El intendente Jorge Ferraresi acordó un aumento de sueldos inédito con los municipales. Pero la cifra condiciona al resto de los jefes comunales de la zona sur que siguen negociando con los gremios. “En Avellaneda los sueldos estaban muy atrasados, nadie puede hacerse cargo de semejante números”, dicen en los distritos vecinos.
La novedad sobre un acuerdo entre el Sindicato de Trabajadores Municipales de Avellaneda y el intendente, Jorge Ferraresi, sorprendió doblemente. Por un lado, por la resolución positiva del conflicto en medio de una larga y tirante relación entre el gremio y el gobierno comunal. Pero sobre todo por la cifra en que cerraron las paritarias en el distrito: casi un 62 por ciento de aumento para los trabajadores, cifra inédita en este tipo de negociación.
De todos modos, vale aclarar que para llegar a ese “62 por ciento” obtenido por el sindicato que conduce Rubén “Cholito” García se instrumentaron otros mecanismos más allá del incremento en el sueldo básico como una bonificación por única vez por 600 pesos, un 4 por ciento por antigüedad, y aumentos en el extra por títulos secundarios y universitarios.
Lo cierto es que el acuerdo le sirve a Ferraresi para recomponer la relación con el Sindicato y continuar con su despegue del aparato que aún conserva el senador provincial Baldomero “Álvarez” de Olivera.
De todos modos, el acuerdo de alguna manera viene a condicionar las negociaciones que otros intendentes de la región vienen manteniendo con los sindicatos. Por caso, ni Lanús, ni Lomas de Zamora y Esteban Echeverría logaron aún cerrar trato con los municipales que piden mucho más que el 18 por ciento de aumento que la presidenta Cristina Kirchner “recomendó” a los gremios.
Por caso, una de las negociaciones más complicadas es la que lleva adelante el jefe comunal de Esteban Echeverría, Fernando Gray, con el Sindicato que maneja Adrián Gouin. Allí, los municipales reclaman un 40 por ciento de aumento más bonificaciones, siempre respaldados por la FESIMUBO, la federación que lidera el propio Cholito García.
“Estamos ante una buena oportunidad aunque la negociación es dura. No solo de Avellaneda llegó a ese porcentaje, Ensenada cerró un aumento del 52 por ciento. Igualmente, acá el intendente no paga las horas extras desde hace 3 meses”, criticó Gouin.
En el Municipio aseguran que la negociación “está abierta” aunque también advierten que ese 40 por ciento “es un número extrapolado de la realidad”. “Ningún municipio puede pagar eso, es un número muy muy alto. No sabemos cómo está la situación en Avellaneda pero nosotros venimos atendiendo desde hace años los reclamos de los municipales”, señaló una fuente municipal.
En Lanús, el escenario es muy similar aunque allí el sindicato de Miguel Pedelhez responde a la FESIMUBO sino que se enrola en la Federación de Trabajadores Municipales. El gremio pide allí un aumento de un 25 por ciento pero el municipio de Darío Díaz Pérez ofrece un 23 por ciento en cuotas. Hoy al mediodía se esperaba una nueva reunión para acercar posiciones aunque el Sindicato ya amenazó con un paro la semana que viene.
Con todo, fuentes de la Comuna repiten el argumento de sus pares de Esteban Echeverría. “Es mucho lo que se hizo en cinco años para mejorar la situación de los municipales. Deberían comparar cómo estaban con Quindimil y lo mucho que obtuvieron con la gestión de Darío. Quizá lo que hicieron en Avellaneda en un solo año, nosotros lo hicimos en cuatro”, confió un funcionario.
En Lomas de Zamora, el Sindicato quiere un aumento del 30 por ciento aunque por el momento las negociaciones están paralizadas porque los principales dirigentes del gremio están de licencia. (La Política OnLine).
La novedad sobre un acuerdo entre el Sindicato de Trabajadores Municipales de Avellaneda y el intendente, Jorge Ferraresi, sorprendió doblemente. Por un lado, por la resolución positiva del conflicto en medio de una larga y tirante relación entre el gremio y el gobierno comunal. Pero sobre todo por la cifra en que cerraron las paritarias en el distrito: casi un 62 por ciento de aumento para los trabajadores, cifra inédita en este tipo de negociación.
De todos modos, vale aclarar que para llegar a ese “62 por ciento” obtenido por el sindicato que conduce Rubén “Cholito” García se instrumentaron otros mecanismos más allá del incremento en el sueldo básico como una bonificación por única vez por 600 pesos, un 4 por ciento por antigüedad, y aumentos en el extra por títulos secundarios y universitarios.
Lo cierto es que el acuerdo le sirve a Ferraresi para recomponer la relación con el Sindicato y continuar con su despegue del aparato que aún conserva el senador provincial Baldomero “Álvarez” de Olivera.
De todos modos, el acuerdo de alguna manera viene a condicionar las negociaciones que otros intendentes de la región vienen manteniendo con los sindicatos. Por caso, ni Lanús, ni Lomas de Zamora y Esteban Echeverría logaron aún cerrar trato con los municipales que piden mucho más que el 18 por ciento de aumento que la presidenta Cristina Kirchner “recomendó” a los gremios.
Por caso, una de las negociaciones más complicadas es la que lleva adelante el jefe comunal de Esteban Echeverría, Fernando Gray, con el Sindicato que maneja Adrián Gouin. Allí, los municipales reclaman un 40 por ciento de aumento más bonificaciones, siempre respaldados por la FESIMUBO, la federación que lidera el propio Cholito García.
“Estamos ante una buena oportunidad aunque la negociación es dura. No solo de Avellaneda llegó a ese porcentaje, Ensenada cerró un aumento del 52 por ciento. Igualmente, acá el intendente no paga las horas extras desde hace 3 meses”, criticó Gouin.
En el Municipio aseguran que la negociación “está abierta” aunque también advierten que ese 40 por ciento “es un número extrapolado de la realidad”. “Ningún municipio puede pagar eso, es un número muy muy alto. No sabemos cómo está la situación en Avellaneda pero nosotros venimos atendiendo desde hace años los reclamos de los municipales”, señaló una fuente municipal.
En Lanús, el escenario es muy similar aunque allí el sindicato de Miguel Pedelhez responde a la FESIMUBO sino que se enrola en la Federación de Trabajadores Municipales. El gremio pide allí un aumento de un 25 por ciento pero el municipio de Darío Díaz Pérez ofrece un 23 por ciento en cuotas. Hoy al mediodía se esperaba una nueva reunión para acercar posiciones aunque el Sindicato ya amenazó con un paro la semana que viene.
Con todo, fuentes de la Comuna repiten el argumento de sus pares de Esteban Echeverría. “Es mucho lo que se hizo en cinco años para mejorar la situación de los municipales. Deberían comparar cómo estaban con Quindimil y lo mucho que obtuvieron con la gestión de Darío. Quizá lo que hicieron en Avellaneda en un solo año, nosotros lo hicimos en cuatro”, confió un funcionario.
En Lomas de Zamora, el Sindicato quiere un aumento del 30 por ciento aunque por el momento las negociaciones están paralizadas porque los principales dirigentes del gremio están de licencia. (La Política OnLine).
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