PERGAMINO, Junio 25, (PUNTO CERO-La Opinión) Los comerciantes locales consultados aseguraron que es complicada la situación de los lácteos y no responsabilizan a los mayoristas porque entienden que este inconveniente es ajeno a ellos. Denuncian faltantes en artículos de limpieza. Es diferente lo que ocurre en el mercado de la carne porque con el correr de los días la entrega se normalizó en cantidad y calidad.
La crisis por el desabastecimiento llegó a nuestra ciudad con lo que Pergamino dejó de diferenciarse de otras localidades del país. Todos los mayoristas que distribuyen aquí productos alimenticios tienen igual complicación que el resto de sus pares a tal punto que algunas góndolas en la mañana de ayer mostraban el faltante de artículos importantes que se necesitan diariamente y son artículos fundamentales de la canasta básica.
Una dificultad
Para conocer la realidad, LA OPINION visitó comercios del rubro alimentario y a través de las palabras de sus dueños pudo ratificar lo expuesto por los vecinos que previamente habían sido consultados. Según los comerciantes, "este problema se remonta a varios días" atrás. "Generalmente con mi socio compramos los lácteos de las marcas líderes y desde hace semanas no hay variedad, solamente encontramos leche de una segunda marca", manifestó el responsable de un autoservicio instalado a la vera de la avenida Roca. A su vez, y a los pocos metros, un hombre le dijo lamentándose al cronista que "nos tendremos que acostumbrar a mirar cómo lo mejor se va a la exportación, como pasaba décadas anteriores. La leche, los yogures y los quesos faltan por los problemas que existen en las fábricas y los que venimos diariamente a hacer las compras vemos que las heladeras están vacías".
No hay lácteos
Los mayoristas de lácteos en Pergamino coincidieron en que existen "serios y complicados problemas desde hace muchas semanas; las empresas nos entregan pero no la cantidad que requerimos en los pedidos previos que mandamos como siempre", manifestó uno de los dueños de una distribuidora local. Productores de leche explicaron a sus clientes las razones de este desabastecimiento y aseguraron que por el momento no se normalizará la situación. "En aproximadamente 45 días se empezarán a observar los cambios", reconoció Silvio Yarroch, titular de la empresa que en la ciudad comercializa La Serenísima.
Los inconvenientes en este rubro surgen a partir de la incidencia de distintos factores, entre los que se encuentra la crisis sufrida por una de las más importantes empresas productora de lácteos de la Argentina como es SanCor. "Los compromisos de exportación de leche en polvo contraídos hay que cumplirlos", aseguró una de las fuentes de la firma consultada por el Diario, quien añadió que esta situación "perjudica a todos ya que son razones más que suficientes para que pensemos en que continúe la tendencia alcista de precios".
Situación de la carne
"En Pergamino la entrega de la carne es normal. Tenemos calidad en cada uno de los cortes que vendemos y seguirá así por varias semanas", aseguró Oscar Simón, uno de los carniceros que fue entrevistado en la vípera con el objetivo de conocer la realidad de este sector.
"Los frigoríficos nos aseguraron la provisión para esta semana", manifestó otra de las personas vinculadas al ramo y coincidió en que "todos tenemos carne debido a que no hay problemas, por el momento".
Todos los propietarios de los locales consultados insistieron en que no faltará carne: "No habrá problemas con el abastecimiento y se espera que tampoco los haya en las semanas venideras", sostuvo el titular de un negocio céntrico. A su vez aseveró que "a muchos colegas se les estancó el consumo, aunque está bastante firme (la demanda) pese a los aumentos en los precios durante abril y mayo". Consideran los carniceros que "la gente sigue comprando porque los demás productos cárnicos, como el pollo y el pescado, están muy caros también".
