Los festejos se extendieron durante toda la jornada, comenzando en la Plaza Belgrano y finalizando en la sede social de la calle San Martín. Como intendente interino, Héctor Artero descubrió una placa entregada en nombre del Municipio.
Con diversas actividades que se extendieron durante toda la jornada, el sábado pasado la Sociedad Italiana de Luján celebró sus 140 años de vida. Los festejos se iniciaron temprano en la plaza Belgrano y culminaron por la noche en la sede social de la calle San Martín. Según informó el Consejo Directivo de la entidad, las actividades incluyeron sendos recordatorios a todos los socios que de una u otra forma colaboraron con su desarrollo institucional. “La fiesta fue un homenaje a tantos italianos que dejaron su tiempo de descanso después del trabajo para levantar lo que es hoy una de las entidades más antiguas de Luján”, indicaron.
Por su parte, el intendente interino Héctor Artero descubrió una placa entregada en nombre del Municipio, al tiempo que agradeció a los miembros de la Sociedad Italiana: “El festejo me hace acordar a mis descendientes maternos, que eran italianos, y que gracias a ellos aprendí el idioma junto con el castellano. Hoy me vino a la mente ese recuerdo”, señaló. Asimismo, entregó una placa firmada por el presidente del Concejo Deliberante, Nicolás Quarenta Montaiuti.
Historia
Según se informa a través de la página web de la entidad, la Sociedad Italiana fue fundada en febrero de 1876 y tuvo como primer presidente a don Alejandro Ruggeroni y secretario don Pedro Meneghini.
"Esta asociación, que se inició con sólo veinticinco socios, contaba con más de 450 afiliados, entre los cuales figuraron los más caracterizados italianos de la localidad. Poseía un edificio espléndido, un amplio salón-teatro en el que se realizaban, a menudo, conferencias, espectáculos y bailes.
"A fines de la década del 40 y a principios de la del 50, llega a Luján una nueva inmigración de obreros italianos, especializados en la industria. Eran bastante jóvenes: tenían entre veinte y cuarenta años. Traían muchas ganas de trabajar y progresar, lo cual se notó en que muchos de ellos fundaron empresas que dieron trabajo a gran cantidad de lujanenses. Como el grupo era bastante grande, sintieron ganas de buscar un lugar donde reunirse y fundaron un club. Eran más jóvenes que los socios de la otra Sociedad, que de cierta forma generacional, no los entendían.
"Este Club Italiano tenía más de doscientos socios varones (las mujeres no pagaban cuota) que desarrollaban una intensa actividad social, cultural y deportiva. Participaban las familias y miembros de otras colectividades.
"Este empuje y entusiasmo fue observado por la Sociedad Italiana de la calle San Martín, que realizó algunos contactos para lograr la unificación. Los principales mediadores fueron Oscar Rolla y Pedro Munari. En 1962, bajo la presidencia del Sr. Zago, se concretó esta alianza". (El Civismo).
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