BUENOS AIRES, Enero 29, (PUNTO CERO) La ministra de Salud ordenó levantar de Canal 7 un programa de Marcelo Duhalde, hermano del secretario de Derechos Humanos.
El portal del futuro diario de Jorge Lanata (www.criticadigital.com) empieza e entregar algunas notas que anticipan el tono del matutino que saldrá a la calle dentro de un mes. En este caso se trata de una investigación del periodista Mauro Federico, que tuvo su paso por Canal 7 con el programa Huella Digital.
El periodista es un especialista en temas vinculados al área de salud y editaba el periódico El Médico. Veamos la nota que además impacta indirectamente en el área de Medios que conduce Enrique Albistur.
La ministra de Salud, Graciela Ocaña, decidió poner fin al programa televisivo Saludarnos que se emitía por Canal 7 y someter a investigación al director general de ese ciclo, Marcelo Duhalde, hermano de otro importante funcionario de la administración K, el secretario de Derechos Humanos Eduardo Luis Duhalde.
Saludarnos fue, hasta diciembre , una coproducción en la que Canal 7 aportaba "la infraestructura física y todos los medios técnicos que requiera la puesta al aire", mientras que el Ministerio de Salud se hacía cargo de salarios y gastos del "personal profesional y técnico", según el convenio al que Crítica tuvo acceso. Las cifras en juego son significativas: sólo en 2007, Salud destinó 1.400.000 pesos al programa.
La idea nació bajo la gestión del anterior ministro Ginés González García, en el año 2003. Marcelo Duhalde era en ese momento jefe de prensa del Ministerio. Cobraba, en calidad de asesor, un sueldo de 4.700 pesos. Un conflicto que ninguna de las partes quiso hacer público -pero que según comprobó Crítica también tuvo origen en el manejo irregular de fondos- enemistó al ministro y a su vocero. Sin embargo, Gines no despidió a Duhalde: mantuvo su rango y salario de asesor, pero lo alejó de su vista. Así, Marcelo Duhalde fue "castigado" con la dirección del programa Saludarnos, que ejerció durante cuatro años.
El mes pasado, al asumir como nueva ministra de Salud, Graciela Ocaña ordenó a la "Unidad Ministro" una exhaustiva revisión de cuentas. En pocos días, Saludarnos se convirtió en el "caso Saludarnos", con carpeta y número de expediente. Marcelo Duhalde fue despedido. Según los investigadores, se detectaron "graves irregularidades" en el manejo y rendición de fondos públicos. Entre otras:
* Facturas por servicios inexistentes;
* Compras de artículos para uso personal;
* Peajes, combustible y reparaciones de vehículos no oficiales;
* Imputaciones salariales falsas, como pagos en concepto de trabajo periodístico al chofer particular de Duhalde;
* Adquisición de computadoras que ahora no aparecen, ni en el Ministerio ni en el Canal;
* Pago de trabajos de grabación, edición y compaginación, rubros que se suponen eran el aporte básico de Canal 7 y figuran como gastos ministeriales;
* Contratación de la esposa de Duhalde como asesora del programa, pese a que ya tenía (y cobraba por) ese rango en otro convenio del Ministerio, en este caso de "reciprocidad" con la facultad de Ciencias Económicas;
* Pasajes injustificados en avión (Según las desprolijas rendiciones que heredó Ocaña, Duhalde habría viajado a España en septiembre pasado para asistir a un seminario sobre periodismo de Salud que se realizó seis meses antes en la Universidad de Navarra).
"Estamos cotejando planillas de erogaciones y comprobantes. Cuando tengamos la documentación completa vamos a hacer la presentación judicial", anticipó a Critica una alta fuente del Ministerio. Y agregó, arqueando las cejas: "¿Un millón y medio de pesos en sólo un año? Es un gasto de una superproducción que a todas luces no es la de este modesto programa".
