Hubo audiencia en el Senado y el proyecto seguirá en debate varias semanas. El Gobierno encontró aliados municipales.
El debate por la ley corta de telecomunicaciones, un reclamo de las telefónicas para poder brindar televisión satelital, se enredó en el Senado en un inesperado cruce entre cooperativistas y proveedores de internet de comunidades pequeñas, convertidos en los mejores aliados del Gobierno para destrabar el debate a su favor.
Se enfrenaron por los dos primeros artículos del proyecto, que obligan a los proveedores de servicios públicos a aportar su infraestructura a los licenciatarios de telecomunicaciones, un reclamo de las telefónicas para apropiarse de postes y ductos protegidos por gobiernos locales.
Hace una semana, Héctor Huici, secretario de tecnologías de la información y las comunicaciones, leyó una carta de Rodolfo Bianchi, presidente de la Cámara Argentina de Pequeños Proveedores de Internet (CAPPI), en la que le pedía intervenir ante intendentes y gobernadores para poder sumar clientes.
Bianchi repitió su reclamo en la audiencia de la Comisión de Sistemas y Medios de Comunicaciones del Senado, presidida por Héctor Luenzo, del bloque de Miguel Pichetto. Y confrontó con los cooperativistas, que no quieren ceder ni un centímetro de su infraestructura.
"Empezamos a dar internet con tecnología inalámbrica y ya no da el ancho de banda. Necesitamos postes, infraestructura y no podemos acceder", se quejó Bianchi y reclamó una oficina única de la Enacom para aplicar la ley.
"No quiero que luego me digan no te presto un poste por tal o cual cosa o el tema se judicialice", solicitó y se pronunció en contra de delegar en las provincias la posibilidad de adherir o no a la ley, un reclamo del gobernador Carlos Verna, de La Pampa, donde hay servicio local de internet porque Telefónica no cubre el territorio.
Esteban Lescano, miembro de la Cámara Argentina de Internet (CABASE), consideró "oportuno" usar la infraestructura local para llegar con la banda ancha a los hogares, como también licitar en el mercado las frecuencias de Arsat.
Luego explicó que no quiere un mercado libre para la competencia local con los grandes jugadores. Un rato antes, Roberto Calvo, presidente de la Cooperativa de Provisión y Comercialización de Servicios Comunitarios de Radiodifusión (COLSECOR), había pedido proteger la infraestructura de sus afiliados.
"¿Saben por qué las grandes empresas no brindaron telecomunicaciones en las localidades con menos de 100 mil habitantes? Porque no son mercado. Y por lo tanto no pueden ser consideradas un mercado para esta ley", solicitó.
Lucio Gamalieri, de la red Intercable, advirtió que la ley puede ser un tiro de gracia a los cableros. "La captación de infraestructura debería ser tratado en un reglamento específico", pidió.
Rechazó además que Telefónica pueda brindar televisión por subscripción con sus satélites, la única manera que tiene para completar un servicio de cuádruple play, porque no desplegó fibra óptica a lo largo del país.
"Están metiendo la televisión en el hogar y eliminado el trabajo de pymes, cuando en realidad deberían desarrollar redes físicas", se quejó Gamalieri.
La sesión había comenzado con la voz de las telefónicas, las mayores beneficiadas con esta ley, representadas por Roberto Capellán presidente de la Cámara de Informática y Comunicaciones de la República Argentina (CICOMRA).
"La demanda es cada vez mayor y requiere más infraestructura. Y compartir la que es pasiva es un elemento que ayuda al desarrollo de la activa", se defendió.
La próxima semana seguirán los oradores y la ley, por ahora, no tiene fecha de tratamiento. Pero sí pymes que la reclaman.
(La Politica Online).
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