Opinión de la gente
Por otra parte, LA OPINION salió a recorrer las calles para conocer el análisis de la situación que hacen los vecinos. Muchos de los consumidores interrogados tuvieron la misma visión al respecto: "Todos los días las cosas aumentan y, cuando no pueden subir los precios, no entregan nada en el interior del país", criticó una de las señoras que estaba en la cola de una carnicería, a punto de abonar la compra del día que consistía "en un kilo de bola de lomo y puchero". A los pocos metros, un hombre de unos 50 años dio su opinión respecto de los faltantes y el comportamiento de los precios: "Cuando no son los productores del campo es el Gobierno, pero la gente siempre se perjudica. Observando el panorama nacional, el vecino asombrado dijo: "Parece mentira que en los últimos días no hubo problemas". Sostuvo además que "acá no debe faltar carne, nos rodean las vacas y es imposible que nos mientan".
En otro negocio visitado, una de las personas que brindó su parecer fue una ama de casa: "No es nuevo que falten cosas aunque carne hubo toda la semana; en este momento la situación es normal porque vengo del supermercado y ahí había gente comprando".
Diferentes productos
En esta línea informativa, el Diario consultó por diferentes productos que no se observan en las góndolas. "Los artículos de limpieza están faltando en estos días, al igual que algunos alimentos que generalmente se entregan de manera normal", manifestó el titular de un autoservicio instalado en la intersección de General Paz y Moreno. Además, a las pocas cuadras de allí, coincidieron en que "hay faltantes en todos los rubros". Opinan los comerciantes que "el Gobierno no puede seguir adelante con el acuerdo de precios que pretende impulsar y, en este sentido, los que todos los días levantamos la persiana de un comercio presagiamos que se derrumba en cualquier momento esta economía".
La oferta y la demanda son los principales factores que inciden en los valores comerciales de frutas y verduras
Nuevamente los pergaminenses se quejan por los precios de las verduras y frutas de estación, cuyos valores están supeditados a la oferta y la demanda que exista en los mercados concentradores donde todos los mayoristas de Pergamino adquieren los productos. En una recorrida efectuada en la mañana de ayer por LA OPINION, se consultó a los comerciantes más importantes que se dedican a este rubro. Lo conversado sirvió para ratificar los comentarios de los consumidores cuando se quejan de que "es imposible encontrar siempre los mismos valores en las verdulerías de la ciudad, todos los días aumentan".
Sin embargo, y como suele ocurrir con otros rubros, no depende de los propietarios de los negocios ubicados en estos lares la suerte que corran los valores comerciales de estas mercaderías.
Los mayoristas locales están sujetos a las listas de los expendendores regionales que no contemplan los costos adicionales como el flete y, por ende, los pergaminenses no pueden cumplir con el valor de los artículos propuesto por el Gobierno. "Los morrones en este momento están por las nubes y todos los mayoristas de Rosario directamente los bajan del camión caros y, si no te gusta, te quedás sin el producto", afirmó un verdulero que tiene su local en el corazón del barrio Acevedo. Ocurre lo mismo con los tomates, uno de los artículos que ha tenido cambios considerables. "Nosotros hace unos días atrás pagamos los cajones de tomate cerca de los cien pesos y en la semana que terminó, el mismo producto, costaba treinta pesos en el mercado", reconoció uno de los mayoristas más importantes de Pergamino como ejemplo de la volatilidad de los precios. "La gente sabe que hay cambios constantemente y en los pizarrones no podemos mantener el precio, hasta existen personas que quieren hacer valer la lista que el Gobierno
difundía oportunamente. Es difícil hacer entender a los clientes que este tipo de acuerdos no está vigente en el interior del país, no porque nosotros no pretendamos cumplirlo sino porque el mayorista tiene su propia lista y hay que pagar si queremos tener la mercadería", afirmó una joven que está al frente de un modesto autoservicio en barrio Martín Illia.