El portal del futuro diario de Jorge Lanata (www.criticadigital.com) empieza e entregar algunas notas que anticipan el tono del matutino que saldrá a la calle dentro de un mes. En este caso se trata de una investigación del periodista Mauro Federico, que tuvo su paso por Canal 7 con el programa Huella Digital.
El periodista es un especialista en temas vinculados al área de salud y editaba el periódico El Médico. Veamos la nota que además impacta indirectamente en el área de Medios que conduce Enrique Albistur.
La ministra de Salud, Graciela Ocaña, decidió poner fin al programa televisivo Saludarnos que se emitía por Canal 7 y someter a investigación al director general de ese ciclo, Marcelo Duhalde, hermano de otro importante funcionario de la administración K, el secretario de Derechos Humanos Eduardo Luis Duhalde.
Saludarnos fue, hasta diciembre , una coproducción en la que Canal 7 aportaba "la infraestructura física y todos los medios técnicos que requiera la puesta al aire", mientras que el Ministerio de Salud se hacía cargo de salarios y gastos del "personal profesional y técnico", según el convenio al que Crítica tuvo acceso. Las cifras en juego son significativas: sólo en 2007, Salud destinó 1.400.000 pesos al programa.
La idea nació bajo la gestión del anterior ministro Ginés González García, en el año 2003. Marcelo Duhalde era en ese momento jefe de prensa del Ministerio. Cobraba, en calidad de asesor, un sueldo de 4.700 pesos. Un conflicto que ninguna de las partes quiso hacer público -pero que según comprobó Crítica también tuvo origen en el manejo irregular de fondos- enemistó al ministro y a su vocero. Sin embargo, Gines no despidió a Duhalde: mantuvo su rango y salario de asesor, pero lo alejó de su vista. Así, Marcelo Duhalde fue "castigado" con la dirección del programa Saludarnos, que ejerció durante cuatro años.
El mes pasado, al asumir como nueva ministra de Salud, Graciela Ocaña ordenó a la "Unidad Ministro" una exhaustiva revisión de cuentas. En pocos días, Saludarnos se convirtió en el "caso Saludarnos", con carpeta y número de expediente. Marcelo Duhalde fue despedido. Según los investigadores, se detectaron "graves irregularidades" en el manejo y rendición de fondos públicos. Entre otras:
* Facturas por servicios inexistentes;
* Compras de artículos para uso personal;
* Peajes, combustible y reparaciones de vehículos no oficiales;
* Imputaciones salariales falsas, como pagos en concepto de trabajo periodístico al chofer particular de Duhalde;
* Adquisición de computadoras que ahora no aparecen, ni en el Ministerio ni en el Canal;
* Pago de trabajos de grabación, edición y compaginación, rubros que se suponen eran el aporte básico de Canal 7 y figuran como gastos ministeriales;
* Contratación de la esposa de Duhalde como asesora del programa, pese a que ya tenía (y cobraba por) ese rango en otro convenio del Ministerio, en este caso de "reciprocidad" con la facultad de Ciencias Económicas;
* Pasajes injustificados en avión (Según las desprolijas rendiciones que heredó Ocaña, Duhalde habría viajado a España en septiembre pasado para asistir a un seminario sobre periodismo de Salud que se realizó seis meses antes en la Universidad de Navarra).
"Estamos cotejando planillas de erogaciones y comprobantes. Cuando tengamos la documentación completa vamos a hacer la presentación judicial", anticipó a Critica una alta fuente del Ministerio. Y agregó, arqueando las cejas: "¿Un millón y medio de pesos en sólo un año? Es un gasto de una superproducción que a todas luces no es la de este modesto programa".
Con esos argumentos, Ocaña ordenó levantar el ciclo televisivo. Pero sobre llovido, mojado: el personal afectado decidió iniciar juicio a Canal 7 reclamando estabilidad laboral y / o resarcimiento económico. (PUNTO CERO).
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