14 de Junio, Día Internacional del Donante de Sangre.

El próximo 14 de junio se celebra el Día Internacional del Donante de Sangre como muestra de reconocimiento y agradecimiento a los donantes de sangre de todo el mundo. La fecha, establecida por la Organización Mundial de la Salud (OMS), es un llamado de atención para que las personas tomen conciencia sobre la importancia que tiene este sencillo hábito.

El tema de la campaña de este año es: “Gracias por salvarme la vida”.

Mucho se habla sobre la donación de órganos y tejidos. Sin embargo, hay algo tan importante como ese acto altruista, una donación de vida en vida: la donación voluntaria de sangre.

Una mayor esperanza de vida, el aumento de dolencias relacionadas con el envejecimiento, o las enfermedades oncológicas, entre otras, para sus tratamientos, requieren cada vez más de hemocomponentes y  derivados sanguíneos.

En gran parte de los bancos de sangre de Argentina se atienden donantes predominantemente de reposición. Según la OMS, el  5% de las donaciones son voluntarias. Los especialistas observan que la falta de información correcta, las creencias equivocadas o los mitos contribuyen a que muchos potenciales donantes pierdan la oportunidad de ayudar.

* ¿Verdadero o falso? Dudas y mitos sobre la donación de sangre

Existen numerosos mitos acerca de la donación de sangre. El más frecuente tiene que ver con la periodicidad: muchas personas creen que sólo puede hacerse una vez al año. Personas entre los 18 y 65 años de edad que califiquen para donar, se pueden presentar cada dos meses, hasta 5 veces al año.
Además, existen las falsas creencias acerca de que donar sangre:
·       Engorda (o adelgaza)
·       Hace más espesa (o licúa) la sangre
·       Provoca ataques
·       Da hambre
·       Puede contagiar alguna enfermedad
·       Duele y debilita
·       Si se dona una vez hay que donar siempre porque se estimula la producción de sangre
·       El tipo de sangre determina el temperamento.

La importancia de promover la donación de sangre voluntaria y habitual:

Las intervenciones médico-quirúrgicas como trasplantes, cirugías cardiovasculares, obstétricas y traumatológicas, así como los tratamientos de las alteraciones hematológicas, se llevan a cabo  gracias al soporte transfusional  sostenido, por lo que es necesario contar con un buen número de donaciones.
Algunos hemocomponentes tienen un tiempo de conservación de tan solo cinco días, como es el caso de las plaquetas. Es decir que cada vez se necesitan más donantes de sangre para satisfacer esta demanda.

Donar sangre solo cuando hay una emergencia, ya es tarde: La sangre debe ser sometida a pruebas y procesos. Sólo es posible garantizar existencias de sangre segura en cantidades suficientes mediante donaciones regulares efectuadas por donantes de sangre voluntarios y habituales. Con su contribución desinteresada, éstos permiten salvar millones de vidas y aumentar la esperanza y la calidad de vida de los pacientes.

La donación voluntaria y repetitiva:
-Aumenta la seguridad transfusional: los donantes repetidamente chequeados son más seguros.

-Asegura la disponibilidad de hemocomponentes para la población que lo requiera: glóbulos rojos, plasma, plaquetas, etc. Cada donación puede destinarse, al menos a tres personas.

- La donación de sangre es un acto seguro: la cantidad donada sólo representa el 10% del volumen de sangre que normalmente se posee, porcentaje que no interfiere con el funcionamiento normal del organismo.

Centrarse en la salud de los donantes y en la calidad de la atención que reciben, son factores fundamentales para obtener su compromiso y promover el deseo de donar regularmente. Por ello resulta fundamental que los Ministerios y Secretarías de Salud manifiesten su reconocimiento y proporcionen recursos suficientes para prestar una atención de calidad a los donantes voluntarios, habituales y no remunerados.

“Gracias por salvarme la vida”, el tema de la campaña de este año
TESTIMONIOS DE PACIENTES RECEPTORES DE TRANSFUSIONES
“El día internacional del donante de sangre, nos da la magnífica oportunidad de poder agradecer y de retribuir desde el corazón y en palabras, aquello que en nuestras vidas resulta invaluable.” R.F.
“Las donaciones de sangre salvan vidas humanas, de ello no hay duda. Pero para quien necesita de las transfusiones en forma crónica, las donaciones no sólo salvan vidas, sino que permiten vivirla con calidad y dignidad. Se necesita permanentemente de estos actos de excepcional generosidad para poder seguir adelante, para poder ser, poder desarrollarnos, poder llevar adelante vidas normales.
“Y es por eso que un GRACIAS no basta, ya que agradecemos en cada minuto y cada segundo, de cada día, cada mes y cada año de nuestras vidas, estos maravillosos actos de amor en su más puro estado. Actos de amor realizados por personas que en ocasiones conocemos y en otras no, pero a los que les obsequiamos cada latido de nuestro corazón y les enviamos un afecto insuperable que no alcanza expresarlo en palabras.”
“Para aquellos que nunca han donado sangre, les digo: anímense a hacerlo… porque lo vale! No esperen a necesitarlo, no esperen a sufrir por alguien querido que lo requiere. Abran aquí y ahora sus ojos a esta necesidad!  Ustedes son imprescindibles. Muchísimos pacientes deben esperar día a día que llegue ese preciado regalo, háganlo por nosotros, háganlo por ustedes y hagan de eso: un hábito. Súmense a esa cadena bellísima de amor y vida!!! Hagan de ello un compromiso y una responsabilidad, que les será retribuida con el mayor agradecimiento que jamás hayan recibido. Reciban o no personalmente estas palabras, serán las gracias más grandiosas y sinceras que jamás puedan recibir!”
“¡Cómo poder expresarles a todos ustedes DONANTES, que agradezco: respirar, caminar, comer, trabajar, estudiar, hacer, sentirme bien, entre tantísimas otras cosas… por ustedes! Cómo expresarles en palabras corrientes que debo mis días a  la generosidad de quienes dan algo único y excepcional. Cómo expresar que gracias a uustedes puedo vivir la vida!”  R.F.
“Multiplíquense, súmense, donen sangre. Crean en ello y velen por propagar el efecto multiplicador de la solidaridad. Hablen de ello, destierren mitos, animen a sus pares, amigos y conocidos a donar. Háganlo y conviértanlo en un maravilloso hábito.”
“Donar sangre no es moda, es un modo de vivir solidariamente. Se requieren donantes todos los días, en todo momento y todos somos o seremos en algún momento receptores. Los afortunados que pueden donar sangre hoy deben aprovechar cada instante para hacerlo. Sé con certeza, que si mi afección me lo permitiera, estaría allí donando al lado de ustedes cada vez que pudiera. Donen sangre, donen vida".