Se defienden
Por su parte, los verduleros se defienden de las iniciativas oficiales; dicen que en este tipo de negocio no se pueden fijar precios porque la oferta es sumamente estacional y los valores pueden subir o bajar rápidamente. Además, aclaran, existe una enorme cantidad de variedades y calidades. "Establecer una lista es complejo en todo sentido; el calor, el frío o las lluvias pueden llegar a arruinar completamente, por ejemplo, las cosechas de algunas verduras de hoja. A partir de ese hecho hay poca oferta y sube el precio", afirmó otro reconocido mayorista de Pergamino al ser consultado por el Diario. "En la realidad es difícil encontrar los precios indicativos -añadió- y subrayó que eso también pasa con los precios en otros artículos. "Dependemos de la oferta y la demanda; si viajás al mercado de Rosario podés comprobar que el cambio es permanente y existe debido a muchos factores pero -insiste- la oferta y demanda es determinante". Para graficar su realidad de todos los días, un distribuidor ofrece un ejemplo
: "Si llovió y no pudieron juntar tomates, encontrás pocos bultos y los quieren cobrar carísimo; pero si estuvo todo bien en cuanto a la cosecha, el valor es diferente y hay abundancia, buscan venderlos en lo inmediato para que no se pongan en mal estado", remarcó un rosarino radicado en Pergamino que se gana la vida repartiendo verduras con su camión.
Clima desfavorable
El intenso frío de la semana pasada, que afectó la producción de varias frutas y hortalizas, acompañado por el incremento en el costo del transporte, fueron las explicaciones dadas por los responsables de verdulerías para justificar las subas registradas en todos los productos frescos. Razones que no bastan a los consumidores, quienes están sorprendidos por algún inesperado incremento de precios.
"También encarece a la verdura el valor de transporte, de los plaguicidas y el aumento del costo de la mano de obra", dijo un comerciante del Centro y otro de los argumentos escuchados de boca de los dueños de verdulerías es que "existen ocasiones en que se realizan igual las compras, pagando cualquier precio", por tratarse de algún producto requerido por los clientes.
Ya hablando con los consumidores, Débora Piacenza, una de las vecinas consultadas, expresó que "es considerable el aumento que sufrió la verdura, pero lamentablemente son cosas que debemos comprar todos los días", sentenció resignada esta señora mientras pagaba los artículos que llevaba para el almuerzo. "Antes podíamos comprar varias cosas para almacenar, pero ahora solamente lo hacemos diariamente". Una realidad de la que ya dimos cuenta en otro informe.
"Se están vendiendo tomates feos porque los mejores están muy caros", dijo un hombre mayor, describiendo la situación.
Hoy se llega a pagar de 4 pesos a 5,50 por un kilo de tomates, siendo que en el verano se encontraba mucho más barato. En cuanto a la lechuga, actualmente "cuesta carísima, con una diferencia grande con respecto a dos meses atrás". En tanto, "los precios de la papa y la cebolla subieron un porcentaje más reducido, el 20 por ciento es el promedio, aunque es factible ver subas del 25 por ciento", explicó el propietario de un mercado.
Es factible que aumente en la ciudad el precio del pan en los próximos días
El Centro de Industriales Panaderos de Pergamino está analizando la posibilidad de aumentar el precio del kilo de pan aunque todavía no se ha confirmado este nuevo incremento en el producto de la canasta básica de alimentos. "Nosotros en la actualidad estamos esperando una resolución porque en los últimos días los molinos subieron la bolsa de harina", manifestó el presidente de la entidad, Jesús Rodríguez. Asimismo añadió que "los aditivos que se agregan quizás en las semanas venideras suban también los valores, las margarinas valen más que hace unos meses pero la idea de los industriales es respetar el acuerdo firmado con el Gobierno. Las proporciones han modificado notablemente su relación y debemos estudiar los pasos a seguir de acuerdo a las reu-niones que haremos con nuestros socios", dijo el titular de esta institución local.
