El massismo, sin candidato firme a gobernador. Por María Micaela Ciancio.

El Frente Renovador era la fuerza con mayor cantidad de postulantes a la provincia de Buenos Aires. Hoy, Mónica López y el rumor de Malena Galmarini, lo único en pie.

Desde que Sergio Massa ratificó que matiene su candidatura presidencial dentro del Frente Renovador, se terminó una serie de especulaciones, pero se sumó un nuevo interrogante: ¿quién será el candidato a gobernador del espacio. Entre Mónica López y Malena Galmarini, los rumores. Silencio massista hasta el 20 de junio.

En los días previos a que se definiera el futuro y la estrategia política de Sergio Massa, el principal candidato a Gobernador del espacio, Francisco De Narváez, decidió correrse y para permitir que el tigrense acuerde con el candidato presidencial del PRO, Mauricio Macri, y avanzar en una gran alianza opositora, con Macri en el candidatura presidencial y Massa en la gobernación.

Pero no pasó. Massa intentó, fue rechazado por el PRO y luego de pensarlo varios días y analizar las estrategias anunció que seguía camino a la presidencia. Ahí es cuando nuevamente se empezó a pensar el armado hacia abajo, ya sin Francisco De Nárvaez, sólo cuentan con Mónica López e intentaron hacer resurgir a otro postulante que había declinado, Felipe Solá, quien ya salió a desmentir que vuelva a ser candidato.

“No le veo mucho sentido volver a ser candidato, yo ya me bajé”, aseguró y despejó teorías: “Hubo un rumor que salió esta semana que me incluía incluso con Malena Galbarini en la fórmula, que la verdad no sé de donde salió. Pero ya está eso, ya paso, en el sentido de que yo fui candidato del Frente Renovador y ya me bajé”.

El ex gobernador bonaerense, aprovechó para pegarle a algunos dirigentes del Frente Renovador y aeguró que “la mayoría de los dirigentes veían mal que las negociaciones con el PRO fueran más allá de una interna entre dos candidatos a presidentes”, pero “todas las demás negociaciones han sido errores de dirigentes que antes que pensar en Massa pensaron en ellos, en intereses propios, que perjudicaron y dejaron mirando hacia el PRO cuando no es así”.

El derrotero massista. Cuando comenzó la carrera electoral de cara al 2015, el Frente Renovador tenía seis candidatos que buscaban ser los elegidos para acompañar a Sergio Massa en la lista como el candidato presidencial: Gustavo Posse, Darío Giustozzi, Francisco De Narváez, Mónica López, Jesús Cariglino y Felipe Solá.

El primero en irse fue el intendente de San Isidro, Gustavo Posse, quien al ver que no iba a ser tenido en cuenta por Massa, dio el portazo y fue a probar suerte dentro del armado del Pro y la UCR.

En sintonía, Felipe Solá, sin abandonar el espacio, decidió declinar su candidatura al ver que los números no lo acompañaban y que Francisco De Narváez parecía ser el que picaba en punta para quedarse con ese tramo de la boleta.

Lo siguió Jesús Cariglino, que decidió irse del Frente Renovador, sin rumbo claro, pero después de varias negociaciones, desembarcó en el Pro y pelar junto a Mauricio Macri las elecciones.

En medio de portazos de los intendentes más resonantes que había logrado captar Sergio Massa, el que decidió dejar el armado, fue uno de los primeros en llegar: Darío Giustozzi. No medía en las encuestas y reclamaba ser el único candidato, pero no tenía respaldo a su postura y partió en busca de contención dentro del Frente para la Victoria.

El último en bajarse o, en sus palabras, "correrse" de la escena como candidato a Gobernador, fue Francisco De Naráez, dejando sólo a Mónica López de los que marchan desde el inicio buscando ocupar el sillón de Roca.

Sin embargo, los rumores deslizaron el nombre de la mujer de Sergio Massa, Malena Galmarini, como una de las posibles candidatas a pelear en la provincia.

En medio de la búsqueda de un candidato a Gobernador que pueda traccionar votos a la candidatura presidencial, Massa prefirió llamarse a silencio y advirtió que no dará nombres hasta la presentación de la listas el próximo 20 de junio. (Diagonales.com).