oral y a demanda, entre 1 a 3 horas previas al inicio de la relación sexual y que no posee efecto acumulativo.
“La mayoría de las personas piensa que este control puede ejercerse mentalmente, por una orden del cerebro, pero ello no es viable. Podría tramarse una analogía con los reflejos: si yo me clavo una aguja en cualquier parte del cuerpo no podré impedir el dolor; la única manera de evitarlo sería alejar mi cuerpo de la aguja. El eyaculador precoz no puede detenerse a tiempo por propia decisión, ni reducir el ritmo de bombeos que desaceleren su excitación”, explicó Adrián Sapetti, especialista en el tema, y Director del Centro Médico de Sexología y Psiquiatría.
Según el profesional consultado, este nuevo y único tratamiento con Dapoxetina logra: Efecto rápido (antes de 1 hora). Incrementar la duración de las relaciones sexuales entre 3 y 7 minutos. Mejorar la percepción sobre el control de la eyaculación. Mejorar el malestar (distrés) en las relaciones de pareja y lograr una mayor satisfacción sexual individual y de la pareja.
El efecto dura 4-5 horas y las comidas no interfieren en su absorción. Su uso es a demanda (o sea sólo antes de las relaciones sexuales), observándose mejoras en escalas de satisfacción y control de la eyaculación.
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