Acuerdo vigente
En el marco del acuerdo firmado con Nación para congelar el precio del pan a 2,50 pesos los panaderos bonaerenses habían denunciado que el veinte por ciento de los comercios dedicados al rubro en la provincia de Buenos Aires funcionan "en la clandestinidad"; en tanto indicaron que "si aumenta la materia prima el precio del pan podría incrementarse aunque las ventas en negro están en el orden del 35 por ciento" expresaron.
Los panaderos firmaron meses atrás con el Gobierno nacional un acuerdo por el que se comprometieron a mantener sin cambios el valor del pan francés de hasta ocho piezas por kilo a 2,50 teniendo en cuenta que este producto es uno de los más consumidos por los argentinos. Como contrapartida, desde la Nación se les informó sobre el compromiso de profundizar controles contra la venta clandestina de pan y comercios ilegales.
A su vez el acuerdo al que se llegó con el Ministerio de Trabajo nacional supone inspecciones mayores contra el empleo en negro y las panaderías que funcionan fuera de la ley, que se van a complementar con el seguimiento de los municipios y la Dirección de Rentas. Además, se había solicitado que el comercio ilegal de pan sea considerado un delito, porque hasta ahora sólo se labran las infracciones por temas de evasión. En este sentido, se consideró que "esto perjudica mucho a las panaderías formales porque las clandestinas pueden vender los productos a precios mucho más bajos. Sobre la posibilidad de aumentos en el precio del pan, desde la Federación provincial se añadió que el acuerdo con la Secretaría de Comercio Interior establece que el kilo se mantendrá en 2,50 pesos hasta fin de año, siempre y cuando no aumenten las materias primas que ya han subido en los días pasados. "Si el Gobierno mantiene los costos y cumple con la pautado, el valor no sufrirá modificaciones aunque, con relación a esto, es complicado que se pueda seguir adelante con esta política", expresó Rodríguez.
Un serio problema
La crisis por el desabastecimiento llegó a nuestra ciudad con lo que Pergamino dejó de diferenciarse de otras localidades del país. Todos los mayoristas que distribuyen aquí productos alimenticios tienen igual complicación que el resto de sus pares a tal punto que algunas góndolas en la mañana de ayer mostraban el faltante de artículos importantes que se necesitan diariamente y son artículos fundamentales de la canasta básica.
Una dificultad
Para conocer la realidad, LA OPINION visitó comercios del rubro alimentario y a través de las palabras de sus dueños pudo ratificar lo expuesto por los vecinos que previamente habían sido consultados. Según los comerciantes, "este problema se remonta a varios días" atrás. "Generalmente con mi socio compramos los lácteos de las marcas líderes y desde hace semanas no hay variedad, solamente encontramos leche de una segunda marca", manifestó el responsable de un autoservicio instalado a la vera de la avenida Roca. A su vez, y a los pocos metros, un hombre le dijo lamentándose al cronista que "nos tendremos que acostumbrar a mirar cómo lo mejor se va a la exportación, como pasaba décadas anteriores. La leche, los yogures y los quesos faltan por los problemas que existen en las fábricas y los que venimos diariamente a hacer las compras vemos que las heladeras están vacías".
No hay lácteos
Los mayoristas de lácteos en Pergamino coincidieron en que existen "serios y complicados problemas desde hace muchas semanas; las empresas nos entregan pero no la cantidad que requerimos en los pedidos previos que mandamos como siempre", manifestó uno de los dueños de una distribuidora local. Productores de leche explicaron a sus clientes las razones de este desabastecimiento y aseguraron que por el momento no se normalizará la situación. "En aproximadamente 45 días se empezarán a observar los cambios", reconoció Silvio Yarroch, titular de la empresa que en la ciudad comercializa La Serenísima.
Los inconvenientes en este rubro surgen a partir de la incidencia de distintos factores, entre los que se encuentra la crisis sufrida por una de las más importantes empresas productora de lácteos de la Argentina como es SanCor. "Los compromisos de exportación de leche en polvo contraídos hay que cumplirlos", aseguró una de las fuentes de la firma consultada por el Diario, quien añadió que esta situación "perjudica a todos ya que son razones más que suficientes para que pensemos en que continúe la tendencia alcista de precios".
Situación de la carne
"En Pergamino la entrega de la carne es normal. Tenemos calidad en cada uno de los cortes que vendemos y seguirá así por varias semanas", aseguró Oscar Simón, uno de los carniceros que fue entrevistado en la vípera con el objetivo de conocer la realidad de este sector.
"Los frigoríficos nos aseguraron la provisión para esta semana", manifestó otra de las personas vinculadas al ramo y coincidió en que "todos tenemos carne debido a que no hay problemas, por el momento".
Todos los propietarios de los locales consultados insistieron en que no faltará carne: "No habrá problemas con el abastecimiento y se espera que tampoco los haya en las semanas venideras", sostuvo el titular de un negocio céntrico. A su vez aseveró que "a muchos colegas se les estancó el consumo, aunque está bastante firme (la demanda) pese a los aumentos en los precios durante abril y mayo". Consideran los carniceros que "la gente sigue comprando porque los demás productos cárnicos, como el pollo y el pescado, están muy caros también".
Opinión de la gente
Por otra parte, LA OPINION salió a recorrer las calles para conocer el análisis de la situación que hacen los vecinos. Muchos de los consumidores interrogados tuvieron la misma visión al respecto: "Todos los días las cosas aumentan y, cuando no pueden subir los precios, no entregan nada en el interior del país", criticó una de las señoras que estaba en la cola de una carnicería, a punto de abonar la compra del día que consistía "en un kilo de bola de lomo y puchero". A los pocos metros, un hombre de unos 50 años dio su opinión respecto de los faltantes y el comportamiento de los precios: "Cuando no son los productores del campo es el Gobierno, pero la gente siempre se perjudica. Observando el panorama nacional, el vecino asombrado dijo: "Parece mentira que en los últimos días no hubo problemas". Sostuvo además que "acá no debe faltar carne, nos rodean las vacas y es imposible que nos mientan".
En otro negocio visitado, una de las personas que brindó su parecer fue una ama de casa: "No es nuevo que falten cosas aunque carne hubo toda la semana; en este momento la situación es normal porque vengo del supermercado y ahí había gente comprando".
Diferentes productos
En esta línea informativa, el Diario consultó por diferentes productos que no se observan en las góndolas. "Los artículos de limpieza están faltando en estos días, al igual que algunos alimentos que generalmente se entregan de manera normal", manifestó el titular de un autoservicio instalado en la intersección de General Paz y Moreno. Además, a las pocas cuadras de allí, coincidieron en que "hay faltantes en todos los rubros". Opinan los comerciantes que "el Gobierno no puede seguir adelante con el acuerdo de precios que pretende impulsar y, en este sentido, los que todos los días levantamos la persiana de un comercio presagiamos que se derrumba en cualquier momento esta economía".
La oferta y la demanda son los principales factores que inciden en los valores comerciales de frutas y verduras
Nuevamente los pergaminenses se quejan por los precios de las verduras y frutas de estación, cuyos valores están supeditados a la oferta y la demanda que exista en los mercados concentradores donde todos los mayoristas de Pergamino adquieren los productos. En una recorrida efectuada en la mañana de ayer por LA OPINION, se consultó a los comerciantes más importantes que se dedican a este rubro. Lo conversado sirvió para ratificar los comentarios de los consumidores cuando se quejan de que "es imposible encontrar siempre los mismos valores en las verdulerías de la ciudad, todos los días aumentan".
Sin embargo, y como suele ocurrir con otros rubros, no depende de los propietarios de los negocios ubicados en estos lares la suerte que corran los valores comerciales de estas mercaderías.
Los mayoristas locales están sujetos a las listas de los expendendores regionales que no contemplan los costos adicionales como el flete y, por ende, los pergaminenses no pueden cumplir con el valor de los artículos propuesto por el Gobierno. "Los morrones en este momento están por las nubes y todos los mayoristas de Rosario directamente los bajan del camión caros y, si no te gusta, te quedás sin el producto", afirmó un verdulero que tiene su local en el corazón del barrio Acevedo. Ocurre lo mismo con los tomates, uno de los artículos que ha tenido cambios considerables. "Nosotros hace unos días atrás pagamos los cajones de tomate cerca de los cien pesos y en la semana que terminó, el mismo producto, costaba treinta pesos en el mercado", reconoció uno de los mayoristas más importantes de Pergamino como ejemplo de la volatilidad de los precios. "La gente sabe que hay cambios constantemente y en los pizarrones no podemos mantener el precio, hasta existen personas que quieren hacer valer la lista que el Gobierno
difundía oportunamente. Es difícil hacer entender a los clientes que este tipo de acuerdos no está vigente en el interior del país, no porque nosotros no pretendamos cumplirlo sino porque el mayorista tiene su propia lista y hay que pagar si queremos tener la mercadería", afirmó una joven que está al frente de un modesto autoservicio en barrio Martín Illia.
Se defienden
Por su parte, los verduleros se defienden de las iniciativas oficiales; dicen que en este tipo de negocio no se pueden fijar precios porque la oferta es sumamente estacional y los valores pueden subir o bajar rápidamente. Además, aclaran, existe una enorme cantidad de variedades y calidades. "Establecer una lista es complejo en todo sentido; el calor, el frío o las lluvias pueden llegar a arruinar completamente, por ejemplo, las cosechas de algunas verduras de hoja. A partir de ese hecho hay poca oferta y sube el precio", afirmó otro reconocido mayorista de Pergamino al ser consultado por el Diario. "En la realidad es difícil encontrar los precios indicativos -añadió- y subrayó que eso también pasa con los precios en otros artículos. "Dependemos de la oferta y la demanda; si viajás al mercado de Rosario podés comprobar que el cambio es permanente y existe debido a muchos factores pero -insiste- la oferta y demanda es determinante". Para graficar su realidad de todos los días, un distribuidor ofrece un ejemplo
: "Si llovió y no pudieron juntar tomates, encontrás pocos bultos y los quieren cobrar carísimo; pero si estuvo todo bien en cuanto a la cosecha, el valor es diferente y hay abundancia, buscan venderlos en lo inmediato para que no se pongan en mal estado", remarcó un rosarino radicado en Pergamino que se gana la vida repartiendo verduras con su camión.
Clima desfavorable
El intenso frío de la semana pasada, que afectó la producción de varias frutas y hortalizas, acompañado por el incremento en el costo del transporte, fueron las explicaciones dadas por los responsables de verdulerías para justificar las subas registradas en todos los productos frescos. Razones que no bastan a los consumidores, quienes están sorprendidos por algún inesperado incremento de precios.
"También encarece a la verdura el valor de transporte, de los plaguicidas y el aumento del costo de la mano de obra", dijo un comerciante del Centro y otro de los argumentos escuchados de boca de los dueños de verdulerías es que "existen ocasiones en que se realizan igual las compras, pagando cualquier precio", por tratarse de algún producto requerido por los clientes.
Ya hablando con los consumidores, Débora Piacenza, una de las vecinas consultadas, expresó que "es considerable el aumento que sufrió la verdura, pero lamentablemente son cosas que debemos comprar todos los días", sentenció resignada esta señora mientras pagaba los artículos que llevaba para el almuerzo. "Antes podíamos comprar varias cosas para almacenar, pero ahora solamente lo hacemos diariamente". Una realidad de la que ya dimos cuenta en otro informe.
"Se están vendiendo tomates feos porque los mejores están muy caros", dijo un hombre mayor, describiendo la situación.
Hoy se llega a pagar de 4 pesos a 5,50 por un kilo de tomates, siendo que en el verano se encontraba mucho más barato. En cuanto a la lechuga, actualmente "cuesta carísima, con una diferencia grande con respecto a dos meses atrás". En tanto, "los precios de la papa y la cebolla subieron un porcentaje más reducido, el 20 por ciento es el promedio, aunque es factible ver subas del 25 por ciento", explicó el propietario de un mercado.
Es factible que aumente en la ciudad el precio del pan en los próximos días
El Centro de Industriales Panaderos de Pergamino está analizando la posibilidad de aumentar el precio del kilo de pan aunque todavía no se ha confirmado este nuevo incremento en el producto de la canasta básica de alimentos. "Nosotros en la actualidad estamos esperando una resolución porque en los últimos días los molinos subieron la bolsa de harina", manifestó el presidente de la entidad, Jesús Rodríguez. Asimismo añadió que "los aditivos que se agregan quizás en las semanas venideras suban también los valores, las margarinas valen más que hace unos meses pero la idea de los industriales es respetar el acuerdo firmado con el Gobierno. Las proporciones han modificado notablemente su relación y debemos estudiar los pasos a seguir de acuerdo a las reu-niones que haremos con nuestros socios", dijo el titular de esta institución local.
Acuerdo vigente
En el marco del acuerdo firmado con Nación para congelar el precio del pan a 2,50 pesos los panaderos bonaerenses habían denunciado que el veinte por ciento de los comercios dedicados al rubro en la provincia de Buenos Aires funcionan "en la clandestinidad"; en tanto indicaron que "si aumenta la materia prima el precio del pan podría incrementarse aunque las ventas en negro están en el orden del 35 por ciento" expresaron.
Los panaderos firmaron meses atrás con el Gobierno nacional un acuerdo por el que se comprometieron a mantener sin cambios el valor del pan francés de hasta ocho piezas por kilo a 2,50 teniendo en cuenta que este producto es uno de los más consumidos por los argentinos. Como contrapartida, desde la Nación se les informó sobre el compromiso de profundizar controles contra la venta clandestina de pan y comercios ilegales.
A su vez el acuerdo al que se llegó con el Ministerio de Trabajo nacional supone inspecciones mayores contra el empleo en negro y las panaderías que funcionan fuera de la ley, que se van a complementar con el seguimiento de los municipios y la Dirección de Rentas. Además, se había solicitado que el comercio ilegal de pan sea considerado un delito, porque hasta ahora sólo se labran las infracciones por temas de evasión. En este sentido, se consideró que "esto perjudica mucho a las panaderías formales porque las clandestinas pueden vender los productos a precios mucho más bajos. Sobre la posibilidad de aumentos en el precio del pan, desde la Federación provincial se añadió que el acuerdo con la Secretaría de Comercio Interior establece que el kilo se mantendrá en 2,50 pesos hasta fin de año, siempre y cuando no aumenten las materias primas que ya han subido en los días pasados. "Si el Gobierno mantiene los costos y cumple con la pautado, el valor no sufrirá modificaciones aunque, con relación a esto, es complicado que se pueda seguir adelante con esta política", expresó Rodríguez.
Un serio problema
"Nosotros esperábamos que el precio de la harina continuara como se acordó en su momento, pero las bolsas llegaron con aumento; es difícil que los panaderos sigan perdiendo dinero si las materias primas suben porque es un gasto que no podemos afrontar", subrayó Jesús Rodríguez y agregó que "no son nuevos los reclamos del sector panaderil, siempre existen contratiempos en la actividad y no nos cansamos de solicitar que terminen de cumplirse las cosas pautadas con los funcionarios de turno. Es de esperar que los clientes observen cambios en los pizarrones pero es inevitable hacerlo, está en juego la rentabilidad de estos comercios y no podemos arriesgarla", concluyó el presidente de la entidad que nuclea a los panaderos en Pergamino. (PUNTO CERO-La Opinión).
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