Más de 120 familias ocuparon terrenos. Se sumaron a las siete ocupaciones que hay desde hace un año, cuando acompañaron la ola de tomas de Villa Soldati. Gutiérrez, pasó de alentar las tomas a avalar su violenta represión con gases y balas de goma.
El pasado fin de semana 120 familias tomaron terrenos privados en Quilmes. El jueves la justicia ordenó el desalojo del lugar que terminó en fuertes enfrentamientos y represión policial con balas de goma y gases lacrimógenos.
Hace un año, luego de la toma en Villa Soldati, en Quilmes hubo al menos quince intentos de tomas y posteriores asentamientos de los cuales hoy se mantienen siete. Más de dos mil familias están viviendo de forma precaria en estas nuevas villas.
El déficit habitacional que existente en la provincia de Buenos Aires vuelve a verse reflejado en el conurbano bonaerense y Quilmes es un claro ejemplo. En diciembre del 2010, luego de que centenares de familias tomaran el predio en Villa Soldati, se produjo un efecto contagio y en diferentes puntos del conurbano bonaerense se reprodujo este accionar.
Pero el distrito del Barba Gutiérrez tuvo una particularidad. Permitió que miles de personas se asentaran en diferentes terrenos, la mayoría de ellos privados, generando así siete nuevos asentamientos, dos de ellos con más de mil familias cada uno, que viven hoy sin servicios básicos y en terrenos sumamente contaminados, que funcionaban como piletones de dos frigoríficos de la zona (Finexcor y Penta).
El centenar de gente que ya habían intentado apoderarse de terrenos hace un año atrás, aunque sin éxito, volvieron en búsqueda de tierras, ubicándose en terrenos desocupados en Avenida La Plata y Smith en Quilmes oeste.
El pasado jueves personal de infantería efectuó el desalojo del predio, que en principio fue pacífico, pese a que los ocupas prendieron fuego algunas de las viviendas antes de dejar el lugar.
Minutos después realizaron un piquete sobre Avenida la Plata con quema de gomas que fue fuertemente reprimido por la policía con gases lacrimógenos y balas de goma que quedaron desperdigadas por todo el lugar, al igual que piedras y cascotes que eran arrojados por los manifestantes. Hubo corridas, heridos y destrozos en la zona hasta que se logró contener la situación.
Giro del Barba
En este caso el intendente Francisco “Barba Gutiérrez”, a diferencia de la posición que tomó un año atrás, se opuso a la toma y aseguró que en este caso se hace con una “intencionalidad política más que una necesidad” y afirmó que “la empresa firmó un convenio con el municipio para donar un sector del terreno para la construcción de 78 viviendas.
Ya tenemos la aprobación, el presupuesto y el proyecto. Esto se aprobó en el Concejo Deliberante el día jueves y el fin de semana hubo gente que toma la tierra con la idea de que, de esa manera, estas viviendas van a ser de ellos. Quiero dejar en claro que nosotros no estamos de acuerdo con este accionar, menos cuando ya hay un plan avanzado”.
A pesar de estos argumentos, fuentes cercanas al gobierno comunal aseguran que la decisión reside en el temor de que nuevamente, a partir de una toma de tierras, surjan muchas más.
En Quilmes, en los cuatro años de gobierno de Gutiérrez, según los datos oficiales, se finalizó con la construcción de 600 viviendas sociales. En el último año se formaron siete nuevos asentamientos en los que viven más de dos mil familias. (La Política OnLine).
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