Cerca del gobernador esperan que su vice siga con las a la policía y al servicio penitenciario, siempre escoltado por Verbitsky, quien pidió que Scioli abandonara su cargo el año próximo. “No queremos cambios de ministros sino de gestión”, se defendió el vice. Y aseguró que no pone palos en la rueda.
El sciolismo cree que Gabriel Mariotto centrará sus ataques al gobernador en las denuncias sobre el sistema policial y del servicio penitenciario, que realiza habitualmente junto al periodista Horacio Verbitsky, quien llegó a plantear que el gobernador debería dar un paso al costado el año próximo.
Para ese objetivo, el vicegobernador ya no podrá apelar al ahogo financiero del gobernador, que estaría saldado en lo inmediato con el acuerdo con la Nación para una reforma tributaria.
A esa medida le seguirá un desembolso de 300 millones de pesos, necesarios para que Scioli pague los salarios de junio, que había pautado pagar en dos veces.
Pasado ese conflicto, en la gobernación creen que Mariotto volverá a la carga contra el ministro de Justicia, Ricardo Casal, a quien Scioli se resiste a remover pese a la presión de la Casa Rosada.
“No hay palos en la rueda ni viejas metodologías", se defendió hoy el vicegobernador, en alusión a las críticas que llegaron desde el Gabinete bonaerense cuando avaló un pedido de informes sobre publicidad oficial.
Y aclaró: "Nadie pretende el cambio de ministros o personas, estamos planteando ejes de gestión para que se discutan con el Ejecutivo, que en algunos casos se discuten y en otros no".
Mariotto ya avanzó sobre Scioli impulsando comisiones investigadores sobre la muerta de Candela Sol Rodríguez y Luciano Arruga, casos en los que estuvo en tela de juicio la actuación policial.
También recorrió las cárceles acompañado de Verbitsky, quien publicó varias denuncias sobre la actuación de los penitenciarios a través del Centro de Estudios Legales y Sociales.
La ley tributaria no lo dejó bien parado. Quedó en el eje de la polémica cuando retiró la policía de la Legislatura y provocó un enfrentamiento cuerpo a cuerpo entre los chacareros que intentaron ingresar y los militantes de La Cámpora que se opusieron.
A la semana siguiente, cuando Diputados parecía tener todo acordado para sancionar la ley, Mariotto sorprendió al sugerir por televisión que en la Legislatura las leyes se acordaban con una valija. “Nos empiojó la sesión”, se lamentó el jefe de bloque, Juan de Jesús. (La Política OnLine).
El sciolismo cree que Gabriel Mariotto centrará sus ataques al gobernador en las denuncias sobre el sistema policial y del servicio penitenciario, que realiza habitualmente junto al periodista Horacio Verbitsky, quien llegó a plantear que el gobernador debería dar un paso al costado el año próximo.
Para ese objetivo, el vicegobernador ya no podrá apelar al ahogo financiero del gobernador, que estaría saldado en lo inmediato con el acuerdo con la Nación para una reforma tributaria.
A esa medida le seguirá un desembolso de 300 millones de pesos, necesarios para que Scioli pague los salarios de junio, que había pautado pagar en dos veces.
Pasado ese conflicto, en la gobernación creen que Mariotto volverá a la carga contra el ministro de Justicia, Ricardo Casal, a quien Scioli se resiste a remover pese a la presión de la Casa Rosada.
“No hay palos en la rueda ni viejas metodologías", se defendió hoy el vicegobernador, en alusión a las críticas que llegaron desde el Gabinete bonaerense cuando avaló un pedido de informes sobre publicidad oficial.
Y aclaró: "Nadie pretende el cambio de ministros o personas, estamos planteando ejes de gestión para que se discutan con el Ejecutivo, que en algunos casos se discuten y en otros no".
Mariotto ya avanzó sobre Scioli impulsando comisiones investigadores sobre la muerta de Candela Sol Rodríguez y Luciano Arruga, casos en los que estuvo en tela de juicio la actuación policial.
También recorrió las cárceles acompañado de Verbitsky, quien publicó varias denuncias sobre la actuación de los penitenciarios a través del Centro de Estudios Legales y Sociales.
La ley tributaria no lo dejó bien parado. Quedó en el eje de la polémica cuando retiró la policía de la Legislatura y provocó un enfrentamiento cuerpo a cuerpo entre los chacareros que intentaron ingresar y los militantes de La Cámpora que se opusieron.
A la semana siguiente, cuando Diputados parecía tener todo acordado para sancionar la ley, Mariotto sorprendió al sugerir por televisión que en la Legislatura las leyes se acordaban con una valija. “Nos empiojó la sesión”, se lamentó el jefe de bloque, Juan de Jesús. (La Política OnLine